Motivación existencial

Ricón para pequeñas reflexiones ahora que las puestas de sol se ven desde los cuarenta...
por Dondo Moreno




jueves, 30 de noviembre de 2023

Kissinger

 Centenario, un siglo de existencia contemplando un mundo del que ha sido demiurgo significativo.

 Nació judío y alemán,  en una época en la que ser creyente de sinagoga en tierras teutonas era equivalente a reservar una tumba segura; con su familia cruzó el océano,  inaugurando la moda de adscribir secretarios de estado postizos en el país de la bandera de barras y estrellas, nacidos en una Europa en ruinas. Años más tarde, Madeleine Albright, ocuparía su mismo sillón con precedentes parecidos. 

 Figura oscura y calculadora, inspiradora de una administración americana que desde entonces ha seguido, con todos sus matices, una línea de política exterior invasiva, con sutilezas o por las bravas; en muchas intervenciones es visible la larga mano del poderoso  lugarteniente de Nixon y Ford, aunque se lleve la palma el apoyo explícito a la asonada que arruinó la vida y la administración Allende en Chile

 Para muchos, un insulto que un personaje así haya recibido el Premio Nobel de la Paz, críticos con unos métodos que bajo cuerda han respetado poco o nada la soberanía de muchos estados libres. Nadie como Kissinger supo interprentar la doctrina Monroe: América, para los americanos.

 Otra figura del viejo mundo que desaparece. Por muchos años que llevara viviendo en el ostracismo, su pérdida ayuda a pasar una las últimas páginas de un libro, el del siglo XX, del que seremos deudores durante mucho tiempo. Las fichas del tablero establecido entonces, dentro de los límites de la Guerra Fría, aún siguen vigentes. Muere uno de sus personajes, pero continua la historia. 

 

 

miércoles, 29 de noviembre de 2023

Fake news

 Muy interesante la exposición que el Espacio Fundación Telefónica ofrece en su sede de la calle Fuencarral. Un despliegue de materal interactivo que arroja datos verdaderamente sorprendentes, como que son cerca de  setecientos cuarenta mil mensajes por segundo los que llegan a enviarse a través de la plataforma de mensajería whatsapp. Una locura.

 Fake new, anglicismo con el que se describe una noticia que pese a su divulgación, no es verdad; sinónimo de bulo, que algún día se recogerá  en el diccionario de la RAE, siempre atento a las expresiones y usos que forman parte del vocabulario de la calle.

 Por alguna razón tendemos a asociar manipulación a sofisticación, pero ya desde tiempos de los romanos, circulaban noticias planas u oscuras que solían ocultar fines poco lícitos,poco aceptables, moralmente hablando. 

 La saturación en la información que nos llega en la actualidad,(nunca antes habíamos dispuesto de tantos datos), impide que podamos procesar tanto material. Si en algunos casos se recurre a la opacidad para ocultar cosas, ahora basta con bombardear con excesiva información para alcanzar el objetivo: provocar desinterés o directamente confundir o engañar a quien busca estar al cabo de la calle.

 Cada vez hay más literatura disponible sobre los perversos logaritmos que construyen esas pirámides de datos que se transforman en material a distribuir para desinformar, gracias a esa autopista sin límites que parece ser internet. Si siempre ha sido importante estar al tanto de la actualidad, ahora, además, requiere de preparación para evitar ser víctima de bulos orientados a tal efecto.  La búsqueda de la verdad, nos obliga a ello.

 

https://espacio.fundaciontelefonica.com/evento/fake-news-la-fabrica-de-mentiras/

lunes, 27 de noviembre de 2023

Renacimiento narcisista

 Estamos de enhorabuena, Michel Onfray publica nuevo libro, Las razones del arte, publicado por la editorial Paidós.

  Frente a la visión de quienes piensan que cualquier tiempo pasado fue mejor, Onfray defiende la belleza del arte contemporáneo, ese que a menudo pasa desapercibido o es denostado por encontrarse carente de mérito o simplemente no entender lo que el artista pretende plasmar.

 Pero no sería un trabajo de Onfray si no escondiese detrás una crítica velada de la sociedad actual; para el filósofo francés no somos capaces de entenderlo ni disfrutarlo porque estamos aquejados de una suerte de narcisismo enfermizo en donde la pieza a capturar o degustar somos nosotros mismos y no la obra de arte en cuestión. Sin cambio de orientación en el foco de interés, la transmisión de sensaciones entre obra de arte e individuo se vuelve amorfa o simplemente inexistente.

 Vas a Egipto y te sacas una foto delante de la Esfinge. Luego la paseas a los cuatro vientos, a todo el que quiera verla y el que no, también; presumes de haber estado allí, de haberla visto, pero, ¿De verdad la has disfrutado, degustado, apreciado en toda su esencia?,  ¿ Realmente eres consciente de que la obra de arte es la escultura de piedra y no tú?

 En los tiempos de cámara a carrete, en cuántas fotos no salía nadie. Cierto es que solíamos pedir a alguien que nos fotografiase, pero era menos prioritario salir; entonces si eramos reporteros gráficos circunstanciales, captando imágenes del mundo desde nuestra humilde perspectiva.

 Ahora el foco es otro. Nos creemos el centro del mundo y la prueba de ello son los famosos selfies, instantáneas captadas con la cámara de un teléfono al que hacemos bien en denominar de otros modos: dispositivo, terminal... porque teléfono inteligente, hace tiempo que no lo es. 

 ¿Qué es la belleza, en dónde se encuentra?, ¿Sómos capaces de percibirla fuera de nosotros mismos?  Preguntas interesantes que igual conviene plantearse. En estos tiempos de sobre exposición, donde pretendemos estar en todas partes, gracias al campo infinito de posibilidades que supone internet. 

 Renacimiento digital de última generación, donde el sujeto es el centro. Excesivo.

 

 



Febril

 La imaginación vuela, en esa yogurtera que es la cabeza cuando duerme. Sueños que no siempre se recuerdan, pero que ponen de manifiesto que esa parte de nuestro cuerpo nunca descansa.

 La actividad se acrecienta, cuando el cuerpo anda destemplado o cruza el umbral de la subida de temperatura, considerada como normal. Cuantas más décimas, mayor ebullición en la caldera, como si de un experimento de laboratorio de química se tratase.

 Cuántos creadores han recurrido al artificio que producen diferentes sustancias para  encontrar inspiración, por frustración ante la carencia de ideas que plasmar, por simple hábito, sabedores de que en un estado normal, poco o nada tienen que decir. 

Por alguna razón innovamos más cuando somos nosotros un poco menos.

 De ahí la importancia de vivir en un cierto estado febril, que ayude a condimentar nuestra existencia. Es meritorio crear y ponerlo sobre un papel, en un pentagrama o en una sucesión de imágenes, pero es más relevante aún, si ese estado de intensidad, lo aplicamos al día a día. Cualquier actividad es susceptible de ser fuente de creatividad. Cualquiera.

viernes, 24 de noviembre de 2023

Especismo

 He descubierto que soy especista; aunque cada vez lo soy menos en lo referente a considerar a los seres humanos una especie superior al resto de animales; ejerzo como tal en mis hábitos alimenticios, incluyendo el consumo de carne en mi dieta.

  No hace mucho sufrí la censura de una excompañera de trabajo, vegana militante, que me afeaba mi comportamiento tras enterarse de que había votado a un partido animalista en las últimas elecciones generales. 

 ¿Cómo puede declarse uno defensor de los derechos de los animales, si no tiene reparo alguno en ingerir su carne como alimento?, me preguntaba ella. Menudo dilema.

 Para apacigüar las conciencias de gente como yo, ha surgido una nueva corriente de pensamiento. Ahora a las personas que tienen pasión por perros, gatos, focas o hipopótamos, pero que, en cambio, ingieren carne de pollo, cerdo o vacuno, se les denomina especistas: discriminan entre unos animales y otros por considerar que unos tienen mayor importancia, mientras que otros son tan sólo parte de la cadena alimenticia, seguramente por razones de índole cultural. 

 Reconozco que por ahora, no tengo grandes dilemas, que sigo perdiendo el sentido cuando me llega el olor de un buen jamón serrano, sin pararme a pensar en que ese jugoso manjar es la extremidad de un cerdo cebado y sacrificado, que orientó toda su vida a ese momento: a que su carne entrase en contacto con mi paladar. Capaces de encontrar trufas bajo tierra, con una inteligencia superior a la de un can o un delfín, no tenemos mejor manera de incorporarlos a nuestras vidas que como parte de nuestra dieta. Quizá sea un desperdicio.

  La corriente animalista avanza, lo hace a pasos agigantados, consiguiendo grandes avances, arrinconando y amenazando con la intrascendencia a lo que era, hasta hace no tanto, un espectáculo de masas, como la tauromaquia; de la capacidad que tienen sus tentáculos ideológicos de llegar a otras facetas de la vida, da cuenta éste debate alimenticio, que se cruza con otras corrientes de pensamiento que inciden en la necesidad de alejar de nuestros estómagos cualquier cosa que no los convierta en estercoleros. Los tiempos cambian y  las formas de pensar y alimentar, también. 

Convivencia

 Veo en un medio de comunicación escrito, un ranking con las quince nacionalidades que más presencia tienen en nuestro país. Ocupan lugares de podium, como si de una carrera se tratase, rumanos, colombianos  y marroquíes. 

 Tengo compañeros de esas tres nacionalidades en mi empresa, multinacional estadounidense acostumbrada a contratar personal en función de sus habilidades, especialmente idiomáticas; son todos ellos, por tanto, trabajadores cualificados, políglotas con estudios universitarios.

 Eso los convierte en inocentes de toda sospecha, en esta espiral de xenofobia que cruza la barrera del racismo en muchas ocasiones, en la que nos encontramos inmersos en toda Europa. Ya nadie se corta un pelo en acudir a las urnas exigiendo con su voto unas medidas de control mayores en lo referente a la libre circulación de personas. El último caso, lo tenemos muy reciente, con los resultos electorales alcanzados en Países Bajos.

 Con la mirada todavía puesta en los altercados ocurridos en Irlanda, en una noche de ruido, fuego e ira, en supuesta señal de protesta por el apuñalamiento de un mujer y varios niños a manos de un magrebí, se me ocurren varias reflexiones sobre el momento presente:

 - No deberíamos dejarnos manipular por determinados grupos de personas, de ideología ultra, que utilizan cualquier pretexto para provocar andanadas que buscan, ante todo, agitar y provocar ruido. Sin sensatez y mesura no hay planteamientos posibles.

 - La xenofobia de clase cada vez está más extendida. Cuando el migrante ocupa un puesto medio o alto en el escalafón social, nadie se cuestiona nada sobre la idoneidad de su presencia aquí. Por poner un ejemplo, hay más de doscientos quince mil franceses censados en España, nadie se siente invadido por ellos, a nadie le parece mal que se reunan y hablen en francés en una terraza de un bar, nadie les juzga por su apariencia, ni se les acusa de quitar puestos de trabajo a españoles.

 Como bien decía no hace mucho una destaca atleta española de color negro, en este país sólo somos racistas con los humildes; nadie con bolsillo notable es panchito, moro o negro de mierda.  

- Muchos de esos humildes, de hecho la inmensa mayoría, son gente sencilla y trabajadora, que viene a cubrir puestos de trabajo que la mayoría de los que somos de aquí no queremos hacer, menos por los salarios que ellos sí aceptan. Se merecen más que respeto, hay que estarles agradecidos porque vengan y se queden.

- Seguramente sean pocos, tendrán que llegar bastantes más, en un país con una tasa de natalidad tan pobre. Si no nacen niños aquí, no podemos esperar cubrir todas las necesidades que como colectividad tenemos. Es una cuestión de números. Elemental.

- Es despreciable la permanente comparativa que algunos hacen tratando de asignar el aumento de la delincuencia en todos sus niveles, a personas que llegan desde fuera; como si hubiese diferencia alguna entre quien delinque nacido aquí y quien lo hace con otra procedencia. Preocupan las llamadas al odio que incendian y provocan oleadas de intolerancia, llevando por delante a inocentes. Cruel es que asesinen a un niño, pero nada tiene que ver la procedencia de su asesino con su comportamiento. Nada de medir a todo el mundo por el mismo rasero. Que la ley sea implacable con quien la incumple, sólo con él.

 Todo en la vida son ciclos y éste en el que vivimos es especialmente turbulento; recuerda en muchas cosas al clima de los años treinta del siglo pasado, que trajo como consecuencia, el ascenso de alguna de éstas ideologías extremas a países muy importantes del viejo continente, con las consecuencias posteriores que todos ya conocemos. Estoy convencido de que no llegaremos en esta ocasión tan lejos; por si acaso, no dejemos de estar en alerta, poniendo distancia con según qué soflamas y comportamientos, ni dejemos que nos arrastren al barro. Somos gente inteligente, aunque a veces, no lo parezca.

 


 

 


 

jueves, 23 de noviembre de 2023

Marcha

 Quiso y cree que volverá a querer, aunque, eso sí, lo ve en un horizonte no especialmente muy cercano.

 Autoprotección. Siempre buscando controlar lo que es incontrolable. Nadie sabe cuando viene, nadie  lo espera cuando se va.

 Eterna batalla por tener todo atado, incluso lo mas etéreo e inmaterial. Lo cierto es que pocas son las cosas de las que podemos presumir como realmente amarradas. Vivimos en un mar de incertidumbres, de cosas variables, cada día.

 Al andén y a esperar a que pase el siguiente convoy. A disfrutar del viaje o de lo que se pueda de él. Continúa la marcha.

 

  

miércoles, 22 de noviembre de 2023

Bienaventurados

 Tiempos de déficit, de carencias en el respeto a las ideas del otro, a la libertad de opinar. Censuras por decir algo que no gusta, que resulta inconveniente. 

 En contra del pensamiento único, como defendía Joaquin Estefanía. Si en la variedad está el gusto, en la oportunidad de decir cada uno lo que piensa está la salud de una sociedad.

 Enfermos de control, de sentirse superiores moralmente; mal río es aquel que no sigue meandros ni se desborda cuando crece su caudal por lluvias abundantes; agua que no has de beber, déjala correr. 

 No se trata de hacer comparaciones, porque siempre son odiosas; ni antes ni después, sólo vale el aquí y ahora y por convención, la que marcar el respeto, la mejor manera de mostrar consideración hacia el otro. Todo siempre construido sin desfallecer, día a día. Ningún logro es para siempre; todo es suceptible de deteriorarse.

 Tiempos cada vez más oscuros, hay más cambios aparte del climático. Temperatura bajo cero, medida por los termómetros de la intolerancia.

 Como no parece tener fin la caída de calidad en la convivencia, sólo cuando lleguemos al fondo y retocemos en el lodazal como una piara de cerdos, podremos seguir aquello que decía Serrat: Bienaventurados los que están en el fondo del pozo, porque de ahí en adelante solo cabe ir mejorando...

 Lástima que tengamos que caer para volver a subir. Que nos devuelvan a las aulas y nos impartan alguna suerte de nociones de física, para enseñarnos que lo que verdaderamente resulta valioso, es mantenerse en lo que suma, integra y no menosprecia. Ninguna generación esta libre de tropezar con esa misma piedra, por mucha historia escrita que haya.

 

 

martes, 21 de noviembre de 2023

Momo Saavedra

 Se nos ha ido el Momo Saavedra, a los ochenta y siete años. Con la misma elegancia y sencillez con la que se comportó tanto en el ámbito privado como en el político y público.

  Primer Presidente de la Autonomía Canaria, es unánime la opinión tanto sobre su gestión como sus formas en el archipiélago. Como gestor promovió la potenciación de las islas como destino turístico de primer nivel y en esa línea se han movido las sucesivas administraciones y presidentes que ha tenido el gobierno insular. Pionero en toda regla.

  Miembro de una estirpe de políticos educados, hechos de otra pasta, ajenos a la tensión, gestos abruptos  y falta de formación que muestran ahora muchas de sus señorías en las cámaras de representantes. 

 Ministro con Felipe González, desempeñando labores en dos carteras, la de Administraciones públicas y la de Educación, siempre será recordado por ser el ministro que puso a las islas en el lugar del mapa correcto, sacándolas del clásico cuadradito que habitualmente se colocaba debajo de las Baleares, llevando a confunsión a muchos niños, que luego quedaban perplejos, cuando se enteraban que en realidad estaban mucho más abajo, frente a las costas de África, pero no en el Mar Mediterráneo, si no en el Océano Atlántico.

Que la tierra te sea leve. Descansa en paz.

 

 

Democracia virtual

 El otro día en la peluquería pasamos una situación un tanto rocambolesca. Tras terminar mi corte de pelo, a la hora de pagar, quiese hacerlo con tarjeta, algo inhabitual en mí,  pues suelo llevar efectivo para este tipo de cosas; tras pasar repetidas veces la tarjeta por el datáfono, este negaba la posibilidad de que se realizase la operación. 

 Momento embarazoso; aunque sabes de sobra que hay dinero en la cuenta, quien te cobra desconoce tal hecho; que piensen que estás tieso o que eres un moroso te produce una sensación de incomodidad que intentas solventar a la carrera. Tras ofrecerme a  hacer un Bizum al número de la peluquera, para mi sorpresa me encontré en la misma situación: la página de mi banco denegaba la posibilidad de la operación. 

 Afortunadamente otra clienta vino en mi rescate, al encontrarse con los mismos obstáculos, tampoco a ella la tajeta le permitía hacer el pago. 

 - Debe ser algún problema de la red, dijo entonces la chica. Pronóstico certero.  

 Tras salir del establecimiento para acercarme a un cajero cercano y sacar efectivo para poder pagar, no tardaron en llegarme noticias de que Redsys la plataforma de pagos con la que operan infinidad de empresas, había sufrido una incidencia, que afectaba a datáfonos, transaciones on line y cajeros automáticos, aunque esta última en mi caso no ocurrió, afortunadamente.

  La avería apenas duró algunas horas, en un sábado en las horas centrales del día; a cuántas personas pudo afectarnos en ese momento, puede ser casi imposible de saber, pero no deja de ser impactante ver cómo un simple fallo en el sistema puede poner patas arriba a infinidad de empresas y personas, habituadas a hacer transacciones por vía telemática.

 Como si fuéramos fichas de un dominó, basta con que caiga una para que nos venzamos todas en perfecta fila. A veces da un poco de miedo ver el grado de conexión conque todo está formulado; Aldea global que proporciona grandes comodidades que se convierten en grandes problemas cuando fallan, haciéndonos vulnerables en masa. Nada hay más democrático que la red y sus circunstancias: cuando se cae internet, no hay clases, ni ricos ni probres, nos caemos todos con todo el equipo. 

 

 

lunes, 20 de noviembre de 2023

La ministra

 Acaba de hacerse pública la composición del nuevo Gabinete de Gobierno. Veintidós sillones formarán parte del Consejo de Ministros, doce de los cuales estarán ocupados por mujeres.

 Como ocurre habitualmente, el anuncio produce sorpresas, aunque no me imaginaba que eso pudiera repercutirme ,de algún modo, a mí.

 Resulta que este verano, descansando en el albergue de peregrinos de Armenteira, una pequeña localidad de montaña de Pontevedra, cuando ya caía la noche y apurábamos la conversación unos cuantos de los que allí estábamos, la inmensa mayoría de ellos italianos, antes de irnos a dormir a las literas, aparecieron dos chicas que llegaban a última hora, puesto que habían reservado la litera, (el de Armenteria es uno de los pocos albergues públicos que permiten esta opción). Sin apenas acomodar sus cosas en el interior, salieron al porche de entrada para sumarse a la conversación, tomándose una cerveza con nosotros y contándonos su etapa, que poco había tenido de peregrinaje: baño en la playa, ingesta de marisco en un restaurante en Combarro, y tardeo en las proximidades del Monasterio donde terminaba la jornada, dejándonos dudas de si realmente habían cubierto los veintitrés kilometros de la etapa, incluidas las duras cuestas del Camino Vilar hasta el Mirador do Loureiro.

 Risueñas y parlanchinas, seguramente fruto de los efectos de la cerveza, no tardaron en comentarnos cosas de su vida: Su estado civil, una residente en Pamplona y la otra en Madrid, funcionarias de distintos cuerpos y una metida en política,sin especificar si ocupaba algún cargo... Investigando por mi cuenta días más tarde, descubrí que fue Delegada del GobiernoConsejera de Economía y Hacienda del Gobierno Foral, además de Concejal del ayuntamiento de la capital de Navarra, hasta ayer. 

Desde hoy es la nueva Ministra de Seguridad Social, Elma Saiz.  

 Curiosidades del Camino. Quién nos iba a decir que ibamos a  hacer noche con una futura ministra del Gobierno de España.

 

 


viernes, 17 de noviembre de 2023

Asonadas

 Sigue habiendo militares que piden ruido de sables cuando las cosas vienen mal dadas. Jubilados que han hecho valer su opinión, encendiendo una mecha de la que se han hecho eco todos los medios. No estamos en el año ochenta y uno.

 Son más de cuarenta años de distancia. Mal que pese a algunos, ciertos hábitos han hecho callo y son parte del día a día y la cultura política del país. Ningún militar entiende su función si no está supeditada a la sociedad civil y a lo que dictaminan sus dirigentes. Escala de mando en la que no hay atajos, más sin encima faltan los motivos.

 Que saquen sus pendones llenos de olor a naftalina todo lo que quieran, en sentido literal o figurado, que ahora los marrones se resuelven de otro modo. No necesitamos tutelas por parte de ningún iluminado que se da ínfulas de padre de la patria. 

 En la linea de las soflamas de algunas que van cacareando desde algunas tribunas que vamos camino de una dictadura, que miren qué hacen para no revertir las cosas, ni convencer a la gente para que haya otras mayorías de gobierno. Cuanto más braman, más muestran su incompetencia.

Porque ya se sabe, aquí la culpa de todo lo que está mal,  siempre, la tiene el otro.

 

jueves, 16 de noviembre de 2023

Buenos días, Don Pío

 Coronando la Cuesta de Moyano, allá donde los adictos al libro en papel aún tienen un reducto para encontrar verdaderos tesoros, luce altivo y expectante, alzando la mirada hasta donde la vista alcanza.

 No hay noche ni niebla que disipe ese grado de altivez, ganado a pulso con esa pluma elegante y sencilla, capaz de construir relatos costumbristas, llenos de matices y enseñanzas, tan limpios, tan sumamente cuidados en el estilo, que invitan a su lectura, a la que uno se vuelve adicto, irremediablemente.

 Como cada mañana que voy a la oficina, tras dejar atrás la Estación de Atocha, ( sigo son acostumbrarme a llamarla por su nuevo nombre, el de Almudena Grandes),  obviando el trasiego en el diecinueve para llegar a la Plaza de la Independencia por la Calle de Alfonso XII, en ese cruce de caminos que convierte en un simple paso el saltar de la calle de los libros al Parque del Retiro, allí paso a su lado alzando la mano para mandarle un sincero saludo de agradecimiento, por tantas horas de lectura tan bien aprovechadas como disfrutadas: ¡Buenos días, Don Pío!

Pocos personajes ilustres merecerán su pedestal tanto como éste, en esta parte del Foro, cuajada de monumentos de homenaje y reconocimiento.

 


 

 

 


 

miércoles, 15 de noviembre de 2023

Gentrificación

 Es un hecho cada vez más obvio y evidente, del que se da uno cuenta sin tener que documentarse sobre ello. De un tiempo a esta parte cuando se va por el Barrio de Salamanca de la capital, es muy significativo escuchar hablar a gente en castellano con acento latino. 

 Por supuesto que son muchos los trabajadores de tiendas, negocios de hostelería y demás que tienen su puesto de trabajo en esta zona acaudalada de la ciudad, pero en este caso, los que hablan con acento de América del Sur no son los trabajadores, sino los clientes que frecuentan esos lugares.

 Como si de una moda se tratase, son muchos los ciudadanos de Venezuela, Colombia, Perú e incluso Chile que están comprando viviendas en esta zona de Madrid para instalarse en ella. Miembros de familias de muy alto poder adquisitivo que están invirtiendo en un distrito al que le están cambiando la cara.

 Un fenómeno que podría encajar en la definición de gentrificación, cuando personas de estrato social alto se interesan por una zona depauperada para invertir y llegar a vivir en ella; no es precisamente el caso de este vecindario, que nunca ha dejado de tener su pompa y boato, aunque este nuevo espaldarazo económico está devolviendo a la zona a un elevado caché, quizá perdido años atrás.   

 De las razones que han llevado a estas personas a instalarse en esta parte del Foro, podría hablarse mucho, pues muy distintas parecen las causas que llevan a un chileno rico a expatriarse en lugar de un venezolano, a tenor de las diferentes situaciones políticas que viven ambos paises. Lo que sí les iguala es el trato que recibirán en base a su condición social; los panchitos, guacamayos y sudacas sólo proceden de estos países si su bolsillo es precario. Esta especie de nuevos indianos, que conquistan la capital de la metrópoli a golpe de talonario e inversión urbanística, serán obsequiados con parabienes y atenciones, sin menoscabos y afrentas por su origen, rasgos o acento. Poderoso caballero siempre es don dinero, que decía, (y con razón), Quevedo.

 

 

martes, 14 de noviembre de 2023

Solar

  Se me hace duro, pero no, no voy a hablar de ninguna amnistía; siento que malgasto mi tiempo y mis energías en un tema que además de cerrado, no va a alterarse mucho por lo que yo pueda opinar. Lo que pienso ya lo hice valer en las urnas, cuando nos llamaron a votar; hablar en otras condiciones, cuando no tienes forma de hacerte oír realmente,  es una pérdida de tiempo.

 Por eso prefiero dirigir mi mirada hacia otros derroteros; me niego a pasarme encabronado todo el tiempo, visto lo visto.

 La política en este país es un lodazal de mucho cuidado; triste ver tanta incompetencia, tanto pusilánime y arribista, tanta flema carente de reposo alguno; no quiero estar a la altura de semejantes botarates. No me representan, por mucho que ocupen escaños en el hemiciclo de la Carrera de San Jerónimo. Soberanía popular impostada, anulada por incompetencia. El parlamento es un solar.

 Prefiero asomarme a la ventana y mirar a otro solar, este vacío, el que veo desde mi casa; espacio baldío y descuidado, lleno de matas y maleza; refugio de roedores que algún día será espacio ocupado por otro edificio; mientras eso ocurra, ese vacío paradójicamente es luz y calor para mis días, al no tener mi casa obstáculo que proyecte los rayos del sol en mis ventanas.

 Hay solares que iluminan y dan energía, otros frustran y generan malestar, me quedo con el mío, el que me da vida.

 

 

lunes, 13 de noviembre de 2023

Ser de pueblo

 Visitar un pueblo pequeño en compañía de un autóctono del lugar te convierte en centro de atención sin buscarlo. Miradas más o menos descaradas, comentarios discretos, aunque siempre hay alguno que se lanza a saludarte y preguntarte quién eres y de dónde vienes, sin filtros. Tiene su punto de gracia, es agradable y te hace experimentar cosas que tienes adormecidas en tu día a día.

  Reconozco que en parte me da envidia; la vida de ciudad grande está cargada de anonimato, ese que en una parte de la vida se busca con gana y que con el paso de los años se estima menos. Tan rodeados de gente como estamos, apenas si conocemos a nadie. Hasta cinco vecinos tengo en el rellano de mi piso y no he mantenido conversación alguna con ninguno en doce meses, eso sin contar con que cuatro de ellos, ni siquiera sé qué aspecto tienen. Estando en mitad de una muchedumbre somos invisibles, presencias de las que tenemos constancia por ruídos, por cuenta de una lavadora que centrifuga o un aparato de música que pone regetón siempre a la misma hora. Detrás de esos hechos cotidianos hay alguien, pero ese alguien no tiene ni rostro, ni identidad.   

 El vínculo es algo reducido, acotado al espacio familiar y de amistad. Fuera de él la interacción humana es una excepción, cada vez más alejada de lo que se supone que debería ser una regla.El teletrabajo redunda en ello, todavía más, si cabe.

 Tal vez por eso a los que vivimos en sitios grandes nos gusta aprovechar el tiempo libre en visitar sitios así; es como un canto de humanidad, de calor al que somos ajenos; cada vez pienso más que ser de pueblo y vivir en él, es una suerte.

viernes, 10 de noviembre de 2023

Premios literarios

 Da la casualidad de que el premio literario más importante del mundo, al menos en lo que se refiere a la dotación económica se entrega en España. Así que igual que el Nobel es el premio que mayor reputación da, en el caso de la cuantía a ganar, es el Premio Planeta el más notorio.

 Premio con ínfulas de alcanzar repercusión acorde con el nombre de la propia editorial, pese a la limitación que supone el concederse tan sólo a trabajos publicados en lengua castellana. El músculo financiero y el poder que representa el Grupo Planeta, dan a la concesión del mismo una trascendencia que supera a la de otros premios;  No es el Cervantes, pero el morbo y tensión que hay detrás del momento en que se conoce el nombre del artista ganador, es muy significativo.

 Desde mis inicios como lector serio, que es casi como decir desde que tengo uso de razón, he seguido con curiosidad la entrega de este galardón, junto al Nadal, dos de los grandes premios literarios del sector privado, ambos dados a conocer en sendas cena-gala celebradas en Barcelona, la gran capital del negocio editorial en este país. No deja de ser curioso que por cuestiones políticas, haya quien niegue a la Ciudad Condal, la honorable distinción de capital de la novela en castellano; obtusos de obcecación enfermiza que niegan la mayor anegados en su ahíta militancia.

 Acusado de ser un reconocimiento que prima antes el espectáculo que la calidad de los textos que se presentan, este año ha protagonizado un nuevo episodio de dimes y diretes al conceder el premio a una periodista y presentadora de televisión, de cuya carrera como escritora poco a nada se sabía hasta ahora. 

 ¿Puede ser la literatura de calidad también comercial? La eterna discusión que año tras año el grupo de la familia Lara pone sobre la mesa. Lo cierto es que lo uno no va sin lo otro; sin ventas no hay posibilidad de publicar y si no se publica no se dan a conocer textos que sin duda merecen su lectura. Que el ruido de un premio, sea merecido o no,  no oculte la importancia que tiene para atraer compradores y lectores. Un mercado, como otro cualquiera, del que las artes, desgraciadamente no están exentas.

jueves, 9 de noviembre de 2023

Mercado de abastos

 Víspera de festivo en Madrid. La Almudena trae frío y horas extra para dormir, tiempo libre para hacer cosas fuera de casa. Como otras veces, apuesto por dar una vuelta por el vecino Aranjuez.

 Pueblo de cuadrículas perfectas, calles rectas de pisos bajos que confunden y desorientan al neofito, Iluminado por la belleza de su Palacio Real y especialmente de su emplazamiento, a la vera del Tajo, haciendo de su visita un tiempo bien aprovechado. Casi disfruta uno más de la vista del agua, que con tanta bondad trata a esta tierra bañada por el rio principal y su afluente, el Jarama, a escasa distancia uno de otro, fuentes de riego generosas para estos campos de fresón y  espárragos.

 Con tanta belleza, cuesta creer que la sede de los Reales Sitios no goce del reconocimiento de la UNESCO y siga con la nominación a Patrimonio de la Humanidad vetada, privilegio que sólo en la Comunidad alcanza Alcalá de Henares

 Dejo a un lado el puente que orilla al Matilde frente El Rana verde, dos de los establecimientos de hostelería más sonados de este lugar, con salón para comidas  y embarcadero al río; me adentro por sus calles adoquinas, cuajadas a ambos lados de tiendas y desemboco en la Plaza de la Constitución que en una punta muestra la sede del Ayuntamiento y en el lado opuesto, el Mercado de abastos.

 Dadas las hora, la mayoría de los puestos ya han echado abajo la cancela, aunque quedan algunos abiertos despachando  a los últimos clientes, que procastinan la compra en busca de ofertas de fin de fiesta, que permitan llevar género a casa por menos dinero. Miro al techo y disfruto del complejo de vigas de hierro que sostienen un tejado a dos aguas revestido de uralita.  

 Mercado que sigue siendo mercado, que no ha sucumbido a la moda moderna de convertir sus puestos en lugares de restauración. Me pregunto cuanto durará indemne.

 Mercados de abastos que en su tiempo eran un hervidero de almas buscando lo mejor para sus cestas de la compra y que han caido en un declive irreversible fruto de los cambios de hábito en las compras. Renovarse o morir y en la medida de lo posible, conservar. Son patrimonio de un tiempo pasado que no por cumplido hay que dejar morir del todo. 

miércoles, 8 de noviembre de 2023

Los años lentos

 Los años lentos, publicado en dos mil doce por Editorial Tusquets en su Colección Andanzas, es la segunda entrega de la trilogía Gentes Vascas, reciéntemente culminada con el último titulo publicado por Fernando Aramburu Hijos de la fábula

 Este trabajo fue galardonado con el VII Premio Tusquets, Editores de novela. 

 Curiosamente estoy leyendo esta trilogía en sentido inverso, desde la última obra publicada, quedando por lo tanto pendiente la lectura de Los peces de la amargura, publicada en dos mil seis. 

 Todo orden cronológico obedece a unas causas, aunque la lectura de estos tres libros por separado, puede realizarse y no resta un ápice de interés a la obra completa, al ser tres historias independientes con sólo un nexo en común: la banda terrorista ETA

 Ambientada a finales de los años sesenta, cuenta la historia de un niño que debe alejarse de su familia como consecuencia de la premura y falta de recursos de ésta; mientras sus hermanos acaban en un hospicio, éste termina consiguiendo asilo en casa de la hermana de su madre, en la capital guipuzcoana, desde su pueblo de interior en la vecina Navarra.

 Historia de gentes sencillas y muy humildes, que viven en paz y armonía hasta que las encendidas diatribas nacionalistas del párroco de la zona alimentan en Julen, primo del protagonista, soflamas políticas que le instan a cruzar la frontera hacia Francia, para iniciar su militancia en ETA.

 Escrita en formato de diálogo entre el protagonista y el propio escritor, como si de una conversación privada se tratase y en donde se registran notas con posible material a añadir al escrito, Aramburu juega con el lector a ejercitarse en la tarea del creador, en el proceso de obtención de la información que después ocupará el grueso de la narración. Con esa complicidad se construye este trabajo, sencillo pero de hondo calado, que reproduce con gran nitidez, el ambiente de unos años en Euskadi que marcaron la vida y la historia de aquella tierra y de todo el país. Pese a sus muchos detractores, la lectura de estos textos es una tarea necesaria para que no caigan en el olvido hechos tan tristes y tenebrosos como, afortunadamente, pasados.

 


 

martes, 7 de noviembre de 2023

Escarceos

 Escarceos en la calle, claramente orquestados, pensados para hacer ruido y agitar. Quién nos hubiera dicho hace tiempo que quienes blanden la opción de la agitación social para elevar el tono de la indignación fueran los que se ubican en las bancadas a la derecha del hemiciclo.

 Es el recurso más socorrido, cuando en las instituciones no tienen suficiente fuelle, tirarse a la calle y mover a las masas, al menos a la de la propia cuerda, para que  así se diluyan las mentes individuales en la masa del grupo, sin más meta que actuar antes que pensar.

 En medio de la tensión en que esta legislatura no nata se manifiesta, mucho me temo que veremos mucha pancarta, mucha protesta a grito pelado, mucho discurso escaso de comedimiento. Como si fuera parte de un código genético ancestral del que no conseguimos despegarnos para adquirir algún tipo de mesura.

 Acción, reacción, acción; ahora sólo falta ver cómo encaja la otra parte el órdago, en puertas de comenzar la tarea de gobernar, con un indulto con pátina de amnistía que no se creen ni ellos mismos. Vienen días, semanas y meses de calenturas evidentes. Que la cosa no llegue a las manos o más lejos, que para eso deberían estar los parlamentos, para parlamentar. Qué grande le viene el traje a la mayoría, repleta de vocingleros y pusilánimes.

 

  

lunes, 6 de noviembre de 2023

Mañana y tarde

 Jon Fosse es un prolífico dramaturgo, con varias décadas de trabajo a sus espaldas que además de teatro, escribe novela y ensayo. Traducido a cuarenta idiomas, su obra es una de las más destacadas de la literatura nórdica, en particular de la que se genera en Noruega.

 Desde hace unas pocas semanas su trabajo como creador literario y de contenidos ha sido reconocido con el galardón más prestigioso que en las letras se puede obtener: El premio Nobel de literatura. 

 Poco conocido para el gran público, desde que se supo la concesión de la distinción otorgada por la Academia Sueca, ha traído como resultado que los estantes de las librerías se llenen con obras de su puño y letra.

 Entre todas ellas, puede resultar interesante para iniciarse en la lectura de la obra de Fosse esta novela corta titulada Mañana y tarde, publicada en español por la Editorial Nórdica Libros.

 Cuenta la historia de un hombre sencillo, Johannes, pescador y padre de familia que vive en una pequeña localidad costera, narrada desde el nacimiento hasta la propia muerte, comprimiendo en un pequeño puñado de páginas toda una vida, en la que sólo se resaltan los hechos mas sencillos, llanos y cotidianos. 

 Escrita con brío y fluidez, cuya lectura avanza a paso vertiginoso gracias a una puntuación en la que escasean los puntos, concluye con la descripción de la muerte del protagonista, cuyo paso a la otra vida, es narrado con una sencillez y belleza que conmueven. Posiblemente el pasaje referente a la muerte más hermoso que haya tenido la oportunidad de leer hasta la fecha.

 Conmovedor, profundo, espiritual. Es difícil mostrar tanto con tanta sencillez. Otro merecidísmo reconocimiento, como ocurriera en dos mil diecinueve, con la concesión de este mismo premio a la polaca Olga Tokarczuk.

 


 

 

 

viernes, 3 de noviembre de 2023

El rayo de Lutero

 Días de tiempo con furia, con ráfagas de aire tremendas; hasta setenta kilómetros por hora en algunas zonas; condiciones atmosféricas de otros páramos, más habituados a las galernas.

 Leo con horror que una chica de veintitrés años ha fallecido al caerle encima un árbol de más de veinte metros; las fotos muestran el suelo levantado como si fuera de chicle, donde antes estaba la base de la planta. En el centro de Madrid, en la hermosísima Calle Almagro, un árbol inmenso cruzado en mitad de la vía. La señorial calle de edificios imponentes luce desangelada con una sensación de abandono que se acrecienta al saber los detalles de la tragedia.

 La chica caminaba casualmente por allí acompañada de sus padres, que han sido testigos del suceso, a la vez que son supervivientes pues podrían haber sido cualquiera de ellos los afectados. Son atendidos en el mismo sitio, presa de un ataque de ansiedad. Difícil imaginar una escena de mayor dramatismo.

  Fruto toda ella del azar, de la mala fortuna, de la simple casualidad de pasar andando justo por un sitio en donde un árbol tenía que vencerse para caer al suelo. Si el destino está escrito, qué cruel e injusto es.

 Observando todo esto me ha venido a la cabeza el recuerdo de la experiencia traumática que vivió el padre de la reforma protestante, Lutero, volviendo a su casa de Erfurt, cuando en medio de un paraje un rayo cayó justo a su lado,  derribándolo como consecuencia de la presión del aire y de la fuerza con que la electricidad golpeó el suelo en sus inmediaciones. Impactado, cuenta la leyenda que invocó a Santa Ana y entonces prometió que dejaría su prometedora carrera como abogado para coger los hábitos.

 Momentos impactantes, tremendos, situaciones que la mente ha de digerir y que pueden desembocar en decisiones insospechadas. La vida y su coste de oportunidades; en ocasiones basta con acercarse a las motivaciones que hay detrás de algunos actos, para entender con sola una parte el todo de una persona. Elementos sobrevenidos, no buscados, que marcan una trayectoria, toda una vida.

 

jueves, 2 de noviembre de 2023

Plan de evasión

 Escrita en mil novecientos cuarenta y cinco, en plena euforia por la finalización de la II Guerra Mundial que dio paso al  más profundo de los horrores al saberse las atrocidades cometidas por los nazis en los campos de concentración, con esas referencias de base, Adolfo Bioy Casares escribe Plan de evasión.

 Reeditada por Ediciones Debolsillo, narra el traslado del teniente Nievers a un complejo carcerlario ubicado en la Guyana francesa. Lo que iban a ser unos meses de trabajo y formación en uno de los más señalados lugares del sistema penitenciario, acaba por convertirse en una experiencia traumática, en la que el protagonista se ve envuelto en una serie de misteriosas muertes y fenómenos extraños, todos ellos parte de las prácticas seguidas en el recinto con los presos allí confinados.

 Con el habitual lenguaje que Bioy Casares imprime a sus relatos, sencillo y lleno de giros que convierten a la lectura en una sensación única, se arma esta historia cuya atmósfera de misterio y magia, acompañará a gran parte de los relatos de este maestro de la novela de fantasía y misterio. Con Plan de evasión, además el autor hace su particular critica a los sistemas represivos y de control que tanto juego han dado siempre en la historia de la literatura, en forma de distopía u otros modelos. Su lectura es sin duda una buena forma de iniciarse y acercarse al mundo creador y literario del autor argentino.




 

miércoles, 1 de noviembre de 2023

Silbos

 Lenguaje en las islas, patrimonio inmaterial de la humanidad. Detrás de cada ráfaga de aire, hay un mensaje.

 Hoy hablan las persianas cada vez que el viento sopla, transmitiendo sonidos a través de sus rendijas, golpeando el metal a cada embestida contra el cristal de mi ventana.

 El ciclo de la comunicación más natural, menos previsible. Emisor versus receptor bajo un cielo plagado de nubes negras que anuncian lluvia en cualquier momento. Silbos de la ciclogénesis.