Abres la ventana con la intención de refrescar un poco el ambiente, cargado. Calefacción y moqueta son mala combinación, sea el momento del año que sea; festival de ácaros que reseca la garganta, botella de agua que rellenas una y otra vez de la fonteta para quitar la sensación que raspa en la garganta. Resultado: mearte por las esquinas como un perro.
Para rematar, digestión lenta y pesada, propia de las comidas con plato de cuchara. Ojos rojos que se fijan en las letras de las teclas, que por momentos se juntan o se ponen borrosas. Cadena de botezos contagiosa.
Panaceas en forma de paseos, dar algunas pedaladas en la bicicleta estática del pasillo. Todo sea por volver a la concentración en las celdas de hoja excel. Resultados que no llegan.
Reloj que corre lento, que se une a la fiesta; tardes para enmarcar de sopor entre semana; cantinela y rutina del chupatintas currante.
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