Todo depende del color del cristal con que se mira.
Unos ven una distancia pequeña, otros la ven muy grande.
Terceras miradas ponen sensatez y análisis sosegado, a una nueva convocatoria que trae pocas novedades a lo que ya había y que continua en la línea de aburrimiento total en que hemos entrado, en la que no hay sorpresas,( ni tan siquiera la irrupción del influencer bocazas, pone salsa a esta comida). La falta de partipación y la desidia no dan para más. La vida sigue igual, sin necesidad de que Tezanos la precocine.
Seguimos a merced de las veleidades catalanas; para qué quieren irse, si llevan diez años condicionando la agenda política de allí de donde quieren independizarse. Nunca hemos sido tan catalanes como ahora.
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