Motivación existencial

Ricón para pequeñas reflexiones ahora que las puestas de sol se ven desde los cuarenta...
por Dondo Moreno




miércoles, 28 de febrero de 2024

Polish

 Ventajas de trabajar en un sitio así, con gente de tantos sitios y tan diferentes procedencias. Estos días estamos celebrando por la mañanas un evento denominado INTERNATIONAL CULTURE FAIR, con el objeto de que algunos de los compañeros que comparten nacionalidad, nos hablen de sus países, mostrándonos lugares a visitar, cuestiones emblemáticas del país y algunas muestras de la gastronomía autóctona.

 Hoy tocaba recibir información sobre Polonia, país del que tenemos una pequeña representación de cinco personas, todas chicas, que nos han dado una pequeña lección de gramática de su muy complejo idioma, mostrado información sobre los muchos lugares que se pueden visitar y obsequiado a los que hemos asistido,  con algunas viandas: dulces, caramelos y algo de queso y embutido ahumado, regado con refresco con sabor a caramelo, muy popular en aquellos lares.

 Tras visionar alguno de los videos que han proyectado entre tanto, tras la conclusión del último, se ha iniciado un breve pero intenso debate, en el que nuestras compañeras insistían en lo mucho que ha cambiado el país, en cómo se ha modenizado, dejando atrás la etapa comunista, en la que la compleja infraestructura de productos y servicios de la economía socialista, dejaba muchas veces desabastecidos supermercados y otros servicios básicos, condenando a sus ciudadanos a una vida de subsistencia y carestía. 

 Puede que los tiempos cambien, pero nunca dejamos de proyectar en lo que somos, de dónde venimos. Si ya lo tenía claro por otros medios, hoy, casi sin querer, he vuelto a tener constancia, a percibir ese peculiar carácter polaco, dotado de dosis de nostalgia y tristeza, muy común en  aquellos que se han visto expuestos durante mucho  tiempo a situaciones de tiranía, injusticia o simple y puro escarnio.

  Claro que visitaré algún día Cracovia y entraré en la librería Matras de la plaza del Rynek, catalogada como la librería más antigua del mundo. Será una experiencia maravillosa, como la de visitar un país amable y cercano, cuyas gentes, se merecen ser lo que se propongan, sin sufrir menoscabos de nada, ni de nadie.

Partido a partido

 No, no estaba muerto, al parecer estaba de parranda, de hecho cada día lo está más.

 Hace quince días Nuñez Feijóo era una especie de cadáver político, se había alimentado la idea de una caída adelantada a cuenta de unas elecciones en el que había sido su feudo y que iban a ser su derrota definitiva; hace quince días en el principal partido de la oposición ya estaban poco menos que afilando los cuchillos para iniciar el proceso de sustitución.

 Cómo han cambiado las cosas en apenas dos semanas. De perder Galicia a manos de los sedientos de poder nacionalistas, a renovar la mayoría absoluta y de propina, un caso de corrupción a cuenta de una oscura adjudicación de contratos de mascarillas por la pandemia, agita al principal partido de gobierno y tambalea la ya de por si precaria mayoría que sostiene a este ejecutivo.

 En política nunca se sabe. Hoy estás muerto y mañana eres más presidenciable que nunca. Igual es lo que pasa por vender la piel del oso antes de cazarlo, que cuando nadie lo daba por válido, han aparecido Rueda y Ábalos para revigorizarle. Quien sabe lo que pasará mañana. Visto lo visto, en este país en política nos hemos vuelto más cholistas que el propio Simeone. Partido a partido.

  

martes, 27 de febrero de 2024

Mary Poppins

 Mary Poppins, la institutriz más famosa de la historia del cine, (con permiso de fräulein Maria Rainer), está este año de aniversario. Hace sesenta años fue estrenada, (en agosto de mil novecientos sesenta y cuatro) en salas de Estados Unidos, la cinta dirigida por Robert Stevenson basada en el libro homónimo de Pamela Lyndon Travers.

 A Julie Andrews le correspondió el honor de interpretar el papel de tan peculiar cuidadora infantil, haciendo además doblete en el caso de Sonrisas y lágrimas. Actriz versatil y polivalente, supo ampliar su carrera cinematográfica con otra suerte de papeles para no caer en encasillamientos obvios.

 El año de la efeméride de un título tan entrañable como inolvidable para millones de niños que ahora somos adultos y otros que algún día lo serán, ha comenzado enrarecido con el anuncio de la British Film Board, (Agencia británica de clasificación de películas), de la recalificación de la cinta de la categoria U a la PG, con el objeto de advertir a los padres del lenguaje discriminatorio que se emplea en la película.

 El motivo viene por el uso del término Hottentot (Hotentote), palabra utilizada históricamente por los europeos para referirse a los khoekhoe, un grupo de pastores nómadas en Sudáfrica y que ahora se considera una expresión ofensiva racista.

 Sin ánimo de ofensa es imposible faltar a nadie. Cosas así se sacan de contexto y redundan en esta especie de inercia purista de reconducir cosas que son parte de obras de ficción y que se han formulado en aras de la libertad de creación y  expresión.  Con la recalificación se invita a ver la película con un prejuicio clasista del que sin duda, la obra carece. Un error más, aunque la acción de la BFB sólo clasifica, no reescribe ni invita a cambiar títulos de libros, como ha sucedido con alguna novela de Agatha Christie.

 

 

 

lunes, 26 de febrero de 2024

Ayunos

 Láminas de un gris plomizo iluminan en medio de la oscuridad. Qué tristes son los días en los que el sol no despunta en ningún instante. Tiempo de cuaresma, de ayunos espirituales y de luz, sin necesidad de esperar a los viernes.

 Vaivenes climatológicos. Alergías fotosensibles y  respiratorias.Tanto y tan variable. Como un ancla pese a todo, en medio de los zarandeos.

 Nada como salir y dejar que te envuelva el viento, ese que azota las persionas y ulula entre sus recovecos.

  Semanas que comienzan, semanas que transmiten su mensaje.


 

 

 

sábado, 24 de febrero de 2024

Reconciliación

 Trasteo por el Facebook, aún en la cama, después de mi cura de sueño de los viernes, esa que me hace meterme en la cama a las diez de la noche, sin hora de despertarme al día siguiente.

 Sigo infinidad de páginas de animales. Perros, gatos, mapaches, nutrias, cocodrilos... Me da paz ver a los bichejos hacer carantoñas a sus dueños y cuidadores; especialmente adoro a Luna, una pantera negra que vive en una moderna dacha en Rusia, rescatada de una muerte segura tras ser repudiada por su madre, un animal de un circo. 

 Además de los animales, la red social, que no escatima el valor informativo que suponen mis likes, hace funcionar sus logaritmos para aportarme otros dominios, en donde desfilan grandes títulos de la historia del cine, rubias de infarto como Olivia Newton John o Farrah Fawcett o páginas de música, puertas a la nostalgia, donde revivo al compás de canciones de los años ochenta, los años de mi adolescencia.

 Hoy me ha saltado un vídeo de una actuación en directo de Whitney Houston, interpretando saving all my love for you, en un programa de televisión. Ataviada con un elegante traje verde de una pieza y su inconfundible meleza de rizos. Con esa elegancia que mostraba en el escenario, sus largar piernas y esa cara preciosa de la que me enamoré perdídamente hasta el punto de tener la carpeta del instituto forrada de fotos suyas. 

 Aquel amor platónico de adolescente, que de algún modo se enfadó de adulto con la Whitney madura, aquella que no vivía la vida de control que aparentaba llevar y que sacó a paseo todas sus miserias de drogas, vida disoluta y excesos, que le llevaron a la ruina, a arrastrarse por los escenarios, a olvidar la letra de sus canciones, a una muerte oscura y solitaria en una bañera de hotel.

 Durante mucho tiempo he renegado de la cantante que me encandilaba, la que fui a ver al viejo pabellón de deportes, hace más de treinta años, en mi primer año de estancia en Madrid. Por alguna razón no aceptaba su final y lo que esta escondía, porque estaba ciego y no era capaz de ver la realidad, esa que permanece oculta tras la pantalla de la idealización. 

Acaba el video, se oye una salva de aplausos mientras ella sonríe, dejando a la vista sus dientes blancos perfectamente alineados. La que fue y será, pues de algún modo me he reconciliado con ella y sus canciones, vuelven a estar en mis listas de audio. Por siempre, Whitney.

  

 

viernes, 23 de febrero de 2024

El desierto de los tártaros

 Un joven oficial recibe notificación de su nuevo destino y parte de inmediato hacia una fortaleza fronteriza, alejada de todo y sin apenas movimiento y ruído, con vistas a una zona desértica del norte, en la que apenas ocurre nunca nada. 

 Frente al desierto donde hace tiempo llegaron los tártaros, el teniente Giovanni Drogo se encuentra con una empalizada olvidada del mundo, donde sus oficiales parecen abducidos por un lugar que invita a todo menos a permanecer en él mucho tiempo.

 Convencido de la temporalidad de su estancia allí, como un simple destino de paso para hacer méritos,  Drogo se inmiscuye en los asuntos del día a día de la guarnición, sin darse cuenta de cómo el tiempo pasa despacio, sin que el traslado parezca llegar nunca.

 Escrita en los años cuarenta del siglo XX por Dino Buzzati, periodista del Corriere della Sera  y disponible en castellano en edición de bolsillo de Alianza Editorial, El desierto de los Tártaros es  una novela inquietante, reflexiva, profunda y melancólica, sobre lo que es la vida y el paso del tiempo. 

 Una metáfora inmensa. Una auténtica obra maestra.

 


 

 

 

jueves, 22 de febrero de 2024

Ciclo de vida

-  Hola guapo

- ¿Qué tal, cómo estás?

- Mi madre ha muerto.

  Vía whatsapp. Frío como un témpano me quedé, aunque nada comparable a ese calambre que la muerte deja en el alma cuando alguien tan importante se va y se convierte en una sombra permanente.

 Apenas unos días antes estuve con ella, como otros tantos viernes, picando algo; me enseñó una foto de una ecografía de su nieto, cuya llegada al mundo está prevista para dentro de tres escasas semanas.

 Qué paradojas tiene la vida;  cuando una se va, otro llega, perpetuando ese ciclo de la vida con sus cuatro fases, esas que machaconamente nos enseñaron en la E.G.B.

Naces, creces, te reproduces y mueres. 

Que tu biznieto siga tu estela y desde donde quiera que te encuentres, lo veas crecer sano y feliz. Que la tierra te sea muy leve. Descansa en paz.

 

 

 

miércoles, 21 de febrero de 2024

Vía pecuaria

 Madrid es una vía pecuaria, una zona de paso de ganado trashumante, que deambula por las calles del centro, trasladando a sus animales con sus cencerros, animando con su sonido alegre a lata, unas zonas normalmente martirizadas con el sonido de motor y bocinas de auto.

 El campo se erige en protagonista, al menos una vez al año y su paso es alegre, amable y divertido. Reclamo que atrae a curiosos y anima a turistas a inmortalizar una estampa inesperada, que no viene en las guías de viajes.

 Hoy la Puerta de Alcalá no está llena de ovejas que caminan juntas con mirada soprendida, deslizando sus pezuñas por el asfalto. Hoy los inquilinos del campo que copan los carriles de la amplia glorieta de la Plaza de la Independencia, son tractores de gran tonelaje, dispuestos a entorpecer el tráfico como manera de hacer valer sus reivindicaciones.

  Solidaridad total, por unos trabajadores y productores de una actividad tan necesaria como menospreciada por intermediarios, grandes superficies y administraciones, que no velan, ni protegen al sector primario. Que interrumpan, molesten y actuen cuanto crean necesario, si con ello consiguen que se hagan eco de sus demandas; a buen seguro que de algún modo eso nos repercutirá a los demás, en el bolsillo. Que prime el beneficio de una mayoría y no sólo el de unos cuantos.

martes, 20 de febrero de 2024

Enfermos en soledad

 Juan Carlos Unzué, antes paraba balones en una portería de fútbol, ahora lanza disparos, como si fuera un delantero, erigiéndose en portavoz de un colectivo, el de los enfermos por Esclerosis Lateral Amiotrófica, (ELA), del que desgraciadamente forma parte.

 Hoy comparecía en el Congreso de los Diputados, con el objeto de ampliar la visibilidad de una enfermedad que además de rara y cruel, apenas tiene suficiente visibilidad y comprensión. 

 Tan sólo cinco diputados han asistido al acto. De trescientos cincuenta que tiene el hemiciclo, sólo cinco han creído importante o necesario, asistir a un acto así, de divulgación y reivindicación,  tan necesario como imprescindible, de los derechos de unas personas que necesitan toda la ayuda posible.

 No sabe uno qué es más duro o doloroso, si las consecuencias de una enfermedad demoledora o la indiferencia de los representantes políticos, incapaces de mostrar un poco de empatía, tacto o simplemente solidaridad, con unas personas condenadas a una muerte en soledad, sin asistencia ni ayudas económicas, sin el auxilio obligatorio que las instituciones deberían brindarles.

 Si el Estado no está para ayudar y proteger a este tipo de personas, en este tipo de situaciones, entonces, ¿Para qué está? Lo de esta mañana es extensible a otras enfermedades, cuyos pacientes sufren de la misma desidia e indefensión. Hizo bien Unzué en afear con elegancia e ironía a los que hoy se han ausentado, con una frase que va a quedar para la posteridad:

 "Lo primero que quisiera saber es cuántos diputados y diputadas hay en la sala. ¿Podéis levantar las manos? Creo que he contado cinco. Me imagino que el resto de diputados y diputadas tendrán algo muy importante que hacer".

 Para remover conciencias, si es que algunos la tienen.

 

 

lunes, 19 de febrero de 2024

Críos

 Sábado de clase atrasada; dos horas estudiando los juicios de Kant, analíticos y los sintéticos, a priori y a posteriori.Para poner la guinda a la sesión, repaso a la Restauración de Cánovas y Sagasta, a las semejanzas de cosas que pasan ahora aquí y ya lo hacían hace más de ciento veinte años.

 Los últimos diez minutos, normalmente de repaso de lo visto y de preparación de la semana, hasta la próxima clase, se convierten en una alegato íntimo y feminista de alumna, niña de dieciseis años, que me habla de la Ley Trans, de la necesidad de poder elegir si ser hombre, mujer u otra cosa, de la inconveniencia de necesitar una certificación médica para pedir un cambio de sexo, así como de tener que pedir autorización de los padres...

 

 Apenas no despuntaba del suelo un metro y medio y la pala parecía en su mano un pesado martillo hidráulico que en cualquier momento se le iba a caer. Acompañando a su madre para jugar un partido de liguilla, que iba a ser todo menos un trámite.

 Como tirarle a una pared, que no hay manera de traspasar, ni con bandejas, ni con globos, ni con golpes divididos... Sólo encontré talón de aquiles en los saques, esquinados, poniendo en entredicho su revés, poco definido. Con todo, no fue suficiente.

 Madre e hijo nos pasaron por encima, gracias al buen hacer del pequeño, que embutido en una camiseta del Deportivo de la Coruña con su nombre, Lucas, terminó la hora y media de partido sin despeinarse , sin soltar una gota de sudor. Remate perdedor para el domingo y para el fin de semana.

  Críos que soprenden, por su madurez y destreza, por la pasión con la que hablan y actúan. No se puede vivir de espaldas a la realidad de unas nuevas generaciones, que aunque aún están en barbecho, pronto estarán en el centro de todo. 

sábado, 17 de febrero de 2024

Calle Pez

 Como llego con antelación, gracias a esa manía de ser escrupulósamente puntual que parece que se acentúa con los años, decido bajarme en la estación de Sol, para subir caminando hasta la sala donde hemos quedado para ver un montaje de comedia y danza del vientre.

 La Calle del Carmen es un hervidero de gente, como siempre, en donde el idioma que menos se escucha hablar es el español, con todo, se camina con fluidez, dando al paseo, lleno de tiendas con escaparates iluminados, un aroma de relajación y regusto que hace que los pies se vayan solos; hago un repaso de los locales y veo una tienda nueva de alpargatas; me llama la atención el logo que emplea la última letra de alpargata sustituyendo la A por un dibujo que aunque se asemeja al calzado que vende, en realidad parece una polla.

 No tardo en desembocar en Callao, llena de bombillas de colores, una versión castiza de Time Square neoyorquino cada vez más lograda;  ya no queda casi nada de aquella plaza vestusta transitada por coches que sólo tenía como reclamo lumínico, el neón de Scheweppes del Edificio Carrión. 

 Bajando por la remozada Gran Vía dejo a mi derecha la Calle Libreros, y los recuerdos se me amontonan en la cabeza, regateando con la gruñona Felipa el precio de algún libro de derecho, cuyo coste suponía quedarme sin beber copas un mes.

 San Bernardo, no parece la misma. Algún hotel nuevo, tiendas y restaurantes que lucen limpios y modernos; ese aroma rancio y viejo de Noviciado ha perdido fuelle; en la Calle de la Cruz Verde, mi añorado Boñar de León se llama ahora  La Cuenca. ¿Ganaría alguien el viaje a Canarias para dos personas si era capaz de comerse entero un codico montañés? 

 Por fín mis piés deambulan por la Calle del Pez y entro en una especie de cápsula del tiempo; pese a sus remozados accessos y los locales nuevos que hay en ella, sigue todo igual, como si por ella no pasara el tiempo. Me mezclo con los transeuntes, la mayoría chavales en edad universitaria y dejo que los viejos aromas de fin de semana estudiantil, me embarguen, buscando con ansia a mis amigos, para entrar cuanto antes en algún garito y tomarnos una cerveza.  

viernes, 16 de febrero de 2024

Pontón

  Un pontón es un barco, empleado en labores de transporte de mercancias en ríos o de materiales para la contrucción de puentes; en las zonas portuarias es utilizado en labores de limpieza de los fondos.

 Es por tanto un embarcación auxiliar, de pequeño calado, un valioso elemento de ayuda en labores grandes.

 Es también el apellido de la candidata del Bloque Nacionalista Galego, (BNG), Ana Pontón, quien se jacta de sólo emplear el gallego en sus alocuciones;  Como buena nacionalista, alimenta esa pátina de exclusividad autóctona, de limpieza cutural, ajena a los elementos espurios que representa el castellano. Curioso que haya nacido en Sarria, (criada en Chorente una aldea del municipio), uno de los lugares más cosmopolitas de toda Galicia, al ser zona de paso o punto de partida habitual de aquellos que disponen de poco tiempo  y quieren hacer el Camino de Santiago.

 Con las espadas en todo lo alto, así se presentan los comicios que se van a celebrar el próximo domingo día dieciocho de febrero, con un claro ganador, como de costumbre, pero sin garantías de que vaya a revalidar la mayoría absoluta, después de que Nuñez Feijoo abandonase la cabeza de la Xunta para liderar a su partido en Madrid

 Veremos qué sucede, si como parece, existen posibilidades reales de que haya traspaso de poderes, de que un pontón electoral drene las aguas del gobierno gallego y las limpie de todos los excesos de tantos años de gobierno continuado. La posibilidad existe, aunque la candidata a la alternancia tenga poco de original y despierte más fobias que filias. Tal vez los números les lleguen, en su inevitable ascenso, apoyados por un partido socialista cada vez más gregario en buena parte de los territorios históricos de este país.

Residencias

 Continúa el tenso debate en las sedes parlamentarias y en los medios de comunicación en lo referente a la gestión de los primeros día de la pandemia de dos mil veinte, en lo tocante a las residencias de ancianos, en cuyos recintos un número indeterminado de personas perdió la vida a consecuencia del coronavirus.

 Aunque muy probablemente pudiera hacerse extensible a otros territorios del país, es especialmente áspero y sentido en la Comunidad de Madrid, donde la oposición lleva semanas lanzando andanadas a la presidenta Díaz Ayuso.

 No es un debate nuevo. Ya en su día el que era vicepresidente del gobierno, Pablo Iglesias y la propia presidenta de la comunidad comenzaron un rifi-rafe sobre quien era responsable de la gestión de las residencias y geriátricos, competencias que la cogobernanza de la que hablaba Pedro Sánchez no parecía dejar muy claro.

 Movido, como es lógico por otra parte, por asociaciones de familiares de víctimas, el tema vuelve a la actualidad a raíz de la opacidad con que la administración madrileña está manejando los datos, negando el acceso a las actas que policías, Protección civil y medios médicos  levantaron en su día, tras cada una de las actuaciones que llevaron acabo en aquellos centros, en donde en muchos casos, solo pudieron certificar la defunción de los ancianos, algunos de los cuales llevaban horas, incluso días fallecidos en sus camas, sin aparente socorro o asistencia.

 Dias aciagos, tremendos; acongoja pensar en la muerte triste y solitaria a la que se vieron abocadas muchas personas, sin recibir una mínima asistencia, entregados a su fatal destino en la más completa soledad, incluso en sus propios sepelios, a los que por razones de salud pública, los familiares no pudieron asistir.

 Un hecho así deja una huela indeleble, una marca en el alma. Por respeto y por homenaje a tantas personas anónimas que se han ido de esa manera, debería abrirse una comisión conjunta, ajena a disputas políticas,  que permitiera conocerse qué protocolos se activaron y cuáles no, con vistas a conseguir, entre otras cosas, aprender de los errores cometidos para posibles futuras situaciones similares. 

 

jueves, 15 de febrero de 2024

Nadal

 Parece que se nos ha deshinchado el globo, que el perfecto atleta, motivo de orgullo patrio y de cuya imagen nadie ponía en tela de juicio nada, se ha venido a pique. 

 Lo que raqueta le ha dado, se lo niega la lengua, ese podría ser el titular, aunque también habría que destacar alguna de sus últimas acciones, como la de aceptar colaborar como embajador de su federación de tenis, con el Gobierno de Arabia Saudí a cambio de unos desorbitantes emolumentos. 

 Del pedestal a los piés de los caballos. Dar opiniones conlleva echarte a mucha gente en contra, a cuantos no piensan igual, para empezar, aquellos que si encima merodean por las redes sociales, no tardarán en destriparte sin el menor de los miramientos. Haters, como se dice ahora, que emplean la intimidad de la tablet o el ordenador para lanzar sus andanadas sin piedad.

 Críticas por venderse a los petrodólares, al país que menos respeta los derechos humanos del mundo, críticas por dar su particular visión de los ingresos que los tenistas del circuito profesional reciben, donde la paridad debería quedar en un segundo plano, primando lo que produce cada profesional, más allá de su sexo; en este segundo aspecto, las opiniones contrarias arrecian.

 Nunca debería negársele al genio de Manacor la valentía de expresarse como crea adecuado, se lo ha ganado en la pista y es su derecho, como lo es de todos;  no debería restarle  un ápice de aprecio o admiración por su brillante carrera deportiva. Ese respeto , por supuesto, no es obstáculo para discrepar de sus opiniones o actos; particularmente me hubiera gustado que tanto él como otros deportistas profesionales tuvieran más escrúpulos a la hora de aceptar ofertas de países tan poco democráticos como éste; tampoco estoy de acuerdo en su queja sobre los premios que reciben mujeres y hombres en los torneos profesionales; el tenis femenino probablemente es uno de los pioneros en la búsqueda de igualdad en lo referente a alcanzar notoriedad y protagonismo, muy por delante de otros deportes donde la condición femenina vive en un segundo plano permanente. Cualquier iniciativa que invite a equilibrar a ambos sexos no puede ser más que correcta. Que la diferencia de ingresos venga de los contratos publicitarios privados, no de los premios en metálico que reparten los organizadores de torneos, que deben buscar abonar el espectáculo sobre la pista siempre con grandes sumas de dinero.

 Genio y figura dentro y fuera de las canchas. Una cosa parece evidente y es que, pese a su más que próxima retirada, Nadal no dejará nunca de ser centro de atención.

miércoles, 14 de febrero de 2024

El espectáculo debe continuar

 La bautizaron en su día como la caja tonta y desde luego no fue por capricho, ni por casualidad. Por mucho que quieran ponerla en decadencia, sigue teniendo su predicamento; es el encanto de las emisiones planificadas, de moverse entre un canal y otro cuando no se tiene pretensión en realidad de ver nada; terapia de mando a distancia, poder de quitar y dar voz, una forma de desconectar.

  Paro en el canal de las citas, que cenan igual que lo hacen quienes lo visionan; llego tarde y salta la programación a un programa de información y testimonios, abonado a la divulgación de hechos luctuosos; actualidad en la que manda el horrendo crimen de dos agentes de la Guardia Civil  en aguas de Barbate.

 Presentadores que sobre actúan, caras conocidad de esa modalidad de periodismo que mezcla el papel cuché con la carnaza de la crónica negra, un género que tan bien practicamos por estos andurriales. Saludan a dos mujeres, acomodadas en un sofá con una bandera de España, ubicada detrás de ellas. Madre  y hermana de uno de los finados; a diferencia de los familiares del otro fallecido, que declinaron asistir al programa, éstas cumplen con su papel, de mostrar dolor, sifrimiento e indignación. Pese a que lo pretenden, no siento pena, ni solidaridad, en realidad siento mucho asco. La demagogia se viste de muchas formas, también de  miserias en horario prime time, manipulando a familiares que mezclan dolor con patriotismo de bandera. El espectáculo debe continuar, más carne, aunque huela y sea tumefacta. Dolor como mercancía. Vergüenza ajena. 

 No me queda otra que apagar la televisión y ponerme a otra cosa. Mala idea, la de dejarme llevar, para variar.

martes, 13 de febrero de 2024

La sociedad del cansancio.

 Nueva entrega del filósofo coreano que piensa y escribe en alemán, Byung- Chul Han, trabajo en el que insiste en buena parte de los argumentos de denuncia que forman parte de su ideario existencial.

 Remarca el paso de la sociedad disciplinaria y de control en la que tanto incidió Focault, a la sociedad del rendimiento, donde la autoexigencia sustituye a la orden externa que obliga y pide actuar. Somos esclavos de cumplir objetivos, una suerte de prometeos modernos en constante movimiento y estado de creación personal, orientados a la obtención de resultados, sin tiempo para reposar, meditar o encontrar espacio para uno mismo. Sociedad donde trabajo y ocio vienen determinados por los mismos objetivos, en los que los jefes somos nosotros mismos, dueños de nuestro tiempo y de cómo lo distribuimos, sometidos a un proceso de mecanización de los actos que nos sume en un profundo estado de cansancio y de frustación, la que se deriva de no alcanzar lo que se pretendía.

 Insiste en argumentos ya destacados por el Sociólogo Bauman, en esa sociedad líquida de usar y tirar donde hay que hacer todo y, lo que es peor, deprisa y sin margen de error.  

 Vivimos una etapa que ha superado el marxismo en todas sus vertientes; sería interesante saber qué pensaría el autor de El Capital, de su percepción de la plusvalía, ahora que el trabajador es dueño de su tiempo y decide cuánto emplea en sus tareas, sin sentir en el gaznate el aliento de ningún jefe impositor y que aplica esas mismas prácticas en su tiempo libre, donde el ocio más parece una tarea que un momento de expansión y desconexión. 

 Trabajo de denuncia y de concienciación que busca humanizar la vida, esa que exponemos como si fuese mercancia en las redes sociales. Lectura para reflexionar y, quien sabe, si para introducir cambios en una existencia donde el reposo no tiene cabida.

 


 

 

lunes, 12 de febrero de 2024

Flemas

 Cada vez es más cierto eso de que las redes sociales las carga el diablo, son una tentación para expresarse y, por supuesto, para desahogarse, pero dejan en cada comentario una huella que con el tiempo puede ser un lastre o un borrón con consecuencias. 

 A algunos les ha costado perder un contrato deportivo profesional, incluso hay quien ha perdido nada menos que un ministerio. La lista es amplia y daría para escribir largo y tendido. Hay que pensarse mucho lo que se dice y en dónde se dice.  

  El último caso llamativo es del del atleta Mo Katir, marroquí afincado en la localidad murciana de Mulas, al que la Unidad Integral de Atletismo (UIA), ha suspendido de manera provisional por razón de haberse registrado hasta en tres ocasiones, fallos de localización en controles antidopaje.

 La suspensión es una medida cautelar y da al acusado la oportunidad de presentar las alegaciones pertinentes en su defensa, aunque varios compañeros de deporte, a través de las redes sociales mayoritariamente,  no han dudado en acusar abiertamente a Katir, considerando correcta la actuación de la UIA, de cuyo rigor nadie duda y solicitando veladamente una sanción por dopaje.

 La reacción del acusado ha sido la de entrar al trapo, en lugar de guardar silencio, confiando en aclarar los hechos; contestanto por el mismo medio, lanzado un grito de victimismo y echando en cara a la gente que le acusa de hacer trampas, de no agradecerle el gesto de competir por España en lugar de su país de nacimiento.

 Consciente del error, no tardó en borrar los comentarios, pero fue en vano; el daño ya estaba hecho.

 Desconozco que hay detrás de las irregularidades de las que se le acusa y por supuesto confío en que encuentre el modo de demostrar su inocencia; es un gran atleta, una de las grandes esperanzas de medalla del atletismo español; su no concurso mermaría las aspiraciones del deporte rey en los juegos del próximo verano en París, pero con todos los respetos, reproches los justos.

 Si compite por España y no por Marruecos es porque lo ha decidido él, no nos está haciendo un favor a nadie, ni ese gesto le blinda de ninguna contingencia. Un poquito de madurez. 

 Igual que se aceptan de buen grado los piropos y los halagos cuando todo viene de cara, también hay que mostrar amplitud de miras y sobre todo tragaderas con las críticas, por muy injustas que sean. Si es inocente, que lo demuestre, oportunidad de ello tendrá. Las flemas y las invectivas que las queme corriendo, que se le da bastante mejor que hablar.

 

domingo, 11 de febrero de 2024

Tributos

 Viernes noche, Cola para entrar en la sala de conciertos, buen ambiente y muchas canas entre los asistentes; el concierto y sus canciones atraen a gente mayor, seguidores de una banda que puso patas arriba a toda una generacion en los noventa.

 Se accede a la sala, pequeña, por rigurosa reserva. Una de las empleadas del local pasa lista y comprueba los datos antes de dar acceso a la caja donde se paga. A doce euros asciende el coste de la entrada, que incluye dos consumiciones. Más no se puede pedir.

 Varias pantallas distribuidas por todo el recinto inician una cuenta atrás de cinco minutos, el tiempo necesario para que los músicos hagan sus habituales actividades de preparación y  conexión de cables. Todo está dispuesto. Con puntualidad comienza el espectáculo.

 Vestidos de negro, con camisetas en las que abundan las calaveras, con una puesta en escena sobria,con dos guitarras y un bajo que acompañan al solista, moreno enjuto de pelo corto y gafas de sol, que inicia la sesión rasgando su guitarra acústica siguiendo el paso de los golpes de bateria.

 Así comienza el tributo a Heroes del Silencio, interpretado en esta ocasión por una banda madrleña llamada Leyendas del silencio

 Ahora este tipo de conciertos se denominan así, tributos; antes no solían denominarse de ese modo, mencionando los carteles anunciadores,  el nombre del grupo y los temas que iban a tocar, sin más. 

 Como bien dijo el cantante del grupo en uno de los descansos entre tema y tema, es esta una manera de ganarse la vida como músicos, visto la enorme dificultad que implica abrirse paso en la industria, en la era del streaming. Puso como ejemplo el disco que su banda había sacado y que en Spotify llevaba ya más de medio millón de reproducciones entre todas sus canciones. Sin embargo lo apartoso del número no se traduce ni de lejos en pingües beneficios: por tal cantidad de escuchas en la plataforma digital, el grupo se ha embolsado la absurda cifra de setenta euros. 

 A modo de promoción, varios CD´s fueron repartidos en las primeras filas de la sala, que sin estar abarrotada, presentaba una afluencia más que notable. Sale más barato para promocionarse regalar copias que sin duda llevan un coste añadido. Labores de subsistencia.

 Interpretaron en las dos horas que duró la actuación más de veinte temas, sin dejar en el tintero ninguna de las grandes aportaciones del grupo aragonés: Maldito duende, La sirena varada, Iberia sumergida, Avalancha... Tuvimos que esperar a los bises, algo sin duda previsto y estudiado, para oir Entre dos tierras, punto y final del bolo.

 Experiencia excelente, producto de calidad tanto en la intepretación como en la organización. Música en directo, siempre un deleite del que poder disfrutar; después de lo vivido estaré más atento a este tipo de eventos, tributos musicales,  que son un plan estupendo para dar comiendo al fin de semana.

viernes, 9 de febrero de 2024

Los pajaritos

Es posiblemente uno de los temas más impactantes de la historia de la música, es casi imposible que nadie sepa de qué estamos hablando o que no la haya escuchado nunca.

 Una canción de verbena, que en España hizo popular La niña de la Malvarrosa, María Jesús, una cacereña miembro de la diáspora extremeña que se crió en Valencia y que desde bien temprano se buscó la vida tocando su acordeón en la playa, para además de ayudar a la paupérrima economía familiar, pagarse su estudios de música en el conservatorio.

 Muy probablemente cuando se hizo con los derechos de la canción en castellano,  compuesta por el suizo Werner Thomas y que originalmente se llama Chicken dance, no tenía ni idea del pelotazo que estaba dando.

 Tanto es así que le ha valido para ganarse la vida más que holgadamente.

 El baile de los pajaritos, La danse des canards, Il ballo del qua qua... La lista de versiones por país e idioma es larga. Quién fuera Werner para arrimar al bolsillo las ganacias internacionales que por derechos de autor se está embolsando desde hace más de cincuenta años. De hecho debe estar frotándose las manos después de  la polémica que se ha generado con la prohibición de la emisión de las imágenes de John Travolta, obligado a bailar la versión italiana en el Festival de San Remo. Al parecer el actor estadounidense no ha firmado  autorización alguna para que puedan emitirse por la RAI, quién sabe si avergonzado de juntar los dedos con las manos a ambos lados de la cara y mover el culo, en la tradicional coreografía de la canción. 

 Basta que lo prohíbas para que el video circule como la pólvora por internet. Polémicas que dejan dudas más que razonables. En río revuelto siempre hay ganancia de pescadores. Haz un poco de ruido que las redes sociales se encargarán del resto. Repercusión y ganancias adicionales.

 Lo malo es el soniquete que te queda después de volver escucharla una sola vez. Intentaré para compensar ver algún video de Saturday night fever, con Tony Manero en toda su esencia.

 

jueves, 8 de febrero de 2024

Vidas paralelas

 No, no voy a hablar del trabajo de Plutarco ni voy a comparar vidas de notables personajes griegos o romanos para crear retratos significativos.

 La idea es hacer algunas valoraciones sobre cómo algunos políticos muestran con sus comentarios que viven de espaldas a la realidad. No hay peor defecto para un servidor público que no estar al cabo de la calle. 

 Dice una de las vicepresidentas del actual equipo de gobierno que subiendo el salario mínimo eso produce el alza del resto de nóminas y sueldos. ¿En qué se basa?, ¿ Dónde está la relación causa efecto? Desde luego en la realidad no, porque basta ver cuántos asalariados ven sus ingresos mensuales congelados por cuenta de sus empleadores.

 No va esta entrada de análisis económicos, ni menos aún políticos; para valoraciones ya están los medios, repletos de expertos de toda índole y condición. Sólo pretende poner en valor la importancia de la comunicación en estas lides, del mensaje que no sólo debe ser claro, sino que además, debe ajustarse a la realidad, al día a día, más cuando las valoraciones afectan de lleno al corriente, al ciudadano raso.

 Lástima de mesura y realidad en las valoraciones de nuestros políticos, más dispuestos a la soflama y al titular, como si la vida toda fuese una red social en la que comprimir mensajes impactantes. Tanta volatilidad convierte a gestores que deberían tener los pies en el suelo, en agentes externos, deambulantes de una especie de vida paralela que en nada se parece a la realidad.

 

miércoles, 7 de febrero de 2024

El mundo alucinante

 Es una de esas novelas que te dejan un regusto especial, un sabor diferente, con esa dualidad que reflejan las historias reales contadas con un sustrato de fábula y fantasía.

 No en vano este trabajo de Reinaldo Arenas, es considerado como uno pioneros del denominado Realismo mágico, lo cual confiere al escritor cubano, el derecho a formar parte del denominado Boom latinoamericano, del que son insignes representantes, Carlos Fuentes, Julio Cortazar, Vargas Llosa o el propio García Márquez.

 Solo analizando la vida personal del autor de este trabajo se entiende por qué Arenas dedica este libro a la figura del Fraile dominico mexicano Fray Servando Teresa de Mier, sacerdote liberal y teórico político, que sufrió tortura y presidió por parte de las autoridades españolas a consecuencias de sus ideas políticas, (era firme partidario de la independencia de México), así como por sus opiniones religiosas, (consideraba que el culto cristiano llegó a América antes de que lo trajeran los conquistadores, como demostraba el culto a la Virgen de Guadalupe, patrona del país, a la que ya adoraban los indígenas antes de la llegada de los europeos). 

 Encarcelado y condenado al destierro, en una vida tortuosa carente de raíces y de comodidades, tal y como le ocurrió al escritor de este relato, disidente anticastrista, depués de haber sido un defensor a ultranza de la revolución en la primera hora, de la que se desencantó por su inflexibilidad y doctrinamiento. Excluído y menospreciado por su condición de homosexual, huyó de la isla como un marielito más, en una de las precarias embarcaciones que abandonaron la isla entre abril y octubre de mil novecientos ochenta, en el denominado Éxodo de Mariel.

 Afincado desde entonces en Nueva York, donde también sufrió el desprecio y desamparo de la conservadora colonia cubana del exilio, enfermó de sida, poniendo fin a su vida con apenas cuarenta y siete años, en mil novecientos noventa.

 Como si de vidas paralelas se tratase, separados por siglos de historia y entornos diferentes Arenas y Servando de Mier forman un perfecta simbiosis de personajes discrepantes, despreciados por sus coetáneos,  alcanzando notoriedad y significación con el paso de los años,  en el universo de la eternidad. 

 Escrita como crónica en primera persona donde los hechos históricos se entremezclan con episodios mágicos y fantásticos, donde la trama parece discurrir por senderos más propios de un relato de fantasía que de una biografía,con hechos inverosimiles.  Arenas construye una historia mixta de meditación y aventura, como si de una metáfora de vida se tratase, en la que lo serio y lo disparatado  forman parte de un ente común.

 Libro especial e interesante, excelente manera de aproximarse al mundo atormentado y poético de Reinaldo Arenas.  Editada en España por Tusquest, cuya obra es objeto de reconocimiento y reedición por parte de la editorial catalana.

 


 

lunes, 5 de febrero de 2024

Difuso

 Nada como estar borroso, como estar sin terminar de aparecer. Es una necesidad. 

 Afines a la retaguardia, parte del basamento pero nunca punta de lanza. Atrás,  atrás, atrás. En modo discreto.

  Es la magia de ser humo, volátil y ágil sin que apenas nadie se percate. Ser Difuso.

 Silencio, soledad y discreción.  Pilares de toda una vida.

viernes, 2 de febrero de 2024

¡Vaya tomate!

 A Ségolène Royal, entre otras muchas cosas ex-Ministra de Medio-ambiente gala,  no le gustan los tomates españoles. Esa ha sido la manera que ha empleado de defender a los agricultores franceses, cansados de la competencia desleal que, según ellos, sufren a manos de los productos extranjeros. Conflicto que no ha hecho más que comenzar y que amenaza la estabilidad de una parte de las exportaciones expañolas, que tienen como destino los supermercados del país vecino. Carreteras cortadas, camiones con sus cargas saboteados... La extrema pasión en las protestas de las centrales sindicales francesas nos trae de vuelta el recuerdo de camioneros expoliados por razones similares hace cuarenta años. Todo vuelve, especialmente lo malo. 

 Volviendo a lo de los tomates, dice que son incomestibles. Es curioso, pero aún a riesgo de que me caiga la del pulpo, opino igual que ella; es una simple cuestión de sabores; la inmensa mayoría de las hortalizas que compro habitualmente en los supermercados, no tienen ni sabor, ni textura, ni recuerdan ni por asomo a aquello que supuestamente estás comprando. Plástico con forma de verduras que además de pobre en propiedades es cara para el bolsillo. 

 Según para qué cosas, cualquier tiempo pasado fue mejor; antes el pan sabía a pan y los tomates a tomates, alimentos sabrosos que ahora pagamos a precio de potosí sin que lo merezcan; en qué momento nos pasamos al pan congelado y a las verduras de invernadero; siempre hay razones económicas detrás.

 No me extraña que algunos tipos de negocio empiecen a florecer a cuenta del hartazgo de la gente en estos temas, aún a riesgo de tener que pagarlos aún más caros. Agricultura ecológica que además trae la mercancía a tu casa, sin intermediarios, esos que encarecen una barbaridad cada cosa y que dejan al productor agrario un margen de beneficio que es complétamente ridículo. Tal vez con el tiempo cambien las cosas y volvamos a disfrutar de un género de calidad que dé gusto consumir.

  

 

jueves, 1 de febrero de 2024

La boveda del juicio final

 Parece el título de una novela distópica y desde luego, no va desencaminada la primera aproximación a esa idea, ya que ese trata de un espacio creado en caso de que llegara a nuestras vidas un armagedón exterminador.

 Ubicado al norte de Noruega en el archipiélago de Svalbard, en medio de las gélidas aguas del Mar Glaciar Ártico, es el nombre con el que comúnmente se conoce a un enigmático almacén que recoge muestras de más de un millón de semillas, congeladas para mantenerlas en toda su esencia, en caso de que alguna suerte de cataclismo acabase con las formas de vida vegetal, tal y como ahora las conocemos.

 Un banco mundial de semillas, sellado y perimetrado sin que el acceso al mismo sea permitido para nadie sin autorización. Otro recinto impenetrable, como si se tratase de un Area 51 aunque sea con fines más que pacíficos, pensado para mantener la supervivencia. Seguramente no es casual su ubicación, al norte y en manos de administraciones nórdicas, siempre previsoras como ya mostraron durante la pandemia, mostrando al mundo su capacidad de atender demandas improvisadas con almacenes y silos que guardaban material médico aséptico, como las famosas mascarillas que tanto escasearon  en un principio en todas partes.

 El morbo que despierta esta clase de sitios convertiría en casi una peregrinación el número de visitas que recibiría este espacio casi virgen. El mejor sistema de preservación siempre pasa por mantener lo que sea, alejado de la mano del hombre, depredador compulsivo e insaciable, casi con su sola presencia.