Motivación existencial

Ricón para pequeñas reflexiones ahora que las puestas de sol se ven desde los cuarenta...
por Dondo Moreno




martes, 31 de agosto de 2021

Botellón

 Solíamos reunirnos a eso de las seis de la tarde en un local llamado Indian Caffè un día de la semana, creo recordar que era los miércoles, para hacer coincidir la hora feliz de bebidas, la famosa happy hour, con el punto de encuentro de los que éramos estudiantes Erasmus en la ciudad italiana donde estábamos cursando estudios, Milán.

 Ha llovido desde entonces, desde el año noventa y seis. En aquellas veladas nos encontrábamos chavales de todas partes, aunque como era lógico, lográsemos hacer piña antes con los que venían de nuestro entorno. Así conocimos gente de todas partes, de Valencia, de Asturias, Granada, Zaragoza, y cómo no, de País Vasco y Cataluña.

 A estos dos últimos, cuando se les preguntaba de donde procedían, contestaban a reñagadientes que lo hacían de España, y esos eran los menos; unos cuantos, avezados en sus inquietudes nacionalistas, afirmaban sin cortarse que no eran sino catalanes o vascos, a secas.

 Sentimientos o cuestiones identitarias a parte, nos llamaba mucho la atención que todos aquellos que tan distintos decían ser de nosotros, mesetarios castellanos, a la hora de salir de fiesta acabaran arrimándose a nosotros, dejando a un lado sus charlas en euskera o catalán, al calor del vino y las cervezas, no sólo con nosotros, sino incluso con aquellos estudiantes de otras partes que se animaban a chapurrear su incipiente castellano con ellos. Lo que nuestras diferencias ideológicas acentuaba, lo liquidaba el alcohol, medicina popular.

 Me he acordado de todo esto a leer la columna de opinión de Leyre Iglesias hoy en el diario El Mundo, titulada el botellón español en la que la colaboradora afirma: Al final va a ser que el botellón ilegal e incluso violento es el último síntoma de que España es más parecida entre sí de lo que algunos nos cuentan.

 Y tanto, nosotros ya entonces lo percibimos, hace veinticinco años...

lunes, 30 de agosto de 2021

Salario mínimo

 Dice la Vicepresidenta tercera que hay que subir el salario mínimo para,no sólo mejorar la vida de la gente, sino también para potenciar el consumo. Dice la Vicepresidenta segunda que en este escenario no es el momento adecuado, que limitaría las posibilidades de crecimiento, base sobre la que sostiene la empleabilidad. 

 ¿Quién tiene razón? Pocos o ningún debate se producirán, al fin y al cabo somos de adoptar la postura de una por oposición a la otra, sin más argumentos. Al final se trata simplemente de posicionarse, de identificarse con la una idea y lanzar luego andanadas contra el que está  en frente.

 Siempre y para todo, actuamos igual. Y como de costumbre abonados y abocados al forofismo. Que se mueran  los economistas, como los feos.

viernes, 27 de agosto de 2021

Líderes

Llega a Madrid, a la base  de Torrejón, el último  avión con civiles y personal repatriado de la misión en Afganistán. En ese vuelo llega el embajador de España en Kabul.

 Pese al ofrecimiento de ser evacuado en el primero de los aviones, el jefe de la delegación  diplomática española ha permanecido en el aeropuerto de la capital afgana, supervisando las tareas de embarque y traslado  de cientos  de ciudadanos, colaboradores y sus familias, así como nacionales que han vuelto a casa gracias al esfuerzo del personal diplomático,  las fuerzas armadas y la policía, acreditadas en la zona.

 Cuando en mi trabajo vuelvan a darnos formación o lecciones de liderazgo, confío en que pongan como ejemplo a personas como este hombre. Un líder aguanta la presión y no la traslada a sus subordinados, y cuando hay que dar el callo abandona el barco el último. Dando ejemplo, como decía  mi abuela. 

jueves, 26 de agosto de 2021

Promesas fatales

 Era un runrún desde hace días y hoy se ha cumplido, fatalmente.

 Un terrorista del ISIS se ha detonado la carga explosiva que llevaba encima, causando además de su muerte, la de al menos  cien civiles afganos y doce marines estadounidenses. Era la crónica de unas muertes anunciadas, en el escenario central donde se mueve la actualidad: el aeropuerto de Kabul.

 Asesinos ciegos, sedientos  de sangre y muerte. Crueles hasta el punto de matar indiscriminadamente. Niños inocentes que deben su corta vida a la intransigencia y demencia de sus verdugos.

 Veinte años perdidos. Nada ha cambiado. El mismo escenario de horror y miedo se dibuja en un presente que va mucho  más allá  de las fronteras de Afganistán. Mejor mentalizarse.

miércoles, 25 de agosto de 2021

Netflix

 Pensaba que era flor de un día, pasatiempo de un rato, que a poco  que la pandemia fuese aflojando, terminaría por dar de baja el servicio, pero no, continuará formando parte de mis veladas  caseras, a noches intermitentes y como complemento a mi dieta lectora. ¿Razón? El esperpento que los canales generalistas ofrecen en su parrilla de programación.

 Dicen que tenemos una de las peores televisiones de Europa y voy a terminar por creérmelo. Mal modelo de ocio que fía buena parte de sus contenidos al cotorreo chismoso de baja estopa y que condimenta estas bajadas al barro con la cruda realidad de unos espacios informativos que dan simplemente ganas de llorar.

 Pues si, acabaré siendo un seriófilo más, y ya no tendré que pasar palabra cuando me pregunten que es lo que estoy viendo y en qué plataforma lo hago. La necesidad obliga.

martes, 24 de agosto de 2021

Stalin

 Órdago a grandes.  Aprovechando que la entrada al balcón de las grandes celebraciones del Ayuntamiento de Valencia es libre, un grupo de personas ha colgado una pancarta de homenaje, nada menos que a Stalin. Insuperable.

 En esta escalada de quitarse los complejos y de sacar a pasear todas las filiaciones, incluidas aquellas de las que antes la gente se cuidaba muy mucho de divulgar, ni  los comunistas  más recalcitrantes se cortan. 

 Quién sabe, quizá el próximo  homenajeado sea Pol Pot. Estén atentos a sus pantallas. Dedicado a todos los que creen que los avances una vez consolidados, no corren peligro. 

lunes, 23 de agosto de 2021

Ochenta y cinco

 Ochenta y cinco años sin García Lorca. Tantos años de silencio, de letras yermas, de tumba perdida, de reconocimiento y estudio de unos hechos, que dejaron a la literatura hispana sin uno de sus mayores talentos líricos.

 Uno de tantos episodios cerrados en falso. Otra sepultura pendiente, cunetas que son camposantos improvisados, pero sempiternos, por obra y gracia de las trifulcas de costumbre. Una pena que ni en esto seamos capaces de ponernos de acuerdo.

 ¿Seremos siempre un pais de trincheras? A veces tener la sangre caliente, es muy mala consejera.  Puede que alguna generación  futuras cambie las tornas. No lo veremos nosotros, no será desgraciadamente la nuestra.

viernes, 20 de agosto de 2021

Ciudades botellón

 Es como si hubiésemos entrado en una segunda fase, más avanzada. De aquellos lodos de Lloret de Mar y de Magaluf, han llegado estos barros de gran urbe, que han convertido a Madrid y Barcelona en nuevos destinos preferentes en eso que ahora se denomina turismo  "low cost".

 Turismo de gente joven, de alquilar pisos en vez de ir a hoteles, de comer bocadillos en las aceras y parques en vez de pisar restaurantes, de pasar por los museos por la puerta y visitar los supermercados para hacer botellón en calles y playas.

 Se quejan los hosteleros, ( y los vecinos por los ruidos y molestias), de la llegada de este turismo  de baja calidad, que no ayuda a mejorar las maltrechas  economías de un sector que lejos de remontar, tiene a un cuarenta por ciento  de los hoteles  aún cerrados  en Barcelona.  Turismo  tolerado  desde las instituciones, como ya ocurrió  tiempo atrás en Madrid, dejando pasar sin apenas controles  a grupos de chavales franceses que venían aquí a emborracharse, gracias a la laxitud de las medidas  de contención.

 Dilemas y más dilemas. Aceptarlo todo a cambio de unos ingresos que son , en realidad, una miseria. Quien  lo hubiera dicho, hace apenas veinte meses.

jueves, 19 de agosto de 2021

Toros

 Por cuenta del nombre de dos de los astados incluidos en el cartel de la última tarde de toros de la feria de este año , los festejos taurinos en Gijón pasan a la historia. La alcaldesa ha decidido no renovar el contrato de explotación de la plaza, con fines  próximos a la lidia. Otra plaza más que cierra taquillas y destina el coso a otros menesteres. 

 Nigeriano y Feminista, así  se llamaban los dos animales cuya muerte no ha sido en vano. En estos tiempos dados a buscar justificaciones para todo, y con la sensibilidad a flor de piel, hay que ser muy tonto para poner esos nombres a estos pobres animales en una corrida. Todo se junta.

 Cualquier  excusa era válida, y ha venido por cuenta de unos nombres como podría haberlo hecho por otra cosa. Malos tiempos corren para este espectáculo que en otro tiempo era santo y seña patrio, y hoy es un evento, caduco, trasnochado e incompatible con el creciente  sentimiento animalista. En vías  de extinción.

miércoles, 18 de agosto de 2021

Afganas

 Y llegaron los talibanes.  Veinte años después, tantas cosas han pasado, tantas vidas se han sacrificado, para que todo siga donde estaba. 

 Vuelven los barbudos de chaleco y chilaba con la Sharia como referencia.  La misma que promete reducir  la presencia de la mujer al reducto de su casa, dependiente siempre del hombre. 

 Y muchos se preguntan si debe reconocerse este nueva etapa de primitivismo con anclajes religiosos. Qué  remedio.  Si nos ponemos tan dignos, que apliquen la misma  vara de medir con los Saudíes, que en muchas facetas aplican los mismos métodos. La guerra ha de venir por otro lado.

 Sólo por la fuerza  de los valores, de las creencias, de unas ideas que por universales deben también poder aplicarse en países musulmanes, Sólo de esa manera llegará  el día en que se destierren estas prácticas obsoletas y sus gobiernos represores. Hay que sembrar. Algún día germinarán.

martes, 17 de agosto de 2021

El peñón

 Autopista en medio de un secarral, te lleva hasta San Roque, antesala de la cuesta abajo que lleva hasta la Línea, puerta de entrada y sin reja.

 Ni mono, ni chispa, ni tiendas baratas. Hacía años que no volvía  y todo parece haber cogido ese tono decadente en el que no hemos metido de lleno. 

 Ni con terceras vacunas. Lo de remontar el vuelo va de otra cosa, de coco y de ganas. Antes o después tocará espabilar, hasta en enclaves tan peculiares como este rincón, frontera del Mediterráneo y el Atlántico, antesala del continente negro y colonia.

lunes, 16 de agosto de 2021

Clima

 Noches de calor tropical, calimas que llenan la ciudad de polvo durante días, brumas que dejan las playas vacías, medusas de cuarenta kilos  para que chapoteen con ellas los niños  con sus palas. Y como colofón incendios  que asolan sierras y localidades de interior.

 En todos los casos existe un vaso comunicante que es el calor. Ese que viene recalentándonos en sucesivas olas. 

 Clima de extremos, como todo  de un tiempo a esta parte. Ni los elementos  se abonan a la  moderación y al justo medio.

viernes, 13 de agosto de 2021

Operación Salida

 Viernes 13. Escucho la radio y miro los indicadores de la D.G.T. para buscar posibles embotellamientos. En menos de una hora me apresto a bajarme con un coche que conduzco yo, por la carretera de Andalucía, camino de Málaga, para pasar unos días con mis padres.

 Víspera de la Virgen de agosto, con un lunes festivo de por medio, que hará que todavía más gente se anime a salir de la gran urbe, circulantes que se sumarán a los que hacen el cambio de guardia, aquellos que salen a vacacionar en la segunda quincena de agosto, para dar el relevo a los que ya vuelven, aunque esos no preocupan ahora: van en dirección contraria y lo harán presumiblemente dentro de setenta y dos horas.

 Verano de desplazamientos en coche, de turismo de interior, de asomar la pata con miedo a que el bicho haga acto de presencia, pero que si lo hace, sea con unas cañas y un buen pescaito de condumio por delante. Verano de ir a media marcha, pero de ir, al fin y al cabo.

 Si hace algún me hubieran dicho que me iba a ver en una situación como ésta, no lo hubiese creído. Adelante hombre del seiscientos, la carretera nacional, es tuya...

 

 

jueves, 12 de agosto de 2021

Last call

 Vísperas de la partida. Tarde organizada al tran tran, y la maleta medio hecha.  a menos de doce horas de la vuelta a la diáspora sureña.

 Pongo a cargar el teléfono. Ese que no recibe mensajes ni llamadas desde hace días, por si acaso suena la flauta en el último momento. Lapsus de agosto en soledad. Parece que los calores estivales han terminado hasta con las opciones de hacer cosas, en un Madrid que parece un pueblo del oeste sin vida. Ni las chicharras cantan este año, después de la tala de árboles provocada por Filomena.

 Fiaremos la rutina de vida social para septiembre, cuando las aguas vuelvan a su cauce, y vuelva el trajín a la gran ciudad.

 

miércoles, 11 de agosto de 2021

Golpe de calor

 36 grados a la sombra y salgo  a dar pedales. Apenas paso el Wanda y cuando comienzo  la subida de Campo de las Naciones  me da la pájara.  Empieza dolerme la cabeza y la boca reseca, me pide un agua que parece caldo en el bidón.  Paso Silvano y en Las Cárcavas hago un alto, a la altura de San Lorenzo. Apenas si me sostengo de pie.

 Afortunadamente el ayuntamiento ha puesto en circulación  las fuentes que bordean el carril bici. Maná de agua fresca  que me reactiva al tiempo que peleo el chorro revitalizador  con una marea de avispas. Me vuelve el color a la cara y las piernas recuperan  energía.  Decido hacer la vuelta por Arturo Soria.

 Vuelvo a coger velocidad de crucero y al coger la acera bici de Institución Libre de Enseñanza. Me topo con una inundación. Cortada la calle por el reventón de una tubería, parece que Filomena hubiera vuelto de nuevo.

 Tras el inevitable rodeo alcanzó por fin mi barrio y llego a casa. Miro el reloj y he invertido más de dos horas en apenas veinticinco kilómetros. Efectos del golpe de calor y de las reacciones a cámara lenta, de mi cuerpo baldado. Lección aprendida. 


 

martes, 10 de agosto de 2021

Pulga

  La pulga cruzo los Pirineos

 para comenzar a bailar sus tangos de tapete verde 

  en la tierra que vio a Gardel, nacer.

  Después de veintiún años, 

  toca cambiar de aires.

  Fue la crónica de una muerte, aunque anunciada, 

 y dilatada, en el tiempo

  de final impredecible.

  Sainete que desde hoy, 

  ya no tiene más recorrido.

  Futboleros patrios, a levantar la cabeza,

  que no se acaba el mundo. 

   Ya vendrán tiempos mejores, y, esperemos

   que no tan caros.

   La pela, es la pela.

 


lunes, 9 de agosto de 2021

Réditos

Dice un diario de tirada sólo virtual que la banca española, después de haber despachado a quince mil puestos de trabajo en los últimos meses, se apresta a repartir dividendos entre sus accionistas.

 Cosas de la viabilidad y la lógica capitalista. Nadie invierte para perder.

 Problema que hoy afecta a la banca, y que va rotando por sectores, los tiempos de las bajas incentivadas han venido para quedarse por una buena temporada.

 Está bien rasgarse las vestiduras, pero fiarlo todo a afirmaciones superficiales y de perogrullo,no arregla el problema. Este capitalismo dominó, donde todos ven cómo les afecta la caída de una ficha, requiere de más imaginación y menos lamentos demagogos.

 La culpa es del sistema. Puede que sea así, pero si este sistema tiene formas de crear riqueza y repartirla y ahora no lo hace, tal vez habría que preguntarse qué de cuanto puede hacerse, no se hace.

viernes, 6 de agosto de 2021

Miradas fugaces

 Al amparo de la Taberna Angosta, esa que en las noches de estío ameniza el descanso en precario, con treinta grados a las diez de la noche. En buena compañía, al albur de un cubata, sentados a la puerta en dos sillas de madera, con un taburete como mesa para poner copas y gominolas. 

 Venías con otras tres más, y al poco de percataste de mi presencia giraste el rostro hacia una de ellas para hacerle un comentario, que yo supe de sobra en el momento, que era referente a mí.

 Hiciste por seguir andando, junto a tus acompañantes, para girar a la izquierda y seguir calle abajo, pero hubo un momento en que no pudiste resistirte más y volviste tu melena rubia para buscar mi presencia, y asegurarte de que, efectivamente, era yo a quien dejabas a un lado para seguir tu ruta.

 Y en un flash, se agolparon recuerdos de aquella noche en Rivas, donde cubata en mano, como hoy, intentaste enrrollarte conmigo; pero había demasiadas cosas en contra: Tu perra alborotando como buena cachorra, el poco feeling que me profesó tu físico, y la proximidad de mi ruptura sentimental última, esa que te hace sentirte culpable de algo que nadie te impide que hagas, porque nada te obliga ni debes cuentas.

 Cuánto juego dan las salidas por el centro.  Esas que hacen que en una ciudad con tanta gente te encuentres con personas que no esperas ver nunca más. Un pañuelo de recuerdos con el que saborear el cubata, por un instante, antes de seguir la tertulia con el amigo, a la luz de los faroles del Madrid de los Austrias

 

Llévame a casa

 Con este libro, Jesús Carrasco certifica esa capacidad literaria de transfigurar en el papel las cuitas más íntimas de unos personajes, que de un modo u otro se encuentran vinculados a lazos inexpugnables con la tierra.

 Llévame a casa, (Editorial Seix Barral), es ante todo y sobre todo una novela familiar, en la que dos hermanos, con vidas ajenas y emplazamientos vitales tan  dispares como sus formas de ser y de vivir, se ven en la necesidad de hacer frente al drama familiar,  que lleva a la tumba al padre después de una larga y penosa enfermedad, y deja viuda a la madre, que encuentra por compañía en su soledad al alzheimer.

 Novela, cruda, espartana en argumentos y detalles, clara y concisa, que aborda el problema de la ley de vida con claridad y de frente y dirige al lector en el conflicto que enfrenta a hermanos que no quieren pelearse, al tener que hacer frente a la situación, de hacerse cargo de la madre, en condiciones tan precarias. 

 Y todo ello con el telón de fondo de la tierra, esa que da vida y sirve de cobijo, a la que uno muestra apego o desafecto, pero que de un modo u otro siempre está presente en la forma de actuar y de pensar.

 Tierra que da todo, pero que también quita cosas, muchas.  Tierra que significa, define, muestra, importa, y hacer sufrir. Como si fueramos plantas en vez de mamíferos, en el universo literario de Carrasco, las personas tenemos raíz  y tronco, y corre por nuestras venas, savia revitalizante.

 Escritor geocéntrico, casi podría ser una perfecta carta de presentación para mostrar la obra de este escritor pacense, que novela tras novela, va afirmando con paso firme, su espacio en el terral de las letras hispanas.

 

 


 

 

miércoles, 4 de agosto de 2021

Plato grande

 Mono de bicicleta , después de casi un mes sin dar pedales. Y descubres que la maneta que cambia el plato, no funciona. La bici de veintisiete marchas se reduce a las que puedo poner  en un plato, el grande. Tan sólo siete.

 Y a la  Casa de Campo, a dar la vuelta entrando desde Madrid Río. Recorrido de vaivenes y repechos que hoy se hacen menos asequibles. 

  Calambres  en las piernas, que ni la ducha de agua fría reduce. Piernas en alto tras cenar algo y disfrutar de una velada de satisfacción. Nada mejor para liberar endorfinas que darse una buena zurra.

martes, 3 de agosto de 2021

Fregar los platos

 A mano , sin ayudas de máquinas.  Estropajo y jabón, y el pozo del fregadero inundado de cacharros, tan profundo  y lleno de agua como sea posible. Abismo de género.

 Y delante, un hombre. Nada más simbólico. Nada más rotundo. 

lunes, 2 de agosto de 2021

Zapatero, a tus zapatos

 Enciendo  la radio para que me haga compañía  en el último tramo del día, vísperas de in sueño reparador de lunes.

 Hablan de deportes, más concretamente de baloncesto,  de un partido  que apenas dentro de unas horas, enfrentará a los chicos patrios con los gigantes americanos. Quijotes frente a molinos de viento, como siempre.

 Escucho un análisis exhaustivo, completo ,lleno de matices técnicos, pero con arenga emocional,  parece que fuese un entrenador  quien habla.

 Hasta que el periodista lo identifica y resulta  que sí lo es, aunque de un tiempo a esta parte no ejerce como tal , sino como político, como portavoz  en un ayuntamiento como líder de un partido de oposición. 

 Vaya diferencia, el político bisoño y dubitativo de los plenos,  no se parece al técnico y comentarista deportivo. Está  claro  que todos  tenemos  derecho  a plantearnos nuestro futuro profesional, por dónde nos parezca apropiado,  pero si hay algo que haces  bien...  Zapatero, a tus zapatos.