Otro año que se marcha.
Otro año con mucha marcha.
Otro año de soliviantos, empecinamientos, caras largas y frustraciones.
Parece como si estuvisemos abonados.
Doce meses completos de provisionalidad, de denuncias y pleitos.
De bolsillos estancados e improperos cruzados.
¿ Es un año perdido?
Para nada, solo un necio no aprovecharía el bagaje creado,
más si cabe si es tan negativo.
Así que 2020, solo una cosa te pido:
que nada de lo hasta hoy acaecido,
caiga en saco roto ni deje de servir.
Este año más que nunca
las doce uvas han de ser uvas de la suerte
aunque para nosotros la suerte dependa más de cabezonerías que de azares
¡Salud y más voluntad que suerte!
martes, 31 de diciembre de 2019
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
-
¿ Qué es mejor, leer el libro o ver la película antes? Normalmente los que son lectores avezados se decantan por lo primero, buscando en...
-
Me he acordado de una vieja novia cuyo vínculo duró poco tiempo, entre otras cosas por encontrarnos en tiempos vitales muy diferentes. Alg...
Torrijas
Acaban de enviarme un video de los muchos que se publican en redes sociales y lo que en él se cuenta es muy cierto. Da una proyección fide...
No hay comentarios:
Publicar un comentario