jueves, 31 de octubre de 2024

La Isla de la mujer dormida

La isla de la mujer dormida, (Editorial Alfaguara), es el último trabajo literario publicado por Arturo Pérez Reverte, en el que vuelve a armar una trama con contenido marino y castrense, desarrollando la acción en el Mar Mediterráneo.

 Si en El Italiano,  el periodo histórico elegido era la II Guerra mundial y escenario geográfico la Bahía de Algeciras y el Peñón de Gibraltar, en el caso de esta novela es La Guerra Civil Española y su ubicación las costas de Grecia.

 Corre el año 1937, desde el Mar Negro, la Unión soviética arma distintas expediciones para llevar suministros al Gobierno de la República, que deben cruzar el archipiélago heleno, no sin antes tratar de sortear además de los accidentes geográficos y embates climatológicos, diversas acciones de sabotaje; entre éstas últimas el libro narra la historia de Miguel Jordán, un marino mercante hispano-griego, al que tras una breve instrucción en Alemania, situan al frente de una lancha torpedera, oculta en una de las Islas al norte de las Cícladas, que tiene por misión hundir en las aguas del Mare Nostrum cuantas naves con armamento, combustible y demás pertrechos envíen las huestes de Stalin al gobierno legítimo asediado por las tropas sublevadas.

 Con lenguaje riguroso que introduce al lector en el mundo marino y bélico al que con tanta frecuencia recurre el autor en sus ficciones, Perez Reverte construye esta historia de guerra, con tintes de aventura y pasión con el trasfondo de lo acontecido en unos meses de un año que habría de ser decisivo para decantar la balanza de un conflicto que marcó para siempre la historia de este país.

 


 

miércoles, 30 de octubre de 2024

R.I.P.

  En memoria de las víctimas de las riadas en Valencia y Albacete

 Que la ausencia de las que ya no están y el dolor de sus familias por su pérdida nos iluminen y nos hagan recapacitar, pensar en qué estamos haciendo mal y qué podríamos haber evitado. 

 Descansen en paz.

 

martes, 29 de octubre de 2024

Balanza

 A Santiago Nasar lo han vuelto a asesinar, pese a que todo el mundo sabía que pendía sobre él una amenaza, que alguien lo quería ver muerto. 

 Todos lo sabían y él sólo se murió. Desde hace más de un año en los mentideros políticos se tenía constancia de abusos y excesos, pero nadie hizo nada, nadie movió un dedo, ni siquiera por coherencia discursiva. Era un activo para su formación, uno de los grandes reclamos de la marca electoral; en el fiel de la balanza prevaleció y tuvo más peso la oportunidad y el interés frente a la decencia. Nada nuevo bajo el sol.

 El daño está hecho y la batalla de le credibilidad, perdida. Algunos van a comerse el turrón con fecha de caducidad.  

lunes, 28 de octubre de 2024

Chapo

 El Chapo no tiene quien le escriba, como el coronel del libro de Gabriel García Márquez. Se siente sólo, desamparado, mal representado por unos abogados que lejos de aliviarle la pena, le han conducido, según él a un laberinto jurídico con visos de mantener incólume la cadena perpetua que le recluye en un penal de máxima seguridad en Colorado, (EEUU). 

 El narco más grande la historia, después del ajusticiado en los tejados de Medellín, Pablo Escobar, solicita un nuevo juicio, alegando irregularidades en el proceso de extradición, después de que volviera a ser capturado tras su fuga de película .

 Asumirá su propia defensa, sin conocimientos legales, sin capacidad de expresarse en inglés.  

 Mientras espera a que llegue, pide que se amplíe el abanico de bis a bis disponible para ver a su esposa, Emma Coronel, reina de la belleza estadounidense treinta años más joven que él. El atractivo del reo que una vez más, arrastra hasta así a parejas pese a su condición penitenciaria limitada.

Puede que la carrera entre rejas del narco, ensombrezca sus fechorías en libertad y que compita en notoriedad con el otro prófugo condenado de por vida, cuya colección de cadenas perpetuas no deja de crecer, el venezolano Carlos, el chacal.

domingo, 27 de octubre de 2024

Cambio de luz

 Cambio de hora, una hora más en la cama. A las ocho de la mañana ya luce el sol con todo su esplendor. Adiós a las mañanas eternas a oscuras.

 Vendrán días extraños, de estar descolocado, como si la cabeza y el cuerpo necesitasen adaptarse a un cambio que es más un cambio de luz que de hora.

 Luz que se apagará demasiado pronto en la tarde, recortando la visiblidad al salir del trabajo, en las horas de tiempo libre entre semana. Parece que no fuera lo mismo sin luz, como si se agotaran antes las energías para hacer cosas.

 Otro año más así, pese al runrún que habla de acabar con esta costumbre de modificar el reloj por cuestiones de ahorro energético.Práctica que puede que ahorre en lo económico pero que desgasta en lo físico y sobre todo, en lo anímico.

 Tiempo de adaptación. 

 

sábado, 26 de octubre de 2024

Perros y gatos

 Es divertido cambiar de idioma, especialmente en lo relativo a expresiones populares que son de uso corriente en la calle. Así, por ejemplo, lo que aquí es llover a cántaros, para significar que esta lloviendo mucho, en inglés por ejemplo se dice,  it´s raining cats and dogs. No hay recipiente que valga que se arroja hacia abajo con su contenido, no; allí caen del cielo mascotas. 

 De un tiempo a esta parte es lo que sucede en mis sueños, que  aparecen en ellos perros y gatos por doquier, pero no caen del cielo, si no que surgen en mi vida, en sus diferentes aspectos o momentos; paseando por la calle o haciéndome arrumacos a primera hora de la mañana, muestra de cariño constante de la que no adolece nunca aquel que vive con un animal en casa.

 Parece obvio que la cabeza está mandándome señales, esas que me resisto a seguir o hacer caso, por cuestiones varias. Vivir en un piso pequeño y pasar muchas horas fuera de casa, son el irrefutable argumento al que me agarro para procastinar la decisión de volver a tener un animal de compañía, algo que sucederá incuestionablemente, sea cuando sea. 

Bombas

 Ha ocurrido esta madrugada en una conocida zona de una capital española del norte. Una detonación ha provocado el derrumbe de un edificio, dejando el desgraciado balance provisional de un fallecido y diez heridos de diversa consideración.

 Con el lógico desplazamiento de los medios al lugar, han llegado las primeras impresiones, especialmente de los vecinos, para los que ha sido una noche muy larga, obligados muchos a abandonar sus casas, al ser la primera de las medidas preventivas decretadas por bomberos y Protección civil, la del desalojo de los edificios colindantes por temor a posibles derrumbamientos posteriores.

 Todo a punta a que el origen de la tragedia procede de un escape de gas y su posterior explosión, confundida por algún vecino con la detonación de un coche bomba, habitual modo de agresión de la banda terrorista ETA, hace no hace tanto tiempo.

 Tanto es así que aún permanece en la memoria colectiva. De manera instintiva es el primer pensamiento que viene a la cabeza. Han sido demasiados años de muerte, sangre y bombas, que han afectado de lleno a varias generaciones durante más de cincuenta años. Cosas así tardan tiempo en quedar sepultadas en olvido cotidiano, que no en la memoria histórica. Cerca de mil asesinados no pueden quedar lastrados a ese abandono, por mucho que la política evolucione y las nuevas generaciones vivan en otro mundo, con otras preocupaciones.

viernes, 25 de octubre de 2024

Pecados transversales

 Terremoto de dimensiones desconocidas, el que ha provocado la dimisión del líder y fundador de uno de los partidos integrantes de la coalición gubernamental, a raíz de la denuncia por acoso cursada ante la policía por una conocida presentadora y actriz de cine. 

 Un hervidero de opiniones que van desde la indignación lógica hasta la intepretación de lo sucedido, que está dejando perlas curiosas.

 Entre todas ellas llama la atención aquella que sugiere que el caso que nos atañe está despertando sorpresa, porque los abusos y excesos son habitualmente patrimonio de la derecha, manifestación que, como poco, deja perplejo.

 Debe ser que no hay machos alfa que votan a partidos de izquierdas.

 Cosas de la ideología.  Al progresista se le supone comprometido, respetuoso, tolerante y avanzado en cuestiones sociales y de derechos. 

 Sobre el papel todo es válido.

 Pero la realidad es otra: hay machistas en la izquierda, igual que hay fascistas, explotadores, defraudadores o ladrones.

 Pecados capitales transversales, que no entienden de arcos ideológicos. Nadie esta libre de sospecha, ni de equivocarse, a cualquier nivel. Las lacras no son selectivas y los delitos sexuales sólo tienen un denominador común: víctimas que hay que cuidar, proteger y reparar, tras sufrir la peor vejación posible.

 Mucha gente dolida, esa es la otra conclusión que se deduce de lo que estamos viviendo, al ver que uno de los defensores del más acendrado feminismo, escondía a un depredador sexual. Golpe difícil de encajar.

 

 

 

jueves, 24 de octubre de 2024

Distintos

 Es evidente que cada generación es diferente, porque son distintos los estímulos que recibe y por ende, diferentes los comportamientos que despliegan.

 Las nuevas generaciones entenden el ocio de otro modo, consumen menos alcohol, viajan virtualmente a través de redes sociales, hacen menos uso del transporte, conducen menos y más tarde, vehículos privados, cuya compra ya no es una inversión imprescindible, ni elemento identificador de status social alguno; están más concienciados por el medio ambiente y tienen una visión estructural mucho más reducida. La inmediatez de cada asunto, hace complicado establecer una previsión a largo plazo, evitando con ello que tengan una percepción de las cosas más cortoplacista, menos tendencia a ser planificadores, sabedores de que el mundo ahora, no les asegura trabajo, ni necesariamente permanecer en el sitio donde han nacido o se han criado.

 Mundo volátil, mundo líquido, mundo de usar y tirar, como decía Bauman, sociólogo imprescindible de cabecera. Este cambia y con él necesariamente las cabezas, que han de amoldarse al cambio constante, elemento enriquecedor, pero también de incertidumbre, sin el cual, no puede enterderse la vida moderna.

martes, 22 de octubre de 2024

El bar

 Hoy me he acordado de mi padre, más bien de su bar, ese que hace muchos años montó como un trabajo paralelo a su tarea de funcionario y que llevaba con horarios esclavos con la ayuda de mi madre. Ese mismo que le hizo de oro en poco tiempo, el que casi con la misma rapidez lo llevó a la miseria.

 Aún no son las seis de la mañana y en una cafetería de la avenida principal del pueblo montan guardia varios hombres, esperando a que suban la cancela.  Dentro del local se ve luz.

 Recuerdo muy de niño cuando mi padre abría su local, no tan de mañana pero si bien temprano; estando de vacaciones escolares solía acudir con él muchas veces. Esperábamos a que llegase mi madre, que traía comida preparada desde casa para dar los aperitivos; en aquel local había veces que en mucho tiempo no aparecía nadie por allí; recuerdo el silencio de la barra, sólo interrumpido por el soniquete de las máquinas tragaperras. Ya con mi madre trasteando en la cocina y mi padre de vuelta a sus funciones de cartero, mi tarea consistía en vigilar si entraba alguien y mientras tanto, me entretenía dando patadas a un balón que rebotaba contra la pared de una vieja y desconchada cochera, sin uso desde sabe Dios cuántos años, en la acera de enfrente de la calle.

 Contrastes. A la paz de aquellos comienzos, se opone este trasiego atosigante de clientes, que casi no esperan a que el agua caliente circule por los conductos de la cafetera, o que las cámaras estén ya repuestas de bebidas con alcohol, agua y refrescos.  A buen seguro que es una rutina que se repite día tras día, cantinela de días laborables.

Sabina

 Se agotan las entradas de la gira de despedida de Joaquín Sabina, el cantautor español que más admiro. La última de las viejas glorias de la música patria que pone punto y final a su carrera profesional, después de muchas décadas en el candelero.

 Se terminan mis opciones de verle tocar en vivo, sobre un escenario, en una gira tan significativa como esta, que es la última.

 Tras mucho pensarlo, he decidido dejarlo estar, dejarlo correr; no seré testigo del colofón, del fin de fiesta de un músico tan brillante como impredecible.

 Trovador de causas perdidas y de gentes corrientes, me quedaré con la magia de sus discos, (practicamente los tengo todos) y de la voz, que por culpa de excesos y desmanes, perdió su timbre y melodía.

 Tal vez sea por eso, por lo que no me apetezca despedirle en un concierto. La afonía de sus últimas composiciones es un duro hueso que no he terminado de asimilar.

 A fin de cuentas, esa es la suerte y la magia de los artistas, que nunca se van, nunca se retiran, nunca perecen; son eternos en sus creaciones. Como hago hasta hoy, cuando lo necesite pondré alguna de sus canciones míticas, ambiente perfecto para momentos de reflexión y recogimiento.

 Adiós Joaquín y buen retiro.

  "... Ahora es demasiado tarde, princesa
Búscate otro perro que te ladre, princesa."

https://www.youtube.com/watch?v=FzKlIHvLaAI 

 

 

 


 

Poner las calles

 Tiene su encanto madrugar. Es una quietud y una paz que no pueden encontrarse durante el resto del día. El reloj aún no marca las seis de la mañana y mis pasos transcurren tranquilos por aceras vacías y mal iluminadas.

 De cuando en cuando me cruzo con algún vehículo que con sus luces me ilumina, sacándome de la penumbra por la que transcurre mi caminar ligero y silencioso.

 Sólo cuando bajo a la zona comercial del pueblo, donde están todas las tiendas principales, empiezo a cruzarme con gente, repartidores y dueños de negocios que levantan la persiana y comienzan a colocar el género en sus expositores. Labor de anticipación antes de que llegue la hora de apertura y de afluencia de clientes.

 El resto del camino ya no es tranquilo ni solitario, hasta desembocar en el apeadero del cercanías; en el andén caras de sueño y cuerpos aún relajados guardan silencio a la espera de la llegada del convoy que nos llevará al corazón de la ciudad.

 Un día de trabajo más, por delante.

 Tiene su encanto madrugar,poner las calles, como siempre se ha dicho; una expresión exagerada que tiene por objeto llamar la atención de la casi osadía que supone pisar la calle tan temprano, cuando la mayoría aún sigue en la cama.

lunes, 21 de octubre de 2024

Ozempic

 Es una nueva revolución farmacológica que ha transcurrido un camino que parte desde los tratamientos diabéticos a la obesidad. 

 Presentada en formato inyectable desde 2017 su presentación ha sido una rampa de lanzamiento brutal hacia le estrellato, que ha hecho que su empresa farmacéutica gane miles de millones de dólares en beneficios.

 Como un bálsamo milagroso, el ozempic es en esencia un medicamento para mantener a raya los índices de glucosa en sangre, pero tiene otros efectos, los de permitir perder peso; eso ha disparado la demanda de un producto más pensado para ayudar a controlar una enfermedad que para mejorar la estética de cada cual.

 Soprendente si tenemos en cuenta que:

 - Es un medicamento recetado a pacientes que sufren diabetes tipo 2, eso obliga a contar con el visto bueno del endocrino, que a buen seguro advertirá a sus enfermos de los posibles efectos secundarios del mismo: náuseas, vómitos y diarrea, así como otras complicaciones mayores como las derivadas de una pancreatitis aguda, hipoglucemia, gastroparesis o necrosis de yeyuno.

- Sin ser recetado por el sistema sanitario público del país, el coste de cada inyección puede oscilar entorno a los trescientos cincuenta euros por una dosis de diez gramos.

 Puesto que un buen amigo está siguiendo su tratamiento y me cuenta su experiencia, (especialmente en los efectos saciantes, le reducen el apetito de manera notoria) y siendo como soy hijo de diabéticos, no puedo menos que estar al cabo de la calle en estos menesteres, aunque sean tan sorprendentes como este, donde salud y belleza van cogidos de la mano.

 

 

domingo, 20 de octubre de 2024

Volver

 Semana extraña la que termina hoy. Días de pensar mucho, de andar descolocado, de sentir una rara desidia interior que ha terminado por descolocarlo todo.

  Supongo que antes o después tenía que llegar esto. Tras mucho tiempo de dejarme arrastrar haciendo cosas sugeridas por los demás y muy pocas pensadas por mi mismo.

 Ha llegado la hora de cambiar las tornas, de volver a ciertos hábitos reducidos a la mínima expresión que me hacen tanto bien y que tanto me gustan.

 Necesito volver a tener tiempo para mi, para mis libros y mis lecturas, para mis horas de escritura; necesito volver a pasar tiempo en casa o fuera, pero sólo y a mi aire.

 La soledad escogida es un don, siempre.

 Voy a darme de baja de unas cuantas cosas y soy consciente de que no a todos va a gustar, pero estoy tranquilo; sé que quien me aprecia y me conoce, lo entenderá perfectamente.

 Ha llegado la hora de volver a lo que me da dicha y me enriquece. 

 Es el momento de encontrar tiempo para mí.  

 Extraña generosidad la mía de hacer cosas con los demás, de no negarme, por no hacer un feo a nadie y, en cambio, si hacérmelo a mí.  

 Pasan los años y sigo sin aprender a decir no, en tiempo y en forma. Craso error.

 

La habitación de al lado

 Ayer for fin encontré el momento para ser fiel a mi cita de acercarme al cine para ver el último estreno del directo manchego Pedro Almodóvar, ninguno de cuyos trabajos dejo de ver en salas de cine. Sin duda todo un ritual que no cumplo con ningún otro realizador.

La habitación de al lado, Premio León de oro del Festival de cine de Venecia, cuenta la historia de Martha una periodista corresponsal de guerra  a la que le diagnostican un cáncer de cervis en fase avanzada inoperable. Su amiga Ingrid, amiga de muchos años y escritora de éxito, tiene conocimiento de la enfermedad de Martha a través de una amiga común, viéndose en la necesidad de ir a  visitarla al hospital; es entonces cuando ambas amigas retoman su amistad y viven juntas la fase final de la enfermedad, que incluye una complicada petición de la enferma, dispuesta a poner fin a su vida antes de que lo haga el mal que le aqueja.

 Con La habitación de al lado, Almodóvar retoma el tema de la muerte y el dolor que ya introdujera de manera notoria en su film de 2021, Dolor y Gloria, cinta autobiográfica protagonizada por Antonio Banderas. En este caso, Pedro da un paso más y afronta el proceso, no desde el miedo a la muerte y a los achaques de la edad, si no desde la asimilación de la muerte ya certificada por los médicos. La película es un debate moral e intimista sobre la cuestión de la eutanasia, algo ilegal en una inmensa mayoría de países del mundo.

 Con una fotografía excelente y buen gusto en la elección de exteriores, desarrollada a través de un guión limpio, sin los giros imprevisibles de otras películas, Almodóvar construye la trama con la ayuda de dos grandes actrices, que dan veracidad a la historia con elegancia y oficio: la hierática y siempre misteriosa Tilda Swinton en el papel de la enferma Martha y Julianne Moore, en el de Ingrid; las dos cubren el espectro argumental, dejando al resto del elenco de actores como piezas muy secundarias en una historia de reflexión, humanidad y compromiso.

 Gran trabajo del director de cine español más universal, galardón que comparte con Luis Buñuel, cuyo recorrido posiblemente sea aún mayor del que ya ha adquirido a través de premios y reconocimientos. En mi opinión su mejor film desde Todo sobre mi madre, estrenada hace ya la friolera de veinticinco años.

 


 

sábado, 19 de octubre de 2024

Campos

 Por triste que pueda parecer el campo de concentración moderno es un invento español. Fue en la Isla de Cuba, durante la denominada Guerra de los diez años (1869-1878),experimento de detención y mantenimiento de prisioneros en condiciones de dudosa humanidad al que pronto se acogieron imitándolo los estadounidenses en la Guerra de Filipinas, o los británicos en la Segunda Guerra de los Boers, ambas en el intervalo que cerraba el siglo XIX y daba comienzo al XX.

 Choca pues, oir mencionar estos recintos de retención y castigo antes de la II Guerra Mundial, cuando las autoridades nazis abducieron a todo un país, que como un manso cordero, asumió como propias las tesis de exterminar a la etnia judía por ser el cáncer que había consumido, empobrecido y eliminado la esencia aria y germana de la faz de la tierra. La denominada solución final, definida como tal en la Conferencia de Wannsee, no tuvo reparos en incluir a otras etnias en sus planes de asesinatos masivos, como la gitana o la eslava, todas ellas razas inferiores. 

 Cuando el mundo tuvo conocimiento de lo acontecido, entró en estado de shock profundo y se conjuró par no repetir errores capitales como éste. Poco duró la conjura.

 Los propios aliados internaron a los judíos supervivientes en campos de concentración, incapaces de darles una salida digna; muchos de ellos jamás regresaron a sus países de origen, ni se les compensó por el expolio que habían sufrido; de repente occidente se encontró con un problema imprevisto, ya no había nazis pero en muchas partes de la Europa Oriental no querían ver ni en pintura a los judíos, dando así alas los nacionalistas sionistas que reactivaron el plan de construir una nación judía en tierra santa, donde la diáspora bíblica. El caldo de cultivo perfecto para, sobre una injusticia, levantar otra, creando un Estado Judío artificial en Palestina, avalado por la mismísima ONU en 1948, impuesto sin respeto alguno por los pueblos que ya habitaban allí.

 Cuando aparentemente nos habíamos olvidado de los campos de concentración, gracias a la denuncia de un disidente ruso, Aleksandr Solzhenitsyn, volvimos a tener noticia de ellos a través de su personal visión del Gulag, sistema de campos de trabajo que las autoridades soviéticas levantaron en zonas poco salubres para internar en ellos a personas peligrosas para el régimen, por sus actividades esencialmente politicas. El mundo entero redescubrió la maldad y tiranía una vez más, sin que nada de lo que hubiese ocurrido antes sirviese de ejemplo.

 Mientras en Asia, los Jemeres rojos de Pol Pot, asombraron todavía más al mundo con sus sistemas de explotación comunales, ampliando las cifras de muertos y masacrados a cifras inasumibles.

 La herida poco a poco ha ido cauterizando y la capacidad de impacto también, a pesar de la crudeza de muchas imágenes ahora que la información nos llega en tiempo real. En la era de la globalización y del mundo hipercomunicado por internet, aún hay espacio para el desconocimiento y la ignorancia. Apenas sabemos qué pasa en países subsaharianos, ni como las mafias que trasladan migrantes al primer mundo manejan a las hordas de personas que buscan desesperadas una salida. Lo que si sabemos es la falta de capacidad de respuesta de nuestras autoridades, prufundamente incompetentes y desbordadas, que ahora se plantean como respuesta enviar a paises del segundo y tercer mundo a los migrantes que no podemos asumir. En Albania, en Uganda, ¿Bajo qué condiciones, con qué garantías, con qué vías de solución? 

 ¿ Estaremos ante un nuevo modelo de campo de concentración? Son personas, no fardos, merecen un respeto, un trato digno, una respuesta.

  

 

 

viernes, 18 de octubre de 2024

Novela de espías

 Parece un personaje propio de una novela de John Le Carré, a quien a buen seguro no le hubiera costado incluir su perfil en alguna de sus intrigas ambientadas en los años de plomo, los años de la guerra fría.

Se llama Pablo González o Pavel Rubstov y es nieto de un niño exiliado de la Guerra Civil española, uno de los muchos que abandonaron en barcos las costas del país para ir a vivir a la extinta Unión Sovietica. Muchos no volvieron a ver jamás. Su madre nunca renegó de la nacionalidad española, permitiendo a su hijo poder solicitarla junto a su originaria rusa. Divorciada de su marido, decidió siguir el camino contrario de su padre, aficándose con su hijo de nueve años en el País Vasco.

 Residentes en Bilbao, el nieto de republicanos se licenció en lenguas Eslavas y en Estudios estratégicos y de seguridad internacional. Pronto comenzó a viajar como periodista freelance para diferentes agencias y medios. En una de esas tareas fue detenido en febrero de dos mil veintidós, en una ciudad fonteriza de Polonia, acusado de ser un agente del Departamento central de inteligencia ruso que obtenía información para sus pagadores camuflado en su condición de periodista.

 Desde el primer momento este asunto pareció verdaderamente extraño, provocando muchas dudas y preguntas:

- ¿ Qué clase de poder y de capacidad de obtener información tendría un aparemente simple reportero de guerra? 

- ¿ Por qué se le detiene en Polonia, cuando venía huyendo de Ucrania donde le consideraban un peligro para el país?

-  ¿ Por qué se le incomunica durante cerca de dos años, sin tener posibilidad de acceder a su abogado, en lo que es una conculcación de los derechos básicos de cualquier reo? 

 El primero de agosto de dos mil veinticuatro, sin entender nadie la apatía de las autoridades consulares españolas o de la propia Unión Europea, fue finalmente liberado en el aeropuerto de Ankara en Turquía, en un canje de prisioneros acusados de espionaje acordado por Rusia y varios países europeos. Inmediatamente voló hacia Moscú donde fue recibido por el propio Putin, que anunció que sería condecorado en breve. Con problemas físicos importantes en los pulmones aparecidos tras su larga estancia en cárceles polacas, el espía pretende volver a Bilbao cuando la sucesión de acontecimientos lo permita. Será el momento de cerrar el círculo y los datos que puedan faltar en esta historia, aunque ya nadie pone en duda que se trataba en realidad de un informador a sueldo del líder ruso, en toda regla.

 De película. Como de costumbre, la realidad supera a cualquier ficción novelada. 

Somos los Conguitos

 Es, sin duda, uno de los dulces de mi infancia. En el mercado desde mil novecientos sesenta y uno, sigue manteniendo su producción en Utebo, un pueblo de Zaragoza, pese a no ser ya un negocio familiar y formar parte de una gran empresa dedicada al sector alimentario.

 Venían en una bolsa de color naranja, cacahuetes redondeados que traían un baño de chocolate, que ya se podía adivinar en el envoltorio; junto a ellos, un niño de color con forma oronda y redondeada y sonrisa de labios gruesos, terminaban por adornar la bolsa.

 Conguitos del Congo, como recién traídos de su tribu africana, dulces y deliciosos, tentempié en centenares de recreos y al salir de clase; aún hoy de adulto alguna vez los he vuelto a comer, sin que ello pudiera evitar traerme decenas de recuerdos.

  Todo esto viene a colación de una noticia que publica hoy la prensa:

 

 El Parlament de Cataluña ha decidido retirar los Conguitos de su bar, por su “connotación racista”, según ha informado La Sexta. Esta decisión ha sido tomada por el propio establecimiento tras escuchar el comentario de uno de sus clientes que afirmaba que se trataba de un producto racista.

 

 Nadie puede poner en duda la connotación tribal del anuncio, así como de la presentación del producto, visto con los ojos de un adulto; sólo sé que cuando era niño, nunca sentí que menospreciase a nadie el nombre del producto, ni que considerase de menos a los negros, a los que no si quiera identificaba como tales; tan sólo veía la simple analogía del color, negro es el chocolate, como lo son los niños del congo.

 Acabarán por cambiar el nombre y muy probablemente la presentación del dulce en sus bolsas; sin duda son otros tiempos y se perciben las cosas de un modo diferente. Para terminar esta entrada, sólo puedo decir que nunca he sentido que este y otros productos como este, alimentaran voluntad racista alguna. De hecho me viene a la cabeza el soniquete de la canción del anuncio y su comienzo: Somos los conguitos..., ese somos era integrador y cómplice e inspiraba ternura y ganas de comer chocolate, que era únicamente de lo que se trataba.


   https://www.youtube.com/watch?v=ODjOO_br78Y 

viernes, 11 de octubre de 2024

Lluvia

 Agua que cubre el asfalto, marcando con su pátina resbaladiza el frío y seco alquitrán de oscuridad variable. Compañía impenitente, kilómetro tras kilómetro. Así da comienzo el fin de semana y sus traslados. 

  Norte que hace gala a su fama, con o sin perturbación meteorológica anormal. Este verde que está noche rodea mis sueños, requiere de tan notoria carga hídrica. 

 Escampe o no escampe, habrá merecido la pena. 

jueves, 10 de octubre de 2024

Casino Tropicana

 La ciudad del pecado se ha quedado sin su gran símbolo, con apenas sesenta y siete años de existencia. El Casino hotel Tropicana, ha sido demolido en Las Vegas, (Nevada). En el espacio que deja libre, se construirá un estadio de béisbol.

 La inmensa mole de hormigón blanco dejará de ejercer de mascaron de proa de un barco al que se suben millones de personas, año tras año. Porque hay muchas formas de hacer turismo: hay quien prefiere visitar una catedral gótica, quien busca envolverse en un páramo natural; otros, en cambio, van a embullirse en un mar de luces levantado casi milagrosamente en mitad de un desierto, con el objeto de convertirse en un santuario del juego y las excentricidades.

 Para gustos, los colores, para los jardines, flores. Así reza el refrán y así termina este obituario a un hotel que nunca visitaré, en una ciudad que no me llama la más mínima atención.

 

 

Porque te vas

 Hoy he vuelto a acordarme de Bernardo Sasetti, el pianista de jazz portugués al que conocí después de asistir a un concierto en la Casa de la Musica de Porto que formaba parte de la gira de presentación del disco que junto al célebre fadista Carlos do Carmo, grabó allá por el año dos mil diez.

 Apenas un año más tarde fallecía despeñándose por un acantilado en Cascais, tratando de conseguir unas fotos para el que iba a ser su nuevo libro.  Una fatalidad del destino, que se llevó por delante la vida de un enorme artista sin límites en su tarea creativa.

 El motivo de ese recuerdo obedece  a que leyendo uno de los periódicos de hoy, se mencionaba la muerte de una famosa tiktoker rusa al caerse por las escaleras de una boca de metro en Tiflis, Georgia; muerte grabada en directo, por ella misma y una amiga que acudían felices y despreocupadas al suburbano cantando una canción curiosamente española en su versión rusa. Porque te vas, compuesta por Jose Luís Perales e interpretada por Jeanette. Casualmente la canción en una de sus estrofas dice:

Junto a la estación lloraré igual que un niñoPorque te vasPorque te vas
 
 Muertes absurdas, tropezones de fatales consecuencias que podrían haberse evitado y que impactan por la inmediatez conque se registran, desde que disponemos en el bolsillo de una estación de grabación permanente con la que dar testimonio de momentos. La vida entendida como una película constante en la que no siempre hay risas o un final feliz. Descanse en paz.

 

lunes, 7 de octubre de 2024

Colapso

 Hay honda preocupación, aunque se disimila para evitar que la multitud entre en pánico. 

 Mientras se lanza la campaña de vacunación contra la gripe, como todos los comienzos de otoño, la ministra del ramo y sus homónimos en los territorios autonómicos debaten cómo prepararse para hacer frente a un comienzo de estación con gran incidencia de virus: Covid y gripe, conjuntamente, amenazan con tensar el sistema sanitario y sus recursos, como ya lo hicieran durante la pandemia.

 Con la primera de las estaciones frías, volvemos al riesgo de sufrir un colapso.

 Pandemia que hemos superado y de la que aparentemente no nos acordamos, pero que sigue ahí en el recuerdo, parte de un pasado que no queremos revivir bajo ningún concepto; no en vano sus principales protagonistas siguen con nosotros, no han dejado de acompañarnos a lo largo de estos casi cinco años  de convivencia con los nuevos agentes patógenos, tan activos como lo estaban antaño.

 Prevención y profilaxis, no hay mejor modo de ayudar al sistema y de evitarnos el mal rato de pasar una gripe, con o sin corona.

La Casa de Matriona y El incidente de la estación de Kochetovka

 Estos dos relatos cortos,reunidos por la Editorial Tusquests, en su Colección Andanzas, firmados por Alexandr Solzhenitsin, deben enmarcarse en la línea narrativa iniciada con Un día en la vida de Iván Denísovich, donde se refieren historias auténticas vividas en primera persona por el autor, que son la antesala de la obra cumbre de este escritor ruso, Archipiélago Gulag.

 Estos textos son el testimonio en primera persona del autor, detenido al acabar la II Guerra mundial, acusado de delitos de opinión, que dieron con sus huesos en un campo de trabajos forzados, en el que permaneció a lo largo de once años antes de ser de nuevo un hombre libre aunque sometido a destierro, el mismo que le llevó a vivir en zonas de la Rusia central en las que se ganó la vida como profesor de matemáticas.

 Textos que cuentan la vida de gentes sencillas, de vida rural llena de asperezas, pocas comodidades y grandes carestías, que son abordadas por Solzhenitsin como un canto a la esencia de la patria, mancillado por veleidades políticas que nada tienen que ver con el populacho y su integridad. Sin poder evitar el espíritu crítico que le caracterizó siempre y que llevó a que sus obras fueran censuradas y él expulsado de la Unión Soviética, a la que tan sólo volvió en su ocaso, a comienzos de la decada de los noventa, no se ahorra críticas al sistema burocrático del régimen comunista,  que de manera notable manifiesta en la figura del jefe de estación Zotov, frustrado por perder su valioso tiempo en papeleos y ordenamiento del trafico logístico ferroviario, en vez de ser uno más en frente y en el campo de batalla, a donde añora ser destinado.

 Con una prosa sencilla, rica en matices descriptivos y en el desarrollo de los perfiles psicológicos de sus personajes, la literatura realista de Solzhenitsin se ha convertido en un paso necesario para conocer el viejo sistema político, económico y social, que supuso la creación y existencia de la Unión de repúblicas socialistas soviéticas, ( USSR, en sus siglas en inglés), durante sus setenta y cinco años de existencia. Lectura imprescindible.





Propaganda

 Escrito por uno de los gurús del mundo de la publicidad, el mismo que en los años veinte del siglo XX, consiguió con sus campañas de anuncios que Chesterfield, marca de cigarrillos, encontrara acogida entre el público femenino, en una práctica poco extendida entre las mujeres en aquella época, empleando para ello estrategias que son parte del día a día hoy, como emplear estrellas del celuloide como reclamo; haciendo así uso del clásico allá donde fueres, haz lo que vieres...

 Libro publicado hace cien años que tiene vigencia inusitada, con los argumentos, consejos y experiencia de uno de los padres la publicidad, que repite como un mantra la necesidad del uso de la propaganda en todos los ámbitos: comercial, social o político. Sólo conociendo las necesidades del gran público, siendo capaz de crear vínculos que permitan estrechar lazos, sólo generando necesidades entre los potenciales consumidores, el producto que sea tendrá exito.

 Editado en formato de opúsculo, de lectura clara y directa, es un libro apto para todos los públicos, ya sea gente del ramo, eruditos o simples curiosos.

 


 

viernes, 4 de octubre de 2024

La niña y el mar

 Tercera reunión del Club de lectura Balear-Uruguay, que con dedicación y pasión coordina Noelia Broncini, para afrontar una nueva lectura de literatura en lengua castellana firmada por autores nacidos en la República Oriental del Uruguay

 En esta ocasión, contamos con una novedad que hacía todavía más rico e interesante el debate, al incluir como gran atractivo la sesión, la oportunidad de contar con la autora del libro leído, para compartir con ella impresiones y vivencias.

 La niña y el mar, (Editorial Caligrama), es la segunda obra de la escritora María Noel Umpiérrez y es un cuento para adultos, que narra un viaje, el de una niña que se adentra en los abismos del mar acompañado por un caracol que le orienta y asesora en su viaje.

 Escrito con un lenguaje sencillo, propio de una menor que sin embargo, hace frente en el viaje a todos los dilemas existenciales con los que convive y tiene que hacer frente el ser humano a lo largo de su periodo vital,el texto nos invita a hacer un intento de instrospección con el objeto de conocernos en profundidad y con ello sacar todo lo bueno que llevamos dentro. En un ejercicio de notable dificultad literaria, Maria Noel consigue tocar todos los temas transcendentes desde una perspectiva inocente y natural, convirtiendo a la niña en un proyector sobre el que el lector se inclina para responder a cuantas preguntas requiere el texto contestar, en una permanente metáfora interpretativa que cuenta con pasajes de gran belleza y transcendecia.

 Libro vital y reflexivo, que por momentos más parece un manual de filosofía, con referencias indirectas a Platón, San Agustín o el propio Descartes, La niña y el mar es uno de esos libros que puede leerse como un cuento  o como una lectura sesuda, sin que ninguna de las dos maneras de hacerlo deje indiferente. 

 Un lujo sin duda, contar con la presencia de la autora que nos contó las inquietudes que le impulsan a escribir y las que le llevaron a escribir un libro como el que hemos leído, tan profundo y sensible, que puso en varios tramos del coloquio la carne de gallina a los allí congregados, imbuídos en una atmósfera íntima, imposible de prever y de describir.

 Sesión para el recuerdo, inolvidable, que hará todo un reto afrontar la próxima con el listón tan alto.



 

 

jueves, 3 de octubre de 2024

Nefertiti

La reina Nefertiti está de aniversario. Se cumplen cien años desde que fue expuesta al mundo por primera vez en Berlín en 1924, después de que durante siglos durmiera oculta en el taller del artesano Tutmose, hasta que el arqueólogo alemán Ludwig Borchardt y su expedición la encontraran, doce años antes.

 Datada pues en el siglo XIV antes de Cristo, en un periodo en el que el resto de material escultórico hallado dista mucho en sus acabados, especialmente en sus estudios anatómicos, donde la rigidez de caras y otras partes del cuerpo son la tónica dominante; frente a ese hieratismo predominante, luce imponente el busto de la esposa del Faraón Akenatón, reina de la XVIII dinastía, que mantiene intacto su rictus altivo y lleno de belleza que deja anonadado a quien tiene la oportunidad de verla protegida en su urna de cristal, en el Neues Museum de la capital federal alemana.

 Leyendo el artículo de prensa que menciona la celebración de su centenario, me han venido a la cabeza recuerdos de cuando fui a visitarla, en ese increíble espacio que poseen los berlineses y que llaman la isla de los museos; después de salir fascinado del Museo de Pérgamo, todos los que allí nos encontrabamos ibamos sometidos a un alto grado de excitación, sabedores de que la reina más hermosa de Egipto, nos estaba esperando.

 Feliz aniversario y larga vida a la reina, para quien envejecer no le resta un ápice de su belleza inmortal y eterna.





miércoles, 2 de octubre de 2024

El hombre que se mareaba con la rotación de la tierra

 Estaba solitario en la estantería de arriba ubicada en la estación de metro Príncipe de Vergara, de una de las librerías que Metroteca ha colocado por la red del suburbano en Madrid. Donde antes había una papelera ahora hay un espacio donde poder dejar libros y también cogerlos.

 Casualmente volvía a casa desde la FNAC con libros comprados, cuando vi un ejemplar de este: El hombre que se mareaba con la rotación de la tierra, Editorial Everest, que fue galardonado en 2009 con el II Premio Villa de Pozuelo de Alarcón de Novela Juvenil.

 Es la ópera prima de Cristina López Barrio, escritora madrileña de consolidada carrera literaria, que entre otra distinciones tiene en su haber el de ser finalista del Premio Planeta en 2017 con la novela Niebla en Tánger.

 Novela juvenil y de fantasía, narra la relación de amistad de dos muchachos, que siguiendo los consejos del abuelo de uno de ellos, inician un increíble viaje de aventuras, lleno de piratas, islas misteriosas, tesoros y un barco capaz de atravesar cualquier tempestad sin hundirse, que les lleva a conocer a una sirena de la que se enamoran los dos. 

 Lectura entrañable y llena de fantasía; guardo con cariño el ejemplar que cayó por casualidad en mis manos, gracias a un servicio de intercambio de libros patrocinado por el transporte público de la capital. Gran adquisición por sorpresa.

 


 

martes, 1 de octubre de 2024

Abrázame, oscuridad

 Abrázame, Oscuridad, (Serie negra, Editorial Salamandra), es la segunda entrega de la saga de novelas protagonizada por la pareja de detectives Kenzie & Gennaro, ambientada en la costa este, en las calles de la denominada ciudad caminante de América, por ser la gran ciudad de los Estados Unidos en la que más gente va a trabajar andando.

 Boston y sus bajos fondos es, pues el escenario donde se desarrollan las peripecias de esta pareja de detectives que resuelven casos rodeados de matones de la mafia irlandesa y demás especímenes del sindicato del crimen de Massachusetts.

 En este caso, reciben el encargo de proteger al hijo de una importante psiquiatra amenazado por la mafia.En el transcurso de su trabajo reciben la noticia de la muerte de una amiga de infancia que aparece crucificada y mutilada, crimen con el que comienza una espiral de acontecimientos que les hace volar hacia atrás en el tiempo, para sacar de nuevo a la luz otros crímenes ocurridos en su etapa de infancia y que están relacionados con los actuales.

 Sórdida, trepidante, imprevisible, llena de giros y sorpresas, este trabajo del laureado y cinematrográfico Dennis Lehane, autor del texto que inspiró la película Mistic River, es un buen ejercicio de lectura, para apasionados de novela negra.

 


 

Terminaciones

 Comienzo mi baño, en esta ocasión mañanero, una alteración en mi mapa higiénico que ha adoptado la ducha nocturna como norma de un tiempo a...