Motivación existencial

Ricón para pequeñas reflexiones ahora que las puestas de sol se ven desde los cuarenta...
por Dondo Moreno




viernes, 22 de marzo de 2013

Pasar la escoba

(...Estaría bien replantearse las cosas y además de rescatar, regenerar las formas de actuar. Habría que pensar si ese gallinero en que se ha convertido el parlamento, más parecido a las gradas de un recinto deportivo que a un hemiciclo donde exponer y debatir ideas, no es más que fiel reflejo de cómo somos y de lo que somos. Y tal vez sería oportuno interrogarse por el modo de proceder de unos banqueros que no han dudado en hacer cualquier cosa por ganar dinero, sin plantearse si aquello que se hacían era lo adecuado o no. ¿ Son solo culpables o son, además, exponentes de un modo de pensar y actuar propio de cualquiera de nosotros?
 Hay mucho que rescatar estos días. También que regenerar. Cuanto antes nos pongamos a la tarea antes vadearemos una crisis que además de golpear los bolsillos, también debería golpear las conciencias...)
 
 Han pasado apenas unos meses desde que escribiera estas lineas allá por el mes de mayo en relación a la terrible incertidumbre económica que vivía este país en esas fechas, al borde del rescate financiero por parte de la Unión Europea. Ya entonces hablabamos de regeneración de una clase política a la que le perdían las formas por su modo de afrontar los asuntos referentes al colectivo como si se tratase de una verbena. Ahora, como ya también entonces se barruntaba, ya que buena parte de los escándalos de corrupción andaban presentes en la realidad económico-política del país, la actualidad informativa y mediática viene salpicada por diferentes casos de corrupción económica que afectan a todos los estamentos del país, no quedando exento ninguno de los mismos, ni siquiera la mismísima Casa Real.

 Mis palabras de mayo parecen a día de hoy un tanto timoratas y algo ingenuas. Blandas incluso en un momento como este en que la dureza de la situación está llevando a algunos a límites próximos a la indigencia mientras quienes rigen nuestras vidas, no hacen más que enviar mensajes de contención y austeridad; ¿Regeneración? No es el momento. Toca zafarrancho de limpieza, porque solo limpiando podremos acometer con garantías el proceso de saneamiento completo tal y como se requiere cuando un lodazal ha invadido nuestras vidas; primero hay que sacar el barro, luego esperar a que se sequen las humedades antes de iniciar la tarea de limpiar y luego adecentar.

 Tal vez así consigamos sacar de sus madrigueras a estas ingentes mareas de aprovechados que han equivocado la vocación de servicio público con la del aprovechamiento en beneficio propio gracias a cargos
políticos. Solo así nos quitaremos el sinsabor de ver como algunos se sonríen mientras son detenidos y llevados al calabozo, o el tener que asistir a bochornosas peinetas practicadas por algunos a la vuelta de algún viaje de placer en el extranjero. Toca pasar página sin dejar rescoldo alguno de tanta inmundicia y de tanto miserable.

 No hay más remedio. Toca pasar la escoba.

viernes, 15 de marzo de 2013

America Latina está de moda

 Es un hecho que hay épocas que se caracterizan por los acontecimientos que transcurren en ellas, quedando por ello marcadas e impregnadas de un inevitable aroma que sirve de condicionante a la hora de valorarlas en un futuro más o menos inmediato. Todo y todos de un modo claro quedamos sujetos a esa especie de regla del condicionamiento que hace que se nos perciba de un modo u otro según sean determinadas circunstancias, que no nos definen pero si nos marcan, hasta el punto de formar parte de nuestras propias personalidades e identidades.

 Esa regla es aplicable a cualquier ámbito que nos propongamos, político, económico, científico, deportivo... Nos acordamos siempre más de unas épocas que de otras siempre en función de hechos aislados o puntuales que suceden y que de algún modo dejan su impronta marcando el futuro de esas etapas por efecto de la simple asociación a aquello que aconteció.

 Las dos últimas semanas van a ser recordadas por don hechos significativos que, aún siendo diferentes en cuanto a la relevancia y significación que llevan implícitas detrás, guardan sin embargo, un puñado de nexos de unión que permiten incardinarlas en un mismo contexto local y global a la vez.

 El pasado día seis de marzo, el vicepresidente venezolano Maduro certificó con trascendencia y sentida emoción ante las cámaras de televisión en una emisión cuya señal fue seguida en todo el mundo el deceso del presidente Chávez. Con el anuncio se ponía fin al constante tráfico de comentarios, rumores y verdades a medias en que se había convertido la evolucíón de la enfermedad que el presidente americano ha llevado con absoluto sigilo y opacidad mediática. El fallecimiento del otrora comandante golpista reconvertido en líder democrático patrio y en referente político panamericano solo ha puesto un punto y seguido a un acto político-teatral cuya siguiente puesta en escena pasa por certificar si tendrá o no continuidad en el tiempo lo hecho por el finado. Las próximas semanas servirán de anticipo para comprender que camino emprenderá la denominada revolución bolivariana, cuya intención de convertirla en perenne pasa casi necesariamente por exportar sus preceptos a otros mandos localizados en otras zonas de la América Latina. Es el momento de conformar la continuidad en manos de otro dirigente, siendo Correa el mejor colocado en ese aspecto, con la consecuente permisividad y conformidad del siempre vigilante país líder en lo económico de la zona,  Brasil.

   Aún con todo el análisis político-estratégico requiere tiempo, como no puede ser de otro modo. La reflexión coyuntural dejaría sin comprender infinidad de cuestiones de cuyo calado ahora no se puede obtener información de primera mano, ya sea por las incertidumbres que se crean tras un acontecimiento lúgubre como este, que no por esperado despeja incógnitas en lo relativo a la sucesión y continuidad de lo hecho, o por las inevitables servidumbres que el azar otorga a todo mandato político. La idea de confrontación radical en la región frente al poder omnipresente estadounidense por la vía de hechos consumados en materia económica y energética y mediante la vía de propaganda masiva seguirán marcando la agenda política de la región huérfana de liderazgo claro por momentos. 

  Aún no se ha enterrado a Chávez; a decir verdad no se sabe qué se quiere hacer con sus restos, si exponerlos a lo Lenin  en una urna de cristal o inhumarlo en el Panteón Nacional junto a Simón Bolívar. Y mientras corre el tiempo veloz, camino de un proceso electoral donde candidato oficialista y líder de consenso opositor prometen protagonizar un duelo electoral apasionante, dadas las circunstancias y lo que hay en juego; la fractura social y de convivencia en Venezuela dependen en mucho del dictamen de las urnas.

 Con la desaparición de Chávez aún caliente, El Vaticano ha concluido su enésimo conclave elector para designar la figura de un nuevo cabeza de la Iglesia católica con quien paliar la traumática renuncia de Joseph Ratzinger a la silla de Pedro. Con la pompa y boato acostumbrados, aderezados con la característica dosis de suspense representada por el particular sistema de comunicación elegido para  dar a conocer los resultados de la elección ( fumata blanca y anuncio por parte del cardenal proto-diácono). El resultado del  conciliábulo fue presentado extra homnes con sorpresa incluida:  a la luz de las cámaras y casi en horario prime time, la figura del cardenal argentino Berboglio aparecía en la balconada de la loggia central de la Basílica de San Pedro para sorpresa de propios y extraños. Hombre de 75 años, enfermo de pulmón, con amplia experiencia en materia eclesiástica y episcopal y un pasado en donde no se caracterizó por el rechazo a posiciones autoritarias en lo político, el Arzobispo de Buenos Aires es la nueva apuesta de la iglesia católica para hacer frente al estado de vacío dejado por la sorprendente renuncia de su predecesor. Ortodoxo en lo dogmático y progresista en lo social al ser conocida su labor de prédica y asistencia a los más necesitados,el nuevo prelado está llamado a ser el primero en muchas cosas de puertas adentro y también a fuera, dada la gran influencia que el Obispo de Roma tiene en todo el orbe, al margen de ser el primer papa llamado Francisco, el primer latino americano en alcanzar la más alta distinción eclesial o en resultar el primer jesuita que conseguir el hábito blanco.

 En apenas una semana y como consecuencia de ambos acontecimientos. América Latina ha pasado a ser centro de atención mundial. Futuros acontecimientos de diferente índole pondrán nuevamente en órbita a una región que desde hace tiempo no se resigna a tener un papel secundario y tutelado. Son nuevos hechos que se suman al periodo de cambio político y geoestratégico que el globo esta desarrollando y que tiene en Asia y esta parte del mundo dos actores de primerísimo nivel. 

 El  mundo está cambiado. América Latina está de moda.

 


viernes, 8 de marzo de 2013

8 de Marzo

 Este viernes se conmemora como viene siendo tradicional el Día de la Mujer, descripción con la que se conoce de un tiempo a esta parte al anteriormente denominado Día de la Mujer Trabajadora.

 Según el  Diccionario Ideológico Feminista de Victoria Sau, Se considera una jornada de lucha feminista en todo el mundo en conmemoración del día 8 de marzo de 1908 en que las trabajadoras de una fábrica textil de Nueva York llamada Cotton declararon una huelga en protesta por las condiciones insoportables de trabajo. El dueño no aceptó la huelga y las obreras ocuparon la fábrica. El dueño cerró las puertas y prendió fuego muriendo abrasadas las 129 trabajadoras que había dentro (…). Sin embargo, otras fuentes señalarán la fecha de inicio de esta conmemoración en otros contexto y hechos significativos ( a través del Movimiento Internacional de Mujeres Socialistas de finales del siglo XIX, que tenía como finalidad exclusiva promover la lucha por el derecho al voto femenino; para las historiadoras Liliane Kandel y François Picq afirman que el mito que sitúa la manifestación en el año 1857 fue creado en 1955 para eliminar el carácter comunista que más tarde adquiriría el Día Internacional de la Mujer...)

 Podrían enumerarse un sin fin de explicaciones o respuestas que trataran de justificar tanto la celebración como la selección de la fecha en sí; sin embargo todas ellas pasan a un irrelevante segundo plano al ser lo verdaderamente importante el hecho de que esta conmemoración exista y cada vez vaya teniendo mayor notoriedad y , sobre todo, mayor penetración y concienciación social.

 Como bien se sabe el calendario está cuajado de fechas significativas o señaladas distribuidas a lo largo del año laboral sin que todas ellas, por diferentes motivos, acaben consolidándose como festivos o días de asueto. En este caso, y por la obviedad de la ya existente celebración del Día del Trabajo del primero de mayo, que no hace distinción entre sexos; la conmemoración del día en cuestión está jalonada por diferentes actos que tienen por objeto resaltar la importancia de la mujer en el mundo laboral y reclamar por enésima vez la obtención de un status de igualdad plena con respecto al del hombre. Aunque carente pues de ese ambiente festivo, la connotación de este día, viene determinada por la buena voluntad que casi todo el mundo manifiesta hacia la figura de la mujer, unas veces como señal de reconocimiento, y otras veces como signo de un partenalismo masculino que no termina de evadirse de ciertas prácticas machistas más o menos
remarcadas en cada una de esas  muestras de apoyo desinteresado.

 Hay muchas formas de machismo, activas y pasivas, enumerarlas todas aquí implicaría hacer un esfuerzo ingente que pecaría sin duda de falta de espacio para poder resaltarlas todas; baste con decir que todos los días han de ser días de celebración de la mujer a secas, independientemente de su condición de trabajadora; que han de celebrarse de un único modo:  enarbolando la bandera del respeto y tratando en pie de igualdad a quien por hacer lo mismo con el mismo esfuerzo, no siempre tienen ni el reconocimiento ni la compensación económica correspondiente. 



  Acceso al trabajo en igualdad de condiciones, mismas remuneraciones pecuniarias, conciliación entre vida familiar y laboral, eliminación de practicas o tratos vejatorios por parte de compañeros masculinos... Que no decaiga el ánimo por ampliar y consolidar una lista de metas a alcanzar que solo puede redundar en el beneficio común.

 Felicidades si, a todas y cada una de la mujeres; pero no solo hoy: todos los días de todos los años.

viernes, 1 de marzo de 2013

Una mirada atrás

 Era un frío día de diciembre, allá por mil novecientos cincuenta y cinco. Una ciudadana de color, aunque tal vez en este caso sea preciso emplear la palabra negra, a sabiendas de que las normas de comportamiento cívico del momento así se lo exigían, decidió no atender la petición expresa que un conductor de autobús le hacía de levantarse del asiento que había ocupado en un vehículo urbano, en principio reservado para blancos, contraviniendo la orden de ocupar un asiento en la parte de atrás del mismo; su negativa acabó derivando en detención y posterior encarcelamiento. Ocurrió en Montgomery, Alabama

 Rosa Parks, que así se llamaba la protagonista de esta historia, saltó a la fama a raíz de esa acción que lejos de ser espontánea y aislada, venía precedida de toda una estrategia de confrontación destinada  a lanzar el grito en cielo en contra de la acusada segregación racial que estaba profundamente arraigada en casi todas y cada una de las prácticas cotidianas de los EEUU de los años cincuenta; a raíz de la protesta iniciada por esta activista del Movimiento por los Derechos Civiles en Estados Unidos, toda una serie de acontecimientos se desencadenaron: primero detenida, luego encarcelada, las sucesivas peticiones de revisión del proceso llevaron el mismo ante la Corte Suprema, que un año después declaró inconstitucional la segregación en el transporte colectivo estadounidense.




Un pequeño gesto que sirvió de punta de lanza contra el racismo vigente. Un pequeño acto que hizo de lanzadera para que el movimiento que la sostenía acaparase protagonismo y erigiera en figura pública a hombres como el pastor bautista Luther King, quien lideró la protesta masiva contra los autobuses de Montgomery, siendo  esta su primera acción de una carrera jalonada de diferentes gestos que tuvieron su punto álgido en el famoso discurso promulgado ante una multitud en las escalinatas del monumento al presidente Lincoln:  el inolvidable I have a dream que ha pasado intacto de generación en generación.

 Han pasado más de sesenta años de aquel evento raíz que sirvió de inicio en la lucha por favorecer los derechos de las minorías. Esta semana, se ha descubierto un busto de la interpelada en el Capitolio de Washington, ataviada con el ropaje propio de la época y en la misma postura en que debió encontrarla el conductor de autobús que le afeó su conducta y le pidió que desalojara el asiento. Para la ocasión y con todo el boato requerido en las ocasiones solemnes, el presidente del país, Barak Obama, primer negro que conquista la Casa Blanca, ejerció de maestro de ceremonias adornando el acto con la foto de rigor: sentándose en la silla del autobús en que se produjeron los hechos, tal y como se conserva y con una sencilla frase que a modo de jaculatoria pretende resumir el momento y transmitirle solemnidad y emoción: Yo estoy aquí por ella.

 Interpretaciones interesadas del hecho al margen, obviando las manipulaciones y el uso mediático que algunos puedan hacer del acontecimiento en si, es innegable la importancia y transcendencia del mismo. Aquella acción cargada de simbolismo ha sido fuente de inspiración para otras reivindicaciones que han llegado posteriormente, siempre en la idea de otorgar derechos a minorías y colectivos, como las del movimiento feminista o la del propio colectivo gay; todas ellas enmarcadas en la firme intención de crear una sociedad, cada vez más globalizada donde las discriminaciones no existan y las diferencias sean mínimas para conseguir un entramado colectivo y de convivencia más justo.

 Cien años cumpliría este mes Rosa Parks. Desgraciadamente tienen que pasar demasiados años para consolidar luchas como la suya y obtener resultados positivos. Tal vez sea ahora,  cuando el suelo se mueve debajo de nuestros pies y en que las incertidumbres son mayores que nunca, cuando sea un buen momento para mirar atrás e inspirarse en activismos y acciones como esta que consiguieron cambiar las reglas del juego.