Motivación existencial

Ricón para pequeñas reflexiones ahora que las puestas de sol se ven desde los cuarenta...
por Dondo Moreno




viernes, 24 de mayo de 2013

Respuestas

 El affaire Gürtel sigue su curso; las famosas fotocopias ofrecidas como prueba inexcusable de cargo a el diario EL País por la que ya puede considerarse como peculiar garganta profunda española cuya identidad se mantiene con celo en el anonimato de la fuente en cuestión, han dado una nueva víctima. Esta de gran calado. Nada menos que el ex-presidente del gobierno José María Aznar, cuya comparencia en la noche del miércoles en una cadena privada en entrevista personalizada en horario de máxima audiencia, no puede ser interpretada mas que como una especie de huida hacia delante con vistas a poner un dique de contención ante las acusaciones de lucro incesante que no cesan de surgir a raíz de la publicación de los papeles en cuestión arrebatados al custodio de los mismos, el inefable tesorero Bárcenas.

 La citada entrevista  tenía por objeto desviar la atención de lo que en realidad preocupa a la gente y por lo que se están pidiendo explicaciones con insistencia: de hasta que punto han sido generalizadas o no las contrapartidas derivadas del entramado financiero que soporta a toda la trama en cuestión; ya sea en formato de sobre sueldos o pagas complementarias, o a través de costosos regalos de boda, etc. Lo que esta en juego es algo más que un posible trapicheo hecho a la sombra del partido de gobierno de turno y que pueda haber permitido lucrarse a un número más o menos grande de personas. Está en juego la credibilidad de un sistema que brinda oportunidades de financiación oscura a los partidos políticos, instrumentos con los que se encauza la voluntad popular, vista la opacidad de la normativa vigente y las poco conocidas prácticas de los órganos de control de organismos como el Tribunal de Cuentas cuyas investigaciones e informes carecen de credibilidad, vista la poca luz que merecen las cuentas de los partidos con capacidad de gobierno en este país.

 Desde hace ya algún tiempo se cuestiona la validez del entramado legal surgido de la Constitución del 78; no son pocas las voces que hablan de la necesidad de regeneración, de replantearse el modelo distributivo a nivel recaudatorio y fiscal, la necesidad de mordernizar la jefatura de Estado... El suelo se mueve bajo nuestros pies con demasiada frecuencia y la necesidad de seguridad conlleva actitudes de este tipo en lo que puede ser un proceso constituyente nuevo que de cobijo a un buen puñado de iniciativas que ayuden a regenerar la vida pública en diferentes escenarios.

 En mitad de estas diatribas, la mencionada entrevista de autos sirvió para destacarnos la figura de un ex presidente que lejos de ofrecer respuestas a quienes dudan de la transparencia de las prácticas de su partido, utilizó la comparecencia para repartir a diestro y siniestro, empleando el espacio de divulgación para dar una pobre imagen del ejecutivo que preside el país, así como  sugerir la posibilidad de regresar si así lo exigieran las circunstancias.

 Otro esperpento más que añadir a este tenderete de cosas zafias, ineficaces y patéticas en que a veces insiste en convertirse el escenario político patrio. Pero no por intentar convertir esto en un lodazal se conseguirá desviar la atención de los asuntos que verdaderamente afectan a la ciudadanía, cada vez más harta de este teatrillo de tres al cuarto carente de gracia y conveniencia dada la gravedad de las circunstancias. Al ex-presidente Aznar solo cabe exigirsele una cosa: altitud de miras; que sepa comportarse como lo que es, un ex máximo responsable de gobierno, miembro del Consejo de Estado, órgano consultivo; alguien que en fin, debe estar al servicio del país desde la posición que ocupa en estos momentos: en un segundo plano y al servicio del gobierno y de la ciudadanía, y si se siente perseguido o vilipendiado, que limpie su nombre y honor empleando los cauces dispuestos para ello.

 Antes o después el partido que gobierna deberá dar explicaciones y en compensación deberá poner sobre la mesa los correspondientes sacrificios por malas praxis, que permitan pasar página a tan lamentable episodio. Ni las interpretaciones de ex máximos dirigentes, ni las intentonas de desviar la atención con contra información o con actos de cualquier índole evitaran que ese momento llegue: el de dar respuestas a una ciudadanía necesitada de certezas y verdades.

viernes, 17 de mayo de 2013

Problema de base

 Terminamos una nueva semana en la que la noticia estrella, al menos en redes sociales y demás conciliábulos de nuevo cuño,ha sido la denegación de una beca de investigación al nombrado por la Sociedad Europea de Física como mejor físico europeo joven de 2012, distinción que en esta ocasión ha recaído en manos de lucense de treinta años. Como no podía ser de otro modo, la noticia ha levantado una polvareda importante cuyo calado ha ido bastante más allá de la lógica frustración que puedan generar noticias de este calibre en la comunidad científica. Asociadas variables tales como talento y juventud, a la ya característica premisa que afecta por doquier a la chavalería de este país, el paro, el resultado de la ecuación ha sido el vincular esta denegación de una beca a la política de I+D desarrollada por el gobierno actual, cuyas lineas maestras vienen determinadas por la caída en la inversión y, fruto de ello, la inevitable salida de jóvenes talentos a otros países donde proyectos de corte científico puedan albergar sus cualidades, iniciativa y capacidad de trabajo.

 Es este un tema recurrente que casi a diario tiene algún tipo de muestra o plasmación en las noticias que se suceden en el día a día y como no podía ser de otro modo está íntimamente vinculada con un modelo educativo, el español, que está en puertas de aprobar una nueva reforma, ( séptima u octava en democracia creo que leí el otro día, no lo recuerdo bien ni tampoco hago especiales esfuerzos por documentarme, es un tema que cansa y aburre), tal y como viene siendo habitual según sea el gobierno de uno u otro signo el que ocupe la mayoría de los escaños en el hemiciclo.

 Basta echar una pequeña visual hacia atrás, sin irse uno demasiado lejos, para observar con prudencia un argumento que a mi me parece irrefutable: la necesidad de confrontación y alternancia que protagonizan la historia de este país en los últimos doscientos años. Podríamos rebobinar incluso más allá y contemplaríamos no sin sorpresa como ese mismo rasgo se repite una y otra vez en este país o en lo que fue la esencia y base del mismo antes de que existiese, que muchos no sin falta de acierto, llaman reinos de taifas en alusión al periodo de disgregación de la España musulmana una vez caído el Califato de Córdoba. Si uno tiene gusto por el derecho y la política, y observa por ejemplo, cuantas constituciones se promulgaron en este país en el siglo XIX, hasta la restauración conservadora de Cánovas y su  sistema de alternancia en el poder, cuyo patrón hoy día reproducimos con una exactitud casi pasmosa en el modelo de la democracia del 78 y eso que disfrutamos de sufragio universal y de libertad de expresión y de asociación.

 Las cosas ni se improvisan ni pasan por casualidad, y las inercias son demasiado poderosas para eliminar determinadas prácticas sustituyéndolas por otras que puedan ser más provechosas o útiles. Ahora la razón y causa de denegación de una beca, o de muchas más que no se publicitan como esta, o el cierre de departamentos de investigación, es la necesidad de recortar gastos ante la carencia de ingresos que permitan financiar tales proyectos, pero antes de eso cualquier otra explicación habría de resultar válida para conducirnos al mismo escenario: la de un país que no invierte en investigación porque no lo considera una prioridad. No nos engañemos, ni ahora ni nunca, y para corroborar ese dato solo hay que echar un vistazo a las listas de inventores o intelectuales descubridores que ha dado este país en la historia de la humanidad desde el renacimiento hasta nuestros días. ¿Algun ingenuo cree que España podrá tener alguna vez un premio nobel de química sustentado con capital e iniciativa española? Casi me atrevería a decir que forma parte de nuestro imaginario colectivo visualizar a nuestros talentos científicos lejos de nuestras fronteras investigando en laboratorios de EEUU como Ochoa, o navegando en el espacio como Pedro Duque. Es algo asumido: el que vale ha de irse fuera porque aquí nunca va a destacar, y para justificarlo se saca a relucir el tan manido refrán de nadie es profeta en su tierra... (sic)

Habrá quien piense que en esta época en que las organizaciones intergubernamentales comienzan a consolidarse con nitidez meridiana, los proyectos de colaboración harán más probables las iniciativas que a nivel colectivo permitan montar complejos como el Instituto Astrofísico de Canarias con sus dos observatorios; aún con todo, en nuestro pensamiento, aparecerá la figura del cerebrito hablando una lengua extraña porque se ha ido no se donde a hacer no se qué...

 Para recoger hay que sembrar. Si se quiere talento se debe potenciar desde la escuela, y para ello el modelo educativo debería ser constante y no sujeto a la opinión del gobernante de turno; solo así mejoraran los futuros estudiantes en lengua y matemáticas, y de ahí... al infinito.

 La fuga de talentos es solo la punta del iceberg. Este es un problema de base.

viernes, 10 de mayo de 2013

Landa

 Ayer a última hora de la tarde se supo la fatal noticia del fallecimiento de Alfredo Landa a la edad de ochenta años, en su domicilio de Madrid, que a poco de conocerse la noticia pasó a convertirse en un hervidero de gente, tal y como pudimos ver anoche en la cobertura que los medios hacían de tan triste pérdida. Apartado de la vida pública y de la interpretación desde hace algunos años, su muerte, en cambio, no ha pasado desapercibida ni ha quedado en un segundo plano; la altura de la figura del mundo de la interpretación, enorme,  no podía ni debía despedirse de nosotros de otro modo, siendo esto solo el inicio de un inevitable desfile de pequeños y grandes homenajes que servirán de colofón a una vida dedicada a los escenarios y a algo más importante que todo:  en hacer reír y en entretener a la gente.

 Estos días muchas serán las semblanzas y repertorios que saldrán a la luz recordando las decenas de caracterizaciones que en el mundo del teatro y sobre todo del cine han quedado para la posteridad de este ilustre actor. Se recordará la interpretación de Paco el bajo en Los Santos Inocentes, de Sancho Panza en El Quijote, junto al también mítico Fernando Rey o de Miguel Cañete en Cateto a Babor, una de sus mas hilarantes interpretaciones que en el fragor del franquismo han quedado para la posteridad como uno de los exponentes de ese cine español de los años cincuenta y sesenta,  fiel reflejo de una España hoy abandonada y olvidada en un rincón de la que apenas si quedan huellas visibles, medio siglo después. Para descubrir aquellos años nada mejor que tirar de hemerotecas o de cine, eligiendo cualquier título de los protagonizados por este genio navarro que ha sido el único en crear un género: El fenómeno conocido en la historia del cine español como landismo que no hace alusión a otra cosa sino a la serie de películas que protagonizó el actor durante un periodo de su carrera, cifrado por algunos desde el año 1969 hasta el año 1978, comedias de enredo y guión poco sofisticado que han quedado para la posteridad, no por su calado o valor artístico sino por que han dejado algo tan importante como una forma de ser, de actuar y de ver la vida, en palabras del propio actor.



 Los que tenemos ya alguna cierta edad no podemos dejar de sonreirnos y recordar esas tardes de sábado en casa, cuando la televisión era un bien restringido por la escasez de canales y de programación de la que disfrutar hasta la llegada de la carta de ajuste, contemplando películas de esta época en que personajes como Gracita Morales, Lina Morgan, José Luis Lopez Vaquez o el propio Saza solían alegrarnos las tardes con comedias de argumentos simples y absurdos donde la carcajada era la única razón de ser. Hoy esas cintas son un fiel reflejo de una sociedad de cuya evolución el paso de los años dan buena cuenta.

 Sirvan estas pequeñas lineas de humilde y personal homenaje en señal de agradecimiento por tantos buenos ratos pasados delante de una pantalla, ya que nunca tuve la ocasión de verle actuar sobre las tablas de un escenario. De entre todas sus interpretaciones me quedo con Atraco a las Tres en el cine y, sobre todo en la caracterización de Ceferino Reyes, realizador radiofónico, que junto a Concha Cuetos y Carlos Larrañaga, realizó magistralmente en Tristeza de Amor. Son inolvidables para mi los acordes del tema principal de la serie, interpretado por el malogrado Hilario Camacho en una cabecera que junto a títulos de crédito con el elenco de actores mostraba las imagenes de un Paseo de la Castellana de noche ( en dirección a Nuevos Ministerios y más hacia abajo hasta Colón), lleno de altos edificios y luces. Con los años aquel paisaje dejó de figurarse ante mis ojos  a través de una pantalla para ser estampa habitual de mi vida, ya que es aquí en Madrid donde resido desde hace tiempo. Esas imágenes han quedado grabadas en mi retina formando parte de existencia. Probablemente ya desde entonces y sin darme cuenta empecé a querer a esta ciudad.

 http://www.youtube.com/watch?v=OmhyS8He2LE


 En la calle Martín de los Heros, muy cerquita de la Plaza de España y desde hace algún tiempo se ha constituido el Paseo de la Fama de Madrid. En ella entre las pocas estrellas que por ahora figuran sobre la  acera luce resplandeciente la figura de Alfredo Landa. Con todo merecimiento. Descansa en paz maestro. Hasta Siempre.





viernes, 3 de mayo de 2013

Montaña Rusa

Nueva semana que llega a su fin, esta marcada por días festivos que han dejado reducida al mínimo los días de faena en estos inicios del mes. Día del trabajo, festivo de la Comunidad de Madrid  y recuerdo histórico a la Guerra de Independencia contra Napoleón, en medio de los primeros pasos de un mayo que sigue inmerso en una atmósfera variable e inestable.

 La semana ha sido poco productiva a tenor de los festivos, pero no ha dejado de dar noticias en lo económico y lo político, haciéndose eco de esa climatología de primavera que hace enorme la amplitud térmica y deja bajo mínimos los intentos de poner un poco de cordura a los pronósticos.

 Ha sido la semana de Bankia  y sus alzas y bajas, haciendo que, a día de hoy y tras subir un setecientos por ciento el martes pasado,sea por valor de capitalización el primer banco de Europa con un valor bursátil superior al de Inditex, valor insignia patrio del momento en la bolsa.

 Semana de berrinches futbolísticos, en el que el doble duelo hispano teutón ha dejado alicaída la moral nacional, mas susceptible de sufrir altibajos por razones deportivas que por asuntos recurrentes a las necesidades del bolsillo.

 Semana de palos en lo político, con las controvertidas cifras que en relación al índice de crecimiento de este país vuelven a poner las expectativas en lo mas negro, por gentileza de nuestros socios europeos y sus gerifaltes. Cifras negativas de crecimiento, y porcentajes altos de paro sazonados por el reconocimiento de un ejecutivo que parece por momentos tirar la toalla y reconocer la mayor: que no va a ser capaz de crear empleo en los próximos años.

 Semana de bajada de tipos, de caída a mínimos del euribor; la  prima de riesgo baja a niveles de 2010 y el estado consigue financiación a mejores condiciones en el mercado secundario de deuda.

 Donde estarán las semanas en que nada digno de mención ocurría, o al menos así lo parecía; aquellas en que las cosas venían dadas de tal manera que su asimilación apenas si requería esfuerzo. Al paso que vamos, perderemos hasta la capacidad de asimilar la información que recibos, ya que la condición de frustrarnos o sorprendernos parece haberse anquilosado hace tiempo. Esta es la realidad que nos toca vivir, agitados al ritmo de una montaña  rusa en la que prima lo económico.