Motivación existencial

Ricón para pequeñas reflexiones ahora que las puestas de sol se ven desde los cuarenta...
por Dondo Moreno




jueves, 27 de agosto de 2020

Radar Covid

 Después de superar una primera fase de prueba, la aplicación Radar Covid ya está disponible para todo el territorio. 

Desarrollada por Indra para el Ministerio de Sanidad, una vez descargada, es tan simple y tan sencilla de usar, que bien podría decirse aquí aquello de que está hecha para tontos. 

 Su forma de activación, muy simple; una vez descargada en el terminal que se posea, hay que activar la función de bluetooth,  siempre que se tenga un smartphone con sistema IOS, y además de aquel el GPS de localización, si el teléfono es de Android.

 Ni hay que meter datos, ni tiene uno que identificarse, ni pide información que podamos considerar comprometida. En la pantalla de inicio, la que aparece cuando se entra en ella, dos mensajes destacan: el grado de posible contagio ( alto o bajo) y una pestaña donde se ofrece a quien se haya contagiado la oportunidad de ofrece y compartir esa información con los demás. 

 Esa información es especialmente valiosa si se nos ha diagnosticado el contagio, y estamos en casa en cuarentena como asintomático. La geolocalización advierte a quien pueda estar cerca de ti, que eres un caso de contagio activo, e invita a todos a protegerse, por la proximidad del virus al lugar donde te encuentras.

 En cualquier caso todas las notificaciones son anónimas. Nadie podrá poner nombre y apellidos ni domicilio a quien advierta que está diagnoticado como positivo.

 Hasta aquí todo lo arriba dicho resulta tan obvio que casi parece una perogrullada la entrada de hoy al blog, pero, como no podía ser de otro modo, son muchas las voces de alarma que se han levantado en contra de la aplicación.

 - Primero están los que no se fían de nada y ven conspiraciones por todos lados. Creen que la herramienta es una forma más de mantenernos controlados.

- Otros en cambio se quejan de tener activo en todo momento bluetooth y GPS, porque consumen mucha batería y posiblemente, datos.

- Por último están los que creen que lo de la confidencialidad no es posible, y antes o después se filtrará información, como dar indicaciones de en dónde estás en cada momento. No es ya que se pierda privacidad, es que encima creen dar pistas de por dónde paran.

 Aunque sobre las cifras hay disparidad de opiniones, se considera  que si seis de cada diez usuarios de telefonía tuvieran activada esta aplicación, conseguiríamos un caudal de información valiosisimo en forma de datos de rastreo, que permitan controlar brotes y, por supuesto evitarlos.

 En algún momento ofreceran datos de cuantos usuarios y descargas se han hecho, y mucho me temo que esa cifra será muy inferior a la del sesenta por cierto que demandan los expertos. La pereza, las dudas y la desconfianza volverán a ser nuestro peor aliado.

 Y para colmo de males mostraremos con esas reticencias una vez más nuestra completa incongruencia. Tan dados como estamos a ofrecer datos confidenciales para comprar por internet o hacer gestiones, sin contar con todo lo que compartimos por redes sociales, nos parecerá que perderemos intimidad con esto, cuando estamos especializados en hacer cosas para hacer nuestra vida cada vez más pública.

 Somos el mejor aliado del bicho. Qué duda cabe.


 



No hay comentarios:

Publicar un comentario