Cada vez que se encuentran textos inéditos de un autor consagrado, hay razones para la algarabía, si encima el autor en cuestión es Quevedo, entonces hay motivo de celebración por todo lo alto.
Se han hallado en los Archivos Nacionales de Francia, (será sin duda un viaje maravilloso intentar averiguar cómo fueron a parar estas páginas hasta allí),unos textos en formato epistolar, al que se consagró el poeta en los últimos tiempos de su existencia, retirado en el Convento de Santo Domingo en Villanueva de los Infantes, aquejado de una extraña enfermedad que estudios oseos recientes han identificado como el mal de Pott o espondilitis infecciosa u osteomielitis vertebral, una dolencia que afecta a vértebras y espacios intervertebrales,terriblemente dolorosa.
Cuentan quienes han tenido acceso a los textos hallados, que en ellos se lanzan ondanadas contra el Conde Duque de Olivares y en defensa de su enemigo acérrimo, Fadrique Álvarez de Toledo, con quien mantuvo un estrecho contacto epistolar en los ultimos años de su existencia.
Otro nuevo capítulo más que añadir a la vida de tan insigne poeta patrio, más conocido por el vulgo por sus diferentes reyertas y enfrentamientos que por la calidad, brillante y majestuosa de sus versos. Sin duda será una visita de obligado cumplimiento, la de ver in situ los restos del escritor, depositados en una urna del convento, después de que estos fueran profanados, mezclados y dificultosamente identidicados de nuevo. SIn duda el mal endémico de las artes en España, el de perder los restos de sus más insignes creadores, como ya ocurriera con Cervantes o Velázquez.
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