Motivación existencial

Ricón para pequeñas reflexiones ahora que las puestas de sol se ven desde los cuarenta...
por Dondo Moreno




lunes, 30 de noviembre de 2020

La campesina

  La ciociaria o la campesina es una novela escrita y poblicada por el autor romano Alberto Moravia, que fue llevada al cine en 1960 bajo el título Dos mujeres bajo la dirección de Vittorio de Sica,  y que supuso la otencion del Oscar para la actriz protaginista, Sofía Loren.

 Es sin duda una crónica de guerra, pero alejada de las estrategias militares y los campos de batalla; es una cronica de suprvivencia, contada desde la perspectiva de la población civil, refugiados de guerra obligados a convertirse en parias en su propio país, huyendo de sus localidades y domicilios habituales para adentrarse en zonas rurales, lejos de la primera linea de batalla, donde las hostilidades entre aliados y alemanes permanecen lejanas en la distancia, pero presentes en el ambiente, aunque sólo sea por el ruido de bombas que se oye de fondo en muchos momentos y pasajes de la obra.

 De la ocupada por los nazis Roma, madre e hija dejan atrás su casa y su negocio, buscando aproximarse a la zona de la que son originarios sus padres, para guardar una necesaria ausencia, mientras los británicos terminan por recuperar la capital de Italia para los aliados, con la ayuda de las tropas estadounidenses. De su lento peregrinar por diferentes localidades y pueblos, hasta terminar en un pequeño campo de refugiados donde pronto comienza a faltar la comida, da cuenta este trabajo de Moravia, perfecto retrato del sentir y forma de pensar de una población civil, abandonada a su suerte, después de la caida de Mussolini, y que tiene por principal tarea esperar día tras día a que los soldados alemanes se replieguen para abandonar la península itálica y liberar el país.

 Con sencillez narrativa y profundidad de caracteres, Moravia elabora un retrato completo de la Italia de los años cuarenta, obligada a sobrevivir en condiciones extremas, dejando de un lado las limitaciones morales, donde solo existe una consigna, la de sobrevivir.




 

viernes, 27 de noviembre de 2020

Luces de Navidad

 Ya están prendidas las luces de navidad en Madrid, desde ayer noche, día veintiséis, siguiendo la tradición de poner colorido a las noches de la ciudad un mes antes de que comiencen las fiestas.

 Normalmente paso por alto este momento navideño, como tantos otros que forman parte de estas fechas, que cada año más se me hacen bola. Por excesivas, por absurdas, al menos en la forma que tenemos de afrontarlas, carentes de significado alguno, ni religioso, ni solidiario y cada vez, menos familiar; dos semanas que cuestan una fortuna, llenas de dispendios que bien pudiera prescindirse de ellos.  

 Sin embargo este año tengo una percepcion diferente. Son luces que aportan algo de alegría en unos días que van a ser duros por muchas razones. Muchas personas pasarán estas fechas en un hospital, convalecientes o trabajando, y el resto deberemos cumplir la obligada separación con nuestros seres queridos fruto de las restricciones que buscan cortar las cadenas de contagio.

 Estas navidades son una gran ocasión. De mostrar el lado más humano, más generoso y más solidario con los demás. Quien sabe, pero tal vez este año, tengamos unas navidades más auténticas que nunca; tenemos la mejor oportunidad de demostrar que somos solidarios y tenemos sentido cívico, manteniéndonos a salvo con la distancia que ahora hace falta guardar.

 Cada uno en su casa y las calles iluminadas, que nos recuerden que se avecinan días especiales. La ilusión tiene muchas caras, y puede vivirse de muchas maneras. Este año también, con luces.

 

 

jueves, 26 de noviembre de 2020

Pelusa

 Maradona no era una persona cualquiera, era un hombre pegado a una pelota de cuero.

 Así a ritmo de charanga, deambuleando por los campos, haciendo malabares inverosímiles, como lo que fue, un virtuoso con los piés.

 Así es como lo recordaré para siempre. Con su muerte se aglomeran infinidad de recuerdos, de unos años, los de la adolescencia, que siempre marcan. En ellos la mano de Dios hizo un roto al imperio, y muchos vieron en aquello una venganza por el conflicto que arrebató a los argentinos las ahora llamadas Islas Falkland.

 Y es que una personalidad tan poderosa, tan atrayente, no podía dejar fuera de juego a la política ni a quienes intentaron aprovechar su estela para sacar tajada mediática. Y el destino ha querido que se parase su corazón el mismo día en que lo hizo Fidel Castro, fiera para muchos, domador de artistas de la pluma o del esférico para otros. Efeméride doble para recordar a dos personajes que marcaron una época. 

 Muñeco roto en manos de abusos y estupefacientes, padre de no se sabe cuántos hijos, muchas son las trazas que deja tu paso por este mundo, por ese mismo espacio por el que tantos otros caminan sin pena ni gloria. De entre todas ellas siempre quedará guardada en la retina tu poderío con el balón, domado a tu antojo.

 No habrá mácula que empañe tu paso por este mundo, donde hiciste felices a muchos con poca cabeza pero con mucho pié.

 
 Descansa en paz Diego Armando. Hasta siempre.

 

miércoles, 25 de noviembre de 2020

De seis a diez

 Hasta seis comensales por mesa. Aunque si vives en otras partes ese número puede subir a diez.

 Igual que la hora de recogida. Dependiendo de donde te encuentres puedes seguir de farra hasta la 1.30 de la madrugada.

 Cotillones interruptus. Mazapanes compartidos, y según.

 Todo se reduce a establecer plazos, a acotar  los tiempos, a  poner trabas, cuando en realidad no quiere ponerse ninguna. Y todo por salvar unas fiestas y unas fechas en las que, seguramente, lo único que haya que celebrar es que estamos sanos. 

 Algún día nos acordaremos de todo esto, y seguro que aflorará alguna sonrisa en ese recuerdo. Nos acordaremos de lo estúpidos que podemos llegar a ser, y de cómo conseguimos salir razonablemente bien parados, pese a tanta decisión absurda. 

 



 

martes, 24 de noviembre de 2020

Huele a invierno

 Otoñea cada vez menos

pese a que hay hojas

que se resisten a levantar el vuelo.

Mañanas de rocío

en franca decadencia,

es la escarcha la que cubre

y amplifica su manto frío

de humedad y musgo.

 Huele a invierno

 a días cortos y a bufanda,

a calcetines de lana y manta a cuadros;

qué gran aliado 

para estancias de corrido

al amparo de peligros,

que no están en la calle

sino en la gente.

 

 

 

 

lunes, 23 de noviembre de 2020

Equidad y excelencia

  Dice la ministra Celaá que "la nueva ley de educación busca ante todo la equidad combinada con la excelencia porque si no, no habría calidad en la educación.

 El sistema educativo tiene que conseguir que cada persona desarrolle su propio talento al máximo, esa es la excelencia, y que todos puedan hacerlo, esa es la equidad. 

 No podemos deja a nadie a un lado". 

 Detrás de estas palabras que sin duda suenan muy bien, habría que preguntarse si la equidad y la excelencia están aplicándose correctamente. Desde luego si por equidad entendemos que todos los alumnos dispongan de los mismos medios y tengan a su alcance las mismas posibilidades, puede que por ese lado estemos aproximándonos al objetivo anunciado, pero saltan y surgen más dudas en lo relativo a la excelencia, sobretodo si lo que se pretende es igualar por lo bajo a todo el mundo, sin premiar ni incentivar la obtención de los mejores resultados. 

 Detrás de tan pomposos enunciados hay un elemento pernicioso que redunda en la pobreza de resultados y mediocridad de nuestros estudiantes, a los que ya de por si desmotivados, van a encontrar menos acicates que promuevan el esfuerzo, sabedores de que para conseguir el aprobado, no primarán tanto los méritos como la necesidad de igualar a todos sin suspensos, con el pretexto de no dejar a nadie atrás. 

Hasta un treinta por ciento de los niños de quince años tendrían que están repitiendo curso, si se aplicasen los mismo baremos de antes, esos que parece que han quedado congelados a cuenta de la pandemia. ¿Y qué hay detrás de esta nueva dinámica de aprobados generalizados?, Habría que preguntarse cuánto dinero cuesta al Estado tener que asumir que estos alumnos no pasen de curso.

 Dinero. Pocos lo mencionan pero mucho de eso hay detrás de la nueva Ley. Como los cerca de seis mil millones de euros que están en juego a cuenta de los fondos que se destinan a la enseñanza pública y la concertada. Un pastel a repartir que no puede dejar indiferente a muchos.

  Produce pena, tristeza y sobre todo indigna ver como se juega con la formación de unas personas que son las que tendrán que tirar del carro cuando lleguen a su edad adulta. Sin capacitación será más complejo el progreso, ese que algunos quieren conseguir extendiendo la mediocridad, amparados en falsos argumentos de equidad. Porque lo cierto es que nunca la ignorancia nos hizo iguales, solo débiles y manipulables. Todavía más.

 

 

 

 

viernes, 20 de noviembre de 2020

Los ricos también lloran

 Este culebrón no conoce de clases sociales, ni de barrios o zonas. Esta sometida a la tiranía de la estadística pura, de unos números que son los que deciden si eres libre o tienes libertad vigilidad y localizada.

 Hoy como cada viernes, en la comparecencia que la Conserjería de Sanidad de la Comunidad de Madrid, ha saltado la sorpresa; en la lista de zonas básicas de salud ( ZBS), que andan por encima del umbral de los cuatro cientos contagios por cada cien mil habitantes, se incluye La Moraleja.

 Esto tira por tierra las opiniones de los vecinos de zonas de menor poder adquisitivo, que veían en estos confinamientos parciales una especie de decisión sesgada, que solo afectaba a determinados barrios de la comunidad, aquellos donde el teletrabajo es más escaso por cuenta de un tipo de trabajo menos cualificado que requiere salir de casa y coger transporte público para acudir a los centros de trabajo. 

 Que se apliquen medidas sanitarias con rigor científico y estadístico habla bien de los funcionarios que las ejecutan y de las políticos que las toman, pero en nada se quedarían si no contasen con la ayuda inestimable de los propios vecinos, que al seguirlas al pie de la letra, ponen cortafuegos que impiden que las cadenas de contagios aumenten. Que la inclusión de esta zona de Alcobendas en el informe de hoy sirva como acicate para concienciar a todo el mundo de que de esto no está libre nadie y que sólo arrimando todos el hombro podremos salir de esta.


jueves, 19 de noviembre de 2020

La lucha en el exilio

  Con un título tan rotundo como efectivo, La lucha en el exilio, publica Carles Puigdemont ( Editorial Plaza & Janés), la segunda parte del dietario que bajo la pluma de Xevi Xirgo, cuenta pormenorizadamente los pasos dados por el ex-president de la Generalitat, desde que fuese llamado a capítulo por Artur Mas para ser su sucesor al frente del máximo órgano de gobierno de Cataluña.

 Esta segunda entrega carece de la mayor parte de los atractivos que acompañaron a la primera publicación; en parte porque la mayoría de los hechos narrados en la misma hacen alusión al largo proceso judicial en que se ha embarcado el protagonista de esas memorias fechadas año por año y mes por mes. Proceso que ha tenido ya un buen número de etapas, siempre jalonadas por las diversas tentativas de captura que ninguna de las activaciones de la Euro-orden emitidas por el Juez Llarena ha conseguido hacer efectiva. 

 Todos estos momentos han sido registrados y seguidos por la prensa con reiteración casi diria que machacona, con lo cual poca información hallará en lector curioso en estas páginas donde quizá lo más destacado e interesante sea la narración de los días en que fue retenido en Alemania, en el presidio de Neumünster, tras la detención sufrida por Puigdemont cuando fue interceptado en su coche tras cruzar la frontera con Dinamarca camino de Bélgica, en un viaje inteminable pensado para burlar la persecución policial, más previsible si se hubiese realizado ese traslado en avión, que terminó con  una parada y fonda inesperada de doce días en este penal alemán.

 La falta de reuniones entre bambalinas, de encuentros con aliados y miembros del otro ala independentista, reflejado en ERC, cuya dirección visible vuelve a quedar en muy mala posición a ojos del ex-alcalde de Girona, a quienes no se cansa de acusar de no haber sido honestos, ni haber tenido altura de miras en pos de haber buscado una unidad de acción de toda la bancada independendista, dejan el meollo de argumentos de esta segunda entrega en la muestra de la apretada agenda internacional en la que cualquier acto en el que pueda intervenir para divulgar su mensaje, ya sea un coloquio con alumnos de universidad, o la invitación de algúun político local de paises afines y simparizantes de la causa del Procés en lugares tan diapares como Islas Feroe, Suiza o la propia Escocia, colman buena parte de las páginas de este libro donde la autocensura practicada, que tanta polémica provocó en el primer tomo, al rotular con líneas negras muchas frases bajo las cuales se supone que se esconden sobretodo nombres de personas a las que no se quiere comprometer, al menos por ahora en la causa visto sus consecuencias judiciales inmediatas, apenas si se ciñe aquí a un puñado escaso de frases.

 Punto y final pues a estas memorias, publicadas según su valedor e inspirador desde la distancia que da el paso de algunos años desde comenzara el conflicto, con vistas a transmitir serenidad a un texto donde se recogen momentos de tensión y alta emotividad. No en vano las páginas de estos dos volumenes recogen y mantienen bien a las claras el intenso grado de emocion y sensibilidad con que una parte de la sociedad catalana ha decidido afrontar su presente y futuro más inmediatos. 






miércoles, 18 de noviembre de 2020

En blanco

  Hay veces que te dan una noticia, y te quedas sin capacidad de reacción, porque no te la esperabas, porque es una noticia mala...y tardas en actuar, como si necesitaras algo de tiempo para poder digerirlar mentalmente; y mientras lo haces, te das cuenta de que sólo es un primer paso, aquel que en estos momentos estás dando.

 Hoy ha sido un día de esos. Ha pasado hace apenas una escasa hora, el tiempo que ha transcurrido desde que me lo han comunicado, y efectivamente, sigo en fase de asimilación. Nada me gustaría más que poder utilizar este medio y estas palabras para sacar todo lo que pueda llevar dentro, pero lo cierto es que no me sale. Ahora mismo no.

 Tal vez porque el momento de lo que hagan, no ha llegado aún.

 Por eso se llama esta entrada así, y por eso de aquí en adelante va a estar en consonancia con su nombre, porque nada tengo que decir, porque me he quedado... En blanco. 

 En blanco...

 

 

martes, 17 de noviembre de 2020

Linea de Fuego

 Seguramente era el que faltaba, de entre los grandes narradores de novela de este país, en firmar un trabajo que tuviera como argumento la Guerra Civil Española. Tras concluír su visión sobre la mítica figura del Cid Campeador, le ha llegado el momento a Perez Reverte de escribir sobre la gran masacre nacional. 

 Linea de Fuego, ( Ed. Anagrama),  es el título escogido para un texto que ha buscado sobretodas las cosas, huir de las clasicas afroximacions al conflcito armado. Descargada completamente de valoraciones ideológicas, de retratos de líderes de uno u otro bando, de significaciones políticas, de valoraciones a posteriori, Perez Reverte ha buscado en su libro poner en primera línea el sufrimiento de unos soldados que en muchos casos ni siquiera sabían porque pertenecían al bando en el que batallaban. 

 Preocupado desde hace tiempo por la forma en que se aborda la historia de España, que como bien es sabido es piedra angular sobre la cual el autor ha construido muchos de sus títulos más significativos, el escritor cartagenero no se cansa de denunciar la simpleza con la que se cuentan momentos importantísimos del devenir de este país, donde de manera maniquea y torticera se reduce todo a cuentos de buenos y malos, sin contar a la gente los hechos tal y como ocurrieron, y que motivaciones venían detrás de ellos. Y si hay un momento de nuestra historia que más esté sujeto a manipulaciones es precisamente lo ocurriendo entre 1936 y 1939, donde las trincheras del campo de batalla se mantienen ochenta años después, en disputas intelectuales, académicas y virtuales.

 Castellets del Segre, es el sitio imaginario que recrea el libro en la denominada Batalla del Segre, parte importante decisiva del conflicto, que a mediados de 1938, trata de contrarrestar  la ofensiva de Aragón de avance de las tropas franquistas hacia el mediterraneo y Cataluña  con el río Ebro por delante. La toma de este pequeño pueblo, enclave estratégico para los dos bandos, sirve al autor para infiltrarnos a los lectores en las líneas de ataque y defensa de posiciones que varían de un día a otro, con tomas y dacas constantes en donde la muerte es la nota dominante.

 Frío, miedo, dolor, angustía... Puro sufrimiento que se vive leyendo página a página, como si fuesemos cualquier soldado que haya sido enviado al campo de batalla a morir; y junto a nosotros convive y cubre como corresponsal el Pérez Reverte reportero de guerra, sacando a relucir su experiencia de años cubriendo conflictos bélicos, mostrando el lado humano de una guerra, en la que "lo malo es que oyes al enemigo llamar a su madre en el mismo idioma que tú."

 Guerra fraticida irresuelta. Antes en las trincheras, hoy en los libros, en las redes sociales, en las tertulias, e incluso en la calle. Quizá algún día este quiste sea curado y pasemos página con respeto, rigor y conocimiento de la verdad. Mientras, merece la pena leer trabajos como éste, donde se intenta mostrar la parte menos escrita del conflicto: la de sus protagonistas anónimos, soldados casi niños muchos de ellos, de cuya desaparición y muerte solo han dado cuenta sus familias afligidas en silencio.

 


 

 

 



 

 


lunes, 16 de noviembre de 2020

Omayra

  Tal día como hoy,

Hace treinta y cinco años

encogiste el corazón del mundo entero

al comprobar tu osadía

tu entereza

la fortaleza

de una criatura 

de apenas trece años

atrapada entre escombros,

restos de la calamidad

que el Nevado del Ruiz

dejó por doquier.

Han pasado treinta y cinco años

y sigue encogiéndose

el corazón

al verte serena

resignada a una suerte,

que truncó para siempre

tu opción de vida.

Hoy tendrías mi edad

cuarenta y ocho años,

y en en verdad, te digo

que los tienes,

pues sigues viva

entre todos los de nuestra generación

maravillados por tu ejemplo

y tu integridad.

Siempre vivirás con nosotros

Omayra.

Tu ejemplo es 

toda una razón de vida.

 


 

 

viernes, 13 de noviembre de 2020

Heridas abiertas

  Es este un país que no sabe superar sus traumas, terminar episodios, o cerrar heridas. Llevamos ocho decádas sin encontrar puntos de encuentro de una Guerra Civil, que hace años que se cerró en los campos de batalla, pero que sigue vigente en los libros, opiniones y, por increíble que parezca, en las cunetas.  

 A este se suma el problema de E.T.A. cuya resolución va camino de enquistarse igualmente. Puede que los pistoleros ya no maten, pero andamos muy lejos de haber recibido señales de perdón, de comprensión y asimilación de un problema, que no se va a cancelar ni aún cuando salga de la cárcel el último de los presos con que la banda terrorista ha poblado las cárceles de este país.

  Estos días, en que se están aprobando los Presupuestos Generales del Estado, están siendo unos día duros, convulsos, en los que los herederos de Herri Batasuna han echado sal a la herida formando parte del consenso que va a dar apoyo a las nuevas cuentas, sin renunciar a su discurso lleno de bravuconadas y provocaciones.

 Han pasado muchos años desde que se sentara por primera vez un filoetarra en un escaño en el congreso, La imagen de Jon Idígoras como diputado, prometiendo la constitución por imperativo legal, y mirando amenzadoramente a Felipe González, es una de esas imágenes que se han quedado en la retina de muchos, y que no encuentran evolución en los que ahora se sientan en esos mismo escaños representando las mismas ideas y las mismas actitudes. Los años pasan pero a veces, no con ellos cambian otras cosas.

 Aunque no todo es malo, pues a fin de cuentas la participación democrática conlleva aceptar todas las ideas  y los apoyos que estas reciben. La democracia española sigue su curso de maduración lenta asumiendo en su proceso momentos delicados de la historia de este país que no terminan de superarse en el imaginario colectivo. Trabajo de generaciones por delante del que no hay que renegar, ni del que hay que desistir. Camino queda por delante, desde luego.

jueves, 12 de noviembre de 2020

Santiago cierra España

 Nada de entrar sin PCR 

con resultado negativo.

Los aeropuertos asumen 

el mismo arancel humano 

que por mar y tierra 

ya están en marcha.

Limitaciones, controles. 

Todo sea por poner coto 

al intruso con corona.

 Que a nadie le sorprenda,

que los aviones quiten los asientos

y destinen los espacios antes de personas

para mercancías.

Más que renovarse o morir

adaptarse para subsistir.

 Con tanto cierre y tanto control,

me ha venido el recuerdo

de la proclama militar

cuando en tiempos pasados, 

era otro el invasor asesino.

Santiago cierra España, si

pero ciérrala inmunizándonos

y que no haya más bajas

por culpa de un enemigo

tan dañino como invisible.



miércoles, 11 de noviembre de 2020

Números

  Somos números. Ya no es sólo que nos idetifiquen con ellos, están tan en nosotros que son como nuestro nombre y apellidos.

 Número de identificación para la policía, número de la Seguridad social, número de empleado para la empresa, número de estudiante en la U.N.E.D., número de tarjeta de débito...

Números y más números.

 El sábado incorporé otro más a mi particular colección, el 890. Era mi número de lista para esperar mi turno y determinar si un test de antígenos decretaba que era negativo o portador del coronavirus.

 Desde que la vida es un número, y todo se cuantifica y forma parte de una lista, todo tiene tendencia a fluir como en una corriente, aunque como dijera el oscuro, Heráclito, nada en este arroyo es lo mismo, pues la corriente una vez que fluye y pasa, no da marcha atrás ni vuelve. La vida es un río de números, que caen en cascada que nos ordenan y cuantifican, avanzando en ese proceso de materialización, que mina lo sensible para redundar en la cosificación de las existencias. Por más que nos rebelemos, no tenemos opción de rescatar lo sensible. Simples pesos muertos que vagan por un mundo cada més deshumanizado.




 

 

 

 

martes, 10 de noviembre de 2020

Retoños

  Son los primeros árboles plantados, en la zona ajardinada de inicio de Fuente Carrantona. Ahora los mayores tienen por compañía, a unos nuevos inquilinos de jardín, y así mientras practican sus ejercicios, en el parque de aparatos para entrenar manos y brazos, y pedalear mientras están sentados en el banco, ven crecer a unos pimpollos, que aún andan acostumbrándose a la tierra en la que están recien plantados.

 Savia nueva. Se agradece ver otros inquilinos en una zona donde los distintos temporales de viento han ido diezmando una población que más que vieja está enferma de muerte. Árboles que despues de décadas caen tronchados a las aceras, mostrando al mundo el interior de un tronco muerto y putrefacto de polución.

 Cada árbol que se va es una gota de aire que se nos escapa, un testigo de recuerdo de tantos años de vecindad. Estos nuevos recién traídos al barrio, necesitarán de, como poco, veinte años para mostrarse altos y esbeltos. Quién sabe cómo lucirán cuando alcancen su edad adulta, al tiempo que otros comencemos la senectud.

 Compañía y vida, vecinos mudos, siempre generosos, de sombra y oxígeno, de compañía en juegos infantiles. Referencia de mascotas y hogar de pájaros. Bienvenidos seais, por muchos años.





 


 

 

lunes, 9 de noviembre de 2020

Noche electoral... Y 2

 ... Y al fin habemus papam.

 Con más intriga que la que convierte en espera internable para los católicos, la espera de la anunciación del nuevo inquilino de la silla de Pedro. Hasta cuatro días ha habido que esperar para confirmar, lo que ha pasado de ser un deseo generalizado,a una realidad que se intuía  que voto a voto, porcentaje a porcentaje escrutado, ha dado la victoria a la candidatura del partido demócrata, la encabeza por el duo Biden- Harris.

 Hace varios días, hasta seis de hecho, en lo que se convirtió en la primera entrega de este post, me atrevía a hacer un pronóstico en donde insistía en que Biden ganaría holgadamente, y así podría entenderse a tenor de los cerca de cuatro millones de votos de más que ha obtenido el candidato vencedor en  unas elecciones que han supuesto el mayor ejercicio de participación en la historia de la democracia estadounidense, con más de ciento cuarenta y cinco millones de sufragios contabilizados. La segunda mayor democracia del mundo, después de la de La India.

 Pero nada más lejos de la realidad. La igualdad de los recuentos, el equlibrio entre el número de estados ganados por cada candidato, (veintiséis del vencedor, frente a los veinticuatro que se han decantado por Trump), así como el conteo lento en estados siginificativos como Michigan o Georgia, que se han decantado por un puñado de votos, dejan muy a las claras, la infravaloración que en general hemos hecho en otras latitudes del trumpismo.

 Ha ganado Trump en feudos que le son tradicionalmente leales a aquel partido que defiende un discurso más conservador, estados del sur y del centro del país, comunidades eminentemente agrarias, donde predominan colectivos de poder adquisitivo medio alto, de raza blanca, de religión protestante, que mantienen intacto el ideario de una América supremacista, pero también ha conseguido muchísimos votos en zonas de fuerte implantación hispana, en feudos de alta participación de colectivos negros, en estados que son un impulso para la economía del país, los famosos oxide states, del medio oeste. Es un craso error estereotipar el votante medio de unos y otros, a tenor de lo visto en el lento y agónico recuento, decantado a través de un voto por correo que se ha retrasado más de lo deseable, en parte motivado por la avalancha de votos diferidos que han supuesto casi las dos terceras partes del total de sufragios registrados.

 Como todo colectivo que se precie, organismo vivo sujeto a cambios o a mutaciones,la población de los EE.UU. también es susceptible de estar bajo el influjo de los cambios, y en este mundo global donde las cuotas de reparto de poder siguen manifestando una tendencia a engrosar el poder de influencia de alguna potencia asiática, ha calado hondo entre cierta parte del electorado ese lema de gorra que tanto ha divulgado por todas partes el candidato derrotado: Make Ámerica great again, y nadie representa mejor en la potencia norteamericana esa idea que el partido republicano;  no en vano ya con Bush hijo se inició una nueva ofensiva diplomática, militar y económica donde USA está poniendo toda la carne en el asador para impedir que China le coma la tostada. Ofensiva que de un modo elegante y solencioso continuó Obama y que Trump ha puesto en evidencia con mas ruido y fanfarria. 

 Se espera un cambio de forma, pero no de fondo en el modo de proceder del nuevo inquilino de la Casa Blanca. De un modo u otro el camino está trazado, al menos en política economica y exterior. Falta solo saber si la implicación de la vicepresidenta Harris, supone algun tipo de cambio en el gran talón de aquiles de la democracia norteamericana, la confrontación de los derechos civiles y el respeto a los derechos de una minorías que cada día lo son menos. Es ahí donde podrá delimitarse el perfil real, de cambio o no, de la administración entrante.

 

 

viernes, 6 de noviembre de 2020

Contra la desinformación

 Una de cal y otra de arena. Si ayer comentábamos un aspecto de la nueva Ley de educación, que considerabamos positivo por normalizar una situación que es la real en la calle, la de no separar entre sexos en las aulas,  hoy toca echar el freno y discrepar sobre otras medidas  adoptadas por el Consejo de Ministros en la semana que termina.

 Con su publicación en el B.O.E. del pasado jueves, entró en vigor la Orden PCM/1030/2020, de 30 de octubre, por la que se publica el Procedimiento de actuación contra la desinformación aprobado por el Consejo de Seguridad Nacional.

  En la declaración de intenciones de la nueva norma, con la que se busca fundamentar el por qué de esta nueva regulación, se hace hincapié en la necesidad de velar por la información veraz, especialmente en estos momentos en que el mundo digital es el principal suministrador de información a través de internet y las redes sociales. Combatir pues la intoxicación por esta vía, ( las famosas fake news), es el objetivo primordial de esta norma, que considera que la cuestión es de tal importancia que debe involucrarse al Consejo de Seguridad Nacional.

 Que la información es poder, no lo pone en duda nadie, no en balde se le ha denominado como el cuarto poder, como bien puso de manifiesto la película así traducida al español, (Deadline USA, en su versión original inglesa), donde Humprey Bogart interpreta el papel de un editor de periódico (Ed Hutcheson), a punto de cerrar, que decide publicar trapos sucios de un jefe mafioso, poniendo en entredicho los cimientos del poder político local.

 Cuando un gobierno trata de poner freno a informaciones y busca tutelar lo que se dice y no se dice, escudándose en la importancia de que no se intoxique a la población con noticias que no son verdad, en el fondo está poniendo en evidencia un poso de debilidad, de temor a que se cuenten cosas que puedan hacer daño y limitar la credibilidad de sus gestores. Esa tutela, esa especie de mediación, tal y como se nos propone, como si se quiera poner un embudo que permitiera filtrar lo que es correcto y lo que no lo es, y, sobretodo, decirnos qué es lo que está bien y qué no, tiene un tufillo de sobrecontrol que no en vano ha puesto en estado de alarma a buena parte de las asociaciones de medios de comunicación.

 Y debería ponernos a nosotros también en alerta.

 Rotundamente sí, hay mucha intoxicación, y mucha puesta en escena de bulos y falsas noticias que aprovechan la amplia puerta casi imposible de regular que supone internet para poner todas ellas en circulación. Pero someternos a esta especie de tutelaje para ayudarnos a separar el grano de la paja, como si fuesemos todos tontos, o lo suficientemente cortos como para no saber distinguir qué es cierto,  pone de manifiesto otro riesgo no menos importante que el anterior: el de filtrar noticias en una dirección para hacernos creer que esas son las que en realidad son verdad.

 Mucho cuidado. Ningún gobierno que se precie renuncia a ejercer de gran hermano y a poner en circulación el peculiar universo de control que ideó Orwell en su libro 1984. Lejos de apostar por mayor educación y mayor formación para aprender entre otras cosas a leer entre líneas o ser capaz de entender el sesgo que puede haber detrás de algunas informaciones, o no creer otras que simplemente ni han ocurrido porque son metira, se apuesta para que ejerza de cortafuego, el filtrar qué cosas se cuentan, en aras de la seguridad nacional, nada menos.

  Es una decepción, más si cabe porque quien apadrina la iniciativa es un gobierno de izquierdas.


 

 

jueves, 5 de noviembre de 2020

Separación de sexos

La nueva Ley de educación sigue su curso. La enésima, y desde luego, no será la última. Cada cual pondrá  sobre el tapete la suya, hasta que la alternancia propía de un sistema electivo y democrático cambie el signo ideológico de los que llevan el rumbo, y estos deroguen la anterior para poner en la palestra la que se adecua a su modelo. Enmiendas a parte.

 Precisamente en esa fase se encuentra esta nueva norma. Enmiendas que terminarán de pulir el nuevo marco de base sobre el que habrán de regirse docentes y alumnos. La última modificación que se ha dado a conocer, sobre lo estupulado sobre el texto de base, es la de prohibir a los centros concertados, la segregación de clases por el sexo de los alumnos. Ningún centro educativo que reciba dinero público financiara la separación entre niñas y niños.

 Leyendo la noticia en Twitter me han venido a la cabeza recuerdos de mi etapa escolar, en la que durante casi ocho años siempre estuve en clases donde sólo nos contábamos por alumnos, siempre en centros privados. En aquella época las subvenciones públicas de estos centros eran menores a las que hay ahora, donde una parte importante de los colegios privados reciben alguna cuantía del erario público. No fue hasta séptimo de E.G.B. que descubiera un mundo nuevo al tener compañeras, a demas de compañeros en clase.

 Motivaciones ideológicas aparte, he de decir que me parece bien que se incentive, o mejor dicho, no se financie ese modelo de enseñanza que discrimina por sexos en las aulas. El colegio tiene como cometido formar, enseñando unas materias que han de servirnos en la edad adulta. Compartir ese proceso de aprendizaje todos juntos, solo puede tener un elemento enriquecedor. Si una parte de ese aprendizaje implica necesariamente el asimilar una disciplina, el sentirse parte de un grupo, el no sentirte de menos ni tampoco de más que los demás, es bueno que los dos sexos asimilen esas ideas, conjúntamente. A fin de cuentas en la vida no nos van a discriminar por sexos en casi ninguna faceta de nuestras existencias. No al menos de motu propio.

 

 

 

 

 

miércoles, 4 de noviembre de 2020

Tensiones

 Noches que se acortan

duermevela 

hasta que por partida doble

el despertador anima 

a la vigilia completa.

 Hay noches y noches

y la cabeza

no para de centrigugar cosas

recuerdos vagos

de todo lo agitado

amanecen con el despertar

vestigios de televisión

recuerdos de trabajo

amilanan por igual

y dejan transido el cuerpo

que no entiende de cansancios

después de tantas horas

tumbado.

 Qué misterio el sueño

qué intriga de cabeza.

Cuando uno para,

ella continúa activa.

Neuronas que no reposan,

reposo que no descansa

y otro día de faena casera,

nueva jornada de descoloque vital.

 

 

 

 

martes, 3 de noviembre de 2020

Noche electoral.1

 Después de la entrada de ayer, ( desde luego no estaba preparado), parece obvio de qué toca hablar hoy, justo en el momento en que los colegios electorales están abiertos y funcionando a pleno rendimiento, mientras reciben la visita de los votantes censados.

 Si este fin de semana veía como ante mis ojos fallecía Abraham Lincoln a manos de John Wikes Booth, tal y como ha inmortalizado Gore Vidal en su novela, de un disparo, hoy espero ver como comienza a expirar el mandato presidencial de Donald Trump, a manos de sus electores, con la más poderosa arma que tenemos los ciudadanos en nuestras manos en una democracia: con el voto.

 Si hace cuatro años todo el mundo daba por vencedora a Hillary Clinton, aupada por unas encuestas que escondieron la realidad del voto, especialmente en estados concretos donde la victoria cayó sorprendentemente del lado republicano,  en esta ocasión el pronóstico es mucho más incierto. Primero por la falta de brillantez y de encanto del candidato demócrata, Biden, a quien aupan más sus años a la sombra de Obama, o la capacidad mediática de su candidata a la vicepresidencia, Harris, que sus propios méritos. Segundo por los escrutinios, en los que no ha conseguido despegarse en ningún momento y en tercer lugar por el pobre argumentario que ha mostrado para convencer a sus conciudadanos, diluido por un COVID que ha eliminado a su principal adversario en las primarias, Sanders, y que ha minimizado los efectos del mensaje en una campaña en donde el momento más destacado ha sido el contagio del propio Trump con el virus. Para este viaje de pocas alforjas se han dotado los estadounidenses a los que les queda como principal argumento para ir a votar el de desterrar (o no), de La Casa Blanca al padre y mentor del moviento populista conservador que campa a sus anchas a ambos lados del océano Atlántico.

 Quedan unas horas para salir de dudas. La noche será larga. Al igual que esta entrada, que solo podrá quedar conclusa mañana. Por aquello de darle algún sentido a éstas líneas, voy a mojarme y lanzar un pronóstico: Ganará Biden y lo hará holgadamente.

 

 


lunes, 2 de noviembre de 2020

Licoln

 Es un libro este que cuando abordas su lectura en cuentras en él varios elementos que podrían ir en su contra: sabes como va a terminar, y trata sobre una de las figuras más conocidas, más retratadas y sobre las cuales más se ha escrito.Y con eso y con todo, Gore Vidal, público en 1984 esta novela histórica de título homónimo y que puede leerse en castellano en la edicion de bolsillo que ofrece la editorial Edhasa.

 Ambientada en los años más duros de su mandato, los que afectan de lleno a la guerra civil que sangró al país a causa del conflicto racial entre estados del norte y del sur, la versión de Licoln es un retrato a la vez intimista y oficial, mostrando la vida de un hombre entregado en cuerpo y alma a la causa, incapaz de desligar su función presidencial de su vida privada, a la que duras penas presta poco o ninguna atención. Consumido y escuálido, apenas si se alimentaba, pese a su quebradizo aspecto potenciado por su altura y excesiva delgadez;  detrás de esa imagen endeble escondía la firmeza y contundencia de un líder capaz de manejar los entresijos de un partido divido sobre su condición de candidato a la reelección y capacidad como comandante en jefe para dirigir los ejércitos de la unión frente a las tropas rebeldes lideradas por el General Lee.

 Con los frutos recogidos de la victoria definitiva sobre el rival sureño y la elección ganada en el bolsillo, tuvo que ser en un teatro y a manos de un actor simpatizante de la causa surista, ( John Wilkes Booth), donde cuajase el último de los inumerables intentos de asesinato que sufrió el mandatario de Kentucky, malogrado tras una agonía de nueve horas tras recibir un disparo por la espalda en la cabeza. un catorce de abril de 1865. Con el se marchó uno de los presindentes más emblemáticos de la historia de los Estados Unidos de Norteamérica, bajo cuya gestión se consolidó la unidad terrirorial de la principal nación americana.

Escrita con rigor, describiendo con detalle y cuidado los perfiles psicológicos de los protagonistas y sus intrigas palaciegas, Gore Vidal, construye un relato certero y apasionante sobre la figura del presidente que pasó a la historia por acabar con la segregación racial en su país, al menos sobre el papel. Un relato que dado su contenido adquiere el cariz de intemporal.